Las Vegas

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Las vegas.

La ciudad del pecado.

Una de mis ciudades favoritas en todo el mundo.

Era la ultima promoción para la pelea y tal como lo había dicho Sebastian, nos habíamos hospedado en el Caesars Palace, con todas las atenciones de su dueño.

El hotel era enorme, con el toque sofisticado e inspirado en Roma no olvidando que estan en las Vegas ya que a cada lado que voltearas había una mesa de juegos o algún tragamonedas.

  — Juleees — Arrastre su nombre en forma de suplica para que me dejara al menos, perder mi dinero en una maquina. El tomaba mi brazo y guiándome hacia la habitación.   

  — Darling, no  — Soltó un suspiro. — Luego no queras irte— Me solté de su brazo y seguí mi camino dejándolo atrás. Por suerte si pude dar con la habitación.

Me asombre por la vista tan hermosa que había y decidí postear una foto a mi red social; tenia a Las Vegas a mis pies.

  — Deberias descansar  — Me recargue en el marco de la ventana.

  — Ire un rato al gimnasio del hotel   —  Dejo de desempacar sus cosas y vino hacia mi para abrazarme de espaldas a el tomándome por la cintura.
Asi permanecimos por varios minutos, observando la ciudad. En ese momento solo el sonido de nuestras respiraciones se escuchaban, eramos solo el y yo. Y siempre seria asi, el unico que aguantaba mis humores, mis malas palabras, mis ataques de furia, todo. Pero tambien se llevaba lo mejor de mi, mis risas, mis bromas y travesuras, mis abrazos y mis besos.

El aura de felicidad se habia cortado al escuchar a mi estomago pedir comida. Estalle en carcajadas y el se contagió.

  — Vamos a comer, darling   — Jules beso mi frente y tomo mi mano para salir de la habitacion.

  — ¿El gimnasio?  —  Lo detuve antes de salir.

  — Mañana entrenare todo el dia — Me dio una sonrisa y seguimos tomados de la mano hasta salir al lobby.

  — Buenas tardes chicos  —  Sebastian aparecio por la gran puerta con una sonrisa y al ver nuestras manos entrelazadas se borro. — ¿Saldran? —  Jules saludo y contesto a la pregunta con un "Si", yo solo me limitaba a escuchar la conversación.  — Disfruten mucho su estadía por aquí— Se despidió y seguimos nuestro camino. 

En mis pensamientos estaba la acción de Sebastian al bajar la mirada hasta nuestras manos que no le prestaba atención a lo que Jules me decía. 

  — ¿Aquí?  —  Preguntaba cada vez que pasabamos por un establecimiento de comida.

  — Si  —  Conteste algo cansada y entramos en silencio, Jules se dirigió a pedir la orden y yo busque la mesa mas escondida que hubiera.

  —  ¿Que te pasa? — Jules hablo después de varios minutos en los cuales yo estaba viendo por el ventanal.

  — Sebastian  — Me removí en mi asiento y vi a los ojos a Jules. 

  — ¿Que hay con el? — Jules parecía extrañado al mencionar el nombre.

— Es que no es como que alguien te vaya a felicitar personalmente, después que te ofrezca su hotel gratis dándote todas las atenciones y lo mejor— Suspire. 

  — Supongo es pura publicidad para su hotel, tu eres la campeona en el boxeo femenil y mi pelea sera una de las mejores—  Se encogió de hombros.

  —Si, creo que debería de dejar de tener esos pensamientos — Sonreí y trate de pensar en otra cosa, como la comida. 

El pedido había llegado, Jules pidió ensalada y a mi  alitas. 

  — ¿Tanto a si te torturas que dejas que tu novia, la que esta enfrente de ti, pueda comer alitas y tu no?— Empece a reír.

  — Es que la próxima vez que salgamos, tu vas a pagar y me vas a comprar alitas  y tu ensalada—  Ahora fue el, el que soltó la carcajada al ver mi cara.

Así fue como pasamos toda la tarde y no regresamos al hotel hasta pasando la media noche, habíamos salido a comer pero decidimos dar un pequeño tour por la ciudad, lo cual pensamos ideal ver la ciudad en su máximo esplendor. 

Sus anuncios luminosos, los espectáculos que los hoteles y demás atracciones que ofrecían, la gente caminando como si no tuvieran alguna preocupación.


*

Lo siento, en verdad.

Pero he tenido demasiadas cosas en la cabeza que no me había dado tiempo para escribir. He estado pensando demasiado en que es lo que quiero en mi futuro, en donde quiero estar. Me preocupa elegir la opcion incorrecta, pero bueno, no somos perfectos. Decidir sobre si seguiré estudiando en mi ciudad o irme fuera, y si fuera la ultima prepararme psicologicamente para eso. Tambien pensando en nuevos proyectos, que lamentablemente no esta wattpad en ellos.

Se que no soy la mejor escritora y estoy a mucho de llegar a serlo, pero  me da mucha alegría que haya personitas leyendo estas historias. Y solo por eso se que tengo que seguir con esto <3

Las quiero.



Battle | S. SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora