By Jacob.
Cuando vi a Ángela recordé aquel inombrable día. La verdad es que la culpa ni siquiera era de Ángela. Gabriela tomó la última decisión, a ese punto yo era el único que sabía todo.
Si algún día encuentro a Gabriela, no le guardo rencor. Pero por cierta razón el rencor y el odio se apoderan de mí al ver a Ángela Doust. Verla con mi mejor amigo me resultaba inconcebible, no porque la quisiera para mí. No era ese mi problema. Pero que no la quisiera para mí no significa que no haya roto mi corazón. Pero lo más imperdonable es que no tenía vergüenza y estaba en casa de Jace, como si nada hubiera pasado, como si todos fuéramos felices después del accidente. Incluso ella había quedado marcada de por vida. Pero así nadie lo crea el más afectado había sido yo. Yo sabía la verdad de las dos, sabía cada versión y cada plan que pasaba por su mente. Después de ser grandes amigas ¿Por qué terminamos en esto?
Después de darle tantas vueltas en mi cabeza al asunto del accidente concluí que Jace necesitaba saber la verdad. No podía pasar más tiempo. Y Ángela también lo necesitaba, de hecho ella lo necesitaba más. Entre más te hunde más lo necesitas. Así es en todo. ¿O no? Entre más difícil de alcanzar más lo deseamos, más lo queremos, entre más nos lastimé no tenerlo más nos atrae. Y así era para Ángela, para Jace, para Gabriela, para Mary, para mí y para todos.
Me dirigí a casa de Jace Goubert, mi mejor amigo. Tenía tantas dudas por aclarar, pero ya las resolveria.
Apenas llegué la mamá de Jace abrió la puerta, le pedí que me deje entrar al cuarto de Jace sin llamarlo antes y ella lo hizo. Mi amigo abrió la puerta, tenía los ojos hinchados y la nariz roja, una característica de Jace cuando estaba triste y las lágrimas caían de sus ojos. Le pedí que me dejara contarle algo muy importante, el accedió al final. Y yo, traté de decirlo fácilmente, pero de todas maneras sonaría cruel, frío, sonaría terrible.
- Ellas eran. Ángela... Ángela al igual que Gabriela, eran mis amigas más cercanas. Hubo una gran pelea entre ellas, empezaron a odiarse, pero nadie creyó que llegaría tan lejos, nadie midió los actos. Hasta que Gabriela no pudo más, ese día empacó maletas y se marchó, pero ella acabó con la vida de Ángela, la destruyó, esa fue su venganza.Aquél día que todos llaman "día del accidente" yo estaba como de costumbre con Gabriela. Estábamos en su casa tomando un refresco. Sabía que necesitaba mi ayuda.
- ¡La odio! Sé que ella me pagará por todo lo que me ha hecho. - Dijo Gabriela. Sus ojos habían cambiado, se mostraban fríos y vengativos.
- ¿Qué pretendes hacer?- Fue mi única respuesta.
- Espera aquí.- Dijo ella.
Salió de casa y fue la última vez que la vi.
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DESPUES DE ELLOS
Teen FictionDespués de su último amor Jace Goubert se ha hecho una promesa a si mismo. "No olvidarla nunca, no enamorarse de nadie más". Sigue con su rutina, extrañando a Gabriela y culpándose por su error. Las cosas se complican cuando conoce a Ángela Doust u...