15-Ethan

60 2 0
                                    

Niel y yo llevamos casi dos días enteros encerrados en este minúsculo apartamento, con esta chica que nada sabe ni nada le preocupa, y nuestros captores. En un primer momento, la perspectiva no suena tan infinitamente aburrida como luego la realidad es.

Kairin se pasa el día pendiente a partes iguales de su móvil y de nuestra anfitriona, con la cual pasa todas las noches y casi todo el día, salvo cuando está atendiendo a Darkxai, quien se ha encerrado en una especie de mundo apático y no se levanta de su cama en ningún momento. Sólo habla con Kairin, ni nos da los buenos días a Niel y a mí.

En un primer momento, Niel había adoptado la actitud de su compañero de clase, apática y como perdida en otro mundo. Pero el segundo día, después de comer, a media tarde, insiste en hablar conmigo. Cosa que no habíamos podido hacer el día anterior porque entre preparar los equipajes y contarle la trola a Jessica, no habíamos tenido tiempo.

Nuestra anfitriona vive en un noveno piso de un edificio de apartamentos algo antiguo. Al lado de la terraza de la cocina está la parte de arriba de la escalera de incendios, un sitio desde el que se ve casi todo el barrio. Es ahí donde me lleva Niel para hablar conmigo.

-¿Qué haces aquí?-pregunta en cuanto nos sentamos en el primer escalón.-¿Por qué te han secuestrado a ti también?

-No me han secuestrado.-revelo sin mirarle.

-¿Entonces?

-Me he venido con ellos por mi propio pie.

En cuanto finalizo la oración, Niel se gira hacia mí con el ceño fruncido.

-¿Es una broma? ¿O te han hecho jurar que no dirías nada? ¡Ya sé!-exclama de repente a la vez que pega un bote sobre el escalón. Correspondo yo con otro bote a causa del sobresalto, del que él no se percata, más ocupado exponiéndome calurosamente su teoría:-¡Te han traído para que seas su rehén! ¡Para amenazarme con hacerte algo si no respondo a los deseos de Darkxai! ¿No es eso?

-No.-le atajo inmediatamente.-No es eso. Verás, les pillé mientras te estaban secuestrando y amenacé al que se llama Kairin con denunciarles a la policía.

-¡Debiste haberlo hecho, sí, pero sin avisarles!

-Les dije que les denunciaría a menos que me dejasen ir con ellos para protegerte.

La boca de Niel se entreabre en claro reflejo de sorpresa.

-¿Hiciste…qué?-murmura.

-Eso, Niel. Sabía que estos tipos, fuesen lo que fuesen, son peligrosos y algo peligroso tenían pensado hacer contigo. Les obligué a llevarme con ellos para poder cuidarte de cerca.

Los ojos de mi amigo comienzan a refulgir de indignación y casi de ira.

-¿Cuidarme?-escupe por fin.-¿Es que eres idiota? ¡Ahora estamos prisioneros los dos! ¿Qué te decía que no nos iban a aniquilar a ambos una vez nos hubiesen secuestrado?

-Ellos no quieren cometer un asesinato, mucho menos dos.

-¿Cómo sabes eso? ¿Y no decías que sabías que tenían planeado hacer algo peligroso conmigo? ¡Estoy seguro de que si no le hubiese dado mi sangre a Darkxai voluntariamente, me hubiesen obligado a hacerlo!

Enarco una ceja con escepticismo.

-¿No te parece suficiente peligroso el hecho de que te tengas que cortar continuamente para alimentar a ese animal?

Ante mi estupefacción, mi amigo tarda en responder. Y cuando lo hace es como con vergüenza, a media voz y con la vista fija en los transeúntes que pasean treinta metros por debajo de nosotros.

[Edge of Seduction 01] Seduction (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora