Epílogo Parte: 1

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Han pasado unos 10 años desde que Lina era mi kwami y Tikki había vuelto a ser humana, ahora todo era muy distinto.

Para empezar Lina y yo seguíamos salvando a París de los villanos que Hawk Moth akumatizaba.

Tikki trabajaba para la madre de Nathaniel en su tienda de flores, después del supuesto funeral de su hijo decidió retirarse del mundo de la fama y abrir una florería común y corriente.

Plagg estaba cada vez más fuerte y cada vez más presumido que nunca, siempre llegaba con Tikki contándonos de su día a Lina a Adrian y a mi.

Nathaniel se había acostumbrado a su nueva vida, y con el tiempo inesperadamente se enamoro de Lina y llevaban 2 años siendo una especie de "novios"

Adrian ahora era un modelo famoso de París, vivía en un departamento cerca de donde yo vivía ahora, y aún teníamos tiempo juntos, pero muy poco antes de que llegaran los paparazzis y nos atormentaran con mil y un preguntas; ya había perdido la cuenta de cuantas veces habíamos tenido que salir corriendo de los restaurantes en los últimos 2 meses.

Y en cuanto a mi, era una diseñadora de ropa, tenía aún varios encargos por hacer, pero estaba agotada; también me había mudado a vivir sola desde hacía 6 años, al inicio me complicaba pero ahora era como si hubiera estado viviendo sola toda mi vida.

—Hay Lina ya no puedo más con esto —me tumbé en la cama de mi cuarto

—Oh Marinette, deberías tomarte unas vacaciones —Lina se estaba riendo por lo bajo de mi situación

—Eso quisiera Lina, pero no puedo

—Yo creo que si —era Adrian, estaba recargado en la puerta de mi cuarto

—No lo creo gatito, aún tengo muchas cosas que arreglar y hacer para la próxima semana —miré la gran lista de ropa que tenía encargada que estaba pegada en la pared

—Bueno, creo que tendrás que cancelar todo eso Princesa

—¿Por que lo dices? -me senté en la cama y lo miré confundida

—Ah por qué pienso llevarte a una luna de miel del otro lado del planeta —Adrian me sonrió

—¿Qué estás diciendo? —caminó hasta quedar frente a mi y se arrodilló, sacando una caja roja de su bolsillo

—Estoy diciendo que quiero que te cases conmigo Princesa —abrió la caja y vi un anillo hermoso —Marinette Dupaing ¿me puedes hacer el hombre más feliz del mundo y ser mi esposa?

Lina y yo lo miramos atónitas, mientras Nathaniel salía del bolsillo del saco gris de Adrian y nos miraba casi muriéndose de la risa.

—¡Si si si! Y mil veces más ¡si! —lo abracé y nos caímos al suelo

Adrian se rió y me puso el anillo en el dedo correspondiente, luego se puso encima de mi y me beso.

—Oigan ustedes dos esperen a la luna de miel para hacer esas cosas ¿si? —Nathaniel se estaba conteniendo la risa

Adrian y yo nos separamos, luego me cargó como una Princesa y me dio vueltas.

—Wow, Adrian bájame —me estaba muriendo de la risa y el también

—No lo creo, estoy muy feliz

—Agh, a veces no los soporto juntos -Nathaniel se cruzó de brazos

—Calla, son lindos, además tú y yo podremos estar más tiempo juntos ¿o no te alegras por eso? —Lina hablaba inocentemente, haciendo ojos de cachorro triste

—A veces tampoco se que hacer contigo -Nathaniel jalo a Lina y la beso

Pasó una semana, Tikki, Plagg, ya todos estaban listos, en la misma Iglesia donde mis padres se habían casado.

Me alice el vestido por centésima vez en la última media hora, Lina salió de mi ramo de flores y me miró molesta.

—Ya Marinette cálmate, no es como si Adrian fuera a salir corriendo en el último segundo —Me detuvo la mano y la miré —estás hermosa, no te preocupes todo va a estar bien

—Marinette ya está a punto de comenzar el asunto ¿estás lista? —Tikki entró y cuando me vio se le llenaron los ojos de lágrimas- eres la novia más bonita que e visto

—Tikki, se te va a correr el rímel, además, apuesto a que tú te verías mejor que yo en un vestido como este y más le vale a Plagg no hacerte esperar más, la vida no es eterna —abracé a Tikki sonriente

Empezó la música, esa era mi señal.

—Bueno, sorpréndelos amiga —Tikki se separó y me sonrió, luego salió por la puerta, haberle pedido que fuera mi dama de honor definitivamente había sido la decisión correcta

Lina se escondió nuevamente en el ramo de flores y mi papá llegó a mi lado, me tomó del brazo y me sonrió.

Este día definitivamente es el más feliz de mi vida.

Mi papá y yo caminamos hacia el altar; mis amigos estaban ahí, Alya y Nino también estaban comprometidos, Chloe había conocido a un chico en el trabajo y llevaban juntos 3 años, los padres de Nathaniel me miraron sonrientes, después de lo de Nath no había palabras para describir lo feliz que estaba de que no me hubieran apartado, vi al Padre de Adrian y a mi madre, la cual ya estaba llorando; luego en el altar vi a Tikki sonriente con su vestido rosa que le cubría todo el cuerpo, a Plagg al lado de Adrian sonriente también de traje y luego mi completa atención se la llevó Adrian, estaba tan guapo como siempre con ese traje negro, y sus ojos verdes esmeralda, mi padre me entregó a él y se fue a su lugar.

—Ahora sí, al fin te convertirás en mi bellísima esposa —Adrian me habló en voz baja

—Y tú en mi guapísimo esposo —ambos sonreímos y empezó la ceremonia

Me enamoré de un engreídoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora