9-Laos

78 3 0
                                    

-¿Qué tal está Darkxai?- pregunta Shun en cuanto salgo del cuarto.

-Empeora, Shun.-emito un suspiro prolongado.-Secundo tu idea de entregarle a Niel, pero, ¿Cómo vas a atraerle hasta aquí? ¿Piensas secuestrarle?

Shun se mesa el pelo y se deja caer sobre la pared. Está agotado, como todos los demás.

Han pasado tres días desde el incidente de Skyress. En un principio, Shun nos había dicho que iba a conseguir a Niel para Darkxai,  pero yo sé que aún no se atreve a hacerlo. Le tenemos demasiado miedo a la muerte.

Repasamos una y otra vez la magnitud de los problemas que nos traería esa resolución. Tendríamos que huir de Greenlake en cuanto empezasen las investigaciones. ¿Dónde nos alojaríamos? Instalarnos y hacer vida lejos de Greenlake, un pueblo completamente apartado del resto de la sociedad y prácticamente desconocido, pues no sale ni en los mapas, es como entrar en otro mundo. En un mundo en el cual los Metax están esperando que salgamos de nuestro escondrijo para atacarnos y terminar de destruir el linaje Karat. Mis cinco hermanos y yo somos los únicos supervivientes de nuestra raza, y como no podemos enfrentarnos a nuestros enemigos debido a nuestra indiscutible inferioridad tanto numérica como de nuestras fuerzas, si queremos sobrevivir no tenemos más remedio que permanecer ocultos en lo oscuro.

Por ahora hemos encerrado a Darkxai en su dormitorio y lo hemos encadenado a la cama para que no nos haga daño ni a los demás ni a sí mismo. Kairin duerme con él, en la cama de Skyress, para velar por si le hiciese falta algo. La verdad es que hasta Shun y yo tendríamos miedo de dormir junto a un Karat transformado y obseso de sangre, pero Kairin posee una sangre fría y un valor envidiables.

¿Cuánto más podremos mantener esa situación? Para él es cómo una tortura, que va  minando su cerebro y sus pensamientos lentamente, cegándolo con locura y dolor. ¿Cuánto más va a resistirlo? ¿Y cuánto más vamos a resistir nosotros viéndolo así?

-Skyress podría traerle…-murmura Shun con voz cansada. Lleva, al igual que los demás, las respectivas tres noches sin dormir.

-¿Y luego? ¿Qué hacemos? ¿Escapamos? ¿Voy haciendo el equipaje?-pregunta Skyress sarcásticamente, saliendo del dormitorio que ahora comparte con Shun. Al igual que los demás, está con los nervios desquiciados, pero él lleva las crisis incluso peor que nosotros.

Las heridas que le causó Darkxai aún siguen marcadas por todo su cuerpo. Pasamos un mal rato intentando curarlas, porque las heridas causadas por las mordeduras de los Karats no sanan jamás. Aunque hayamos conseguido disimularlas un poco, las cicatrices se le van a quedar ahí siempre.

-¡No sé! ¡No lo sé!-exclama Shun, fuera de sí. Se tapa los ojos con las manos y se los frota compulsivamente, creando la viva imagen de la desesperación.

Estamos atrapados entre que muera Darkxai y muramos todos, la primera opción ni siquiera es una opción, porque ni nos la planteamos. La segunda sería la única factible…pero…no nos rendimos tan fácilmente, no queremos aceptar que estamos acabados.

-Skyress, Laos-nos dice nuestro líder.- ¿No teníais un plan? ¿No planeasteis algo cuando Darkxai se prendió de Niel? ¿Algo que estaba en ese mamotreto de libro de leyendas?

El pequeño y yo nos miramos. Asentimos a la vez.

-Sí, teníamos un plan.-admito.- Pero no ha podido realizarse por falta de tiempo.

-¿En qué consistía ese plan?

Es ahora Skyress el que responde:

-Nos proponíamos usar el poder de Darkxai, la seducción, para conseguir que el humano se enamorase de él y se hiciese cargo de la situación.

[Edge of Seduction 01] Seduction (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora