Todo cambia en un segundo (re-subido)

6.1K 477 334
                                    

~~~HERMIONE~~~

Casi corrí por los pasillos para llegar a mi habitación, intenté no cruzarme con nadie e ignoré  las pocas personas que volteaban para observarme. 

Entré a la sala común en donde había un par de chicos de primero o segundo tan ocupados en sus cosas que ni se percataron de mi presencia, era justo lo que necesitaba para terminar mi apresurado desayuno.

Alguien había dejado un ejemplar de El Quisquilloso sobre la mesa en la que apoyé mis cosas, lo ojeé rápidamente solo decía puras tonterías que no le importaban a nadie y todos los crucigramas ya estaban hechos.

Decidí que la mejor forma de aprovechar el día sería leyendo recostada en mi cama y quizás podría ordenar el cuarto, a veces parece que a mis compañeras nadie les enseñó nada sobre organización.

Subí las escaleras y abrí la puerta, no había mucho que hacer, así que terminé de limpiar en  unos diez minutos pero al poco tiempo de estar recostada en la cama ruido en la ventana me obligó a dejar mi lectura de lado. Fui a ver qué era y, sin darme cuenta, un instante después me encontraba abriendo la ventana para dejar pasar a Viktor.

 —¿Qué haces aquí? — Intenté no sonar demasiado brusca ni sorprendida, pero no comprendía por qué quería verme después de todo lo que había pasado.

— Escuchar a Igor regañarme se vuelve aburrido después de veinte minutos... así que prefiero salir a dar un paseo mientras espero a que se calme y quiera escuchar lo que pasó en realidad. Pero no tengo ganas de estar solo.— Me dedicó una sonrisa que era  una mezcla entre tierna y traviesa.

—Pero... ¿Cómo sabías que estaría aquí?

— No lo sabía, probé suerte. — Dijo encogiéndose de hombros.— Entonces ¿Vamos a Hogsmade? hace tiempo que quiero conocer el pueblo y tener una guía no es nada malo. 

Lo miré sin saber qué decir por un buen rato. Pero terminé aceptando, con la condición de que me espere en la puerta del castillo pues no quería volver a subirme a esa endemoniada escoba, necesitaba alejarme de todos un rato y no veía que hiciese ningún daño el acompañar a Viktor a recorrer un poco.

Cuando bajé él ya había organizado todo para que pudiéramos retirarnos sin ser vistos por nadie, y por lo tanto sin tener que responder ninguna pregunta.

Lo llevé por mis lugares favoritos, tomamos el té en el Salón de Madame Pudipie y pudimos conocernos mejor. Viktor Krum era realmente un chico adorable. Mientras volvíamos al castillo un par de bolas de nieve lo golpearon en la nuca y la forma en la que reaccionó fue muy graciosa, pero ambos nos inquietamos un poco cuando al voltearnos no encontramos a nadie detrás nuestro. 

Cuando llegamos era la hora de cenar, pero como ambos habíamos comido tanto durante nuestro paseo ninguno pensó siquiera pasarse por el Gran Comedor. Él me acompañó hasta la entrada de la sala común de Gryffindor y al momento de despedirse acercó peligrosamente su cara a la mía para terminar dándome un beso en la mejilla.

Pasé por el retrato con una gran sonrisa, pero mi cara cambió en cuanto vi a todos mis amigos reunidos cerca del fuego con sus rostros expresando una seriedad impactante. George y Ginny parecían haber llorado. A penas me notó, Ron se acercó a mí:

— ¿Se puede saber dónde estuviste todo el día?— Preguntó en tono acusador.

— No es asunto tuyo Ronald y no me hables de esa forma.— Respondí molesta.

— Ayy, discúlpame por preocuparme por el paradero de mi mejor amiga.— Comentó con ironía.

—¿Y a este qué le pasa?— Cuestioné dirigiendo mi mirada a Harry.

— Es Fred... No tuvimos noticias de él en todo el día, solamente que le dijo a Lee que no se sentía muy bien, y tú no das señales de vida desde el desayuno. ¿No te parece motivo suficiente para preocuparnos por ti también?

Al escuchar sus palabras sentí como si me hubiesen abofeteado, mientras yo estaba ahí afuera divirtiéndome con Krum, Fred había desaparecido. Las lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos y no hice nada por detenerlas, alguien me abrazó e hizo que me siente pero algo dentro de mí no iba a permitir que me calmara y lo sabía. 

Ginny y yo dormimos juntas esa noche, ambas tuvimos pesadillas y nos despertamos varias veces en la oscuridad del cuarto solo para que la realidad vuelva a golpearnos. Los chicos le habían dado la alerta a McGonagall al poco tiempo de mi llegada y la casa de los leones estaba más movilizada que nunca para intentar encontrar al pelirrojo.

Cuando salió el sol, la muchacha Weasley y yo bajamos a encontrarnos con los muchachos. Otra vez faltaría a clases, pero esta vez para ayudar a buscar a Fred. Nuestros planes cambiaron en el momento en el que Harry se acercóa comentarnos que su capa de invisibilidad y el Mapa del Merodeador no se encontraban en donde él los había guardado. Fue ahí cuando supimos que nadie encontraría a Fred a menos que él lo quisiera así.

*****

OMG!! SIENTO QUE ME VA A DAR ALGO EN SERIO NO PUEDO CREER QUE YA HAYA MÁS DE 400 LEÍDOS!!! GRACIAS GRACIAS GRACIAS!!!!! LOS AMOOOOO.

Bueno, me calmo jajaja. Pero en serio que se los agradezco de corazón. Sé que no actualizo muy seguido mis escritos y saber que esta historia llega a tanta gente me pone muy feliz y me impulsa a seguirla. Tengo muchas ideas nuevas para los próximos capítulos que espero poder mostrarles pronto.

Como algunos ya sabrán inscribí esta historia y otra más en los Wattys así que estoy algo ilusionada, pero pase lo que pase es una gran experiencia.

Ahora... Unas preguntas!!

1)¿Desde dónde me leen? Yo escribo desde Argentina.

2)¿Cómo descubrieron esta historia?

3) ¿Les está gustando como se va desarrollando todo?

4) ¿Leyeron alguna otra de mis obras? ¿Cuál?

Bueno, aca se despide una escritora un poco colgada y muy feliz. Otra vez, gracias y nos leemos pronto :3



Enchanted- FremioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora