Un deseo no tan deseado

Midoriko

Disclaimer: Los personajes de Inuyasha no me pertenecen sino a Rumiko Takahashi.

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. -indica cambio de escena.

—Indica el pasado. –

—indica tiempo actual-

—"Indica diálogo de bestia interna".-

"Indica pensamientos"

Un deseo no tan deseado

Llevaban dos semanas buscando a Midoriko, tenían que evitar la creación de la perla, esa era su misión principal. Luego tenían que encargarse de evitar la guerra entre razas.

Estaban entrando a una aldea a los límites del oeste, Kagome la reconoció al instante, pero no dijo nada prefirió quedarse callada quizá Midoriko estaba ahí, según recordaba la cueva donde la perla se había creado.

ー ¡Un demonio! -gritaron desde lo alto de las murallas de madera del pueblo.

ー ¡Prepárense para un ataque! -gritó alguien mas.

Sesshomaru, instintivamente, se posicionó delante de Kagome para protegerla.

ー Sesshomaru no hagas nada, yo me encargo. -habló ella jalandole del brazo haciéndolo mirarla.

ー ¡Venimos en son de paz! ーcomenzó ellaー Soy sacerdotisa y él es mi prometido.

El aire era tenso, los guardias los examinaban con enojo, tenían problemas para creer que no les harían daño, sobre todo porque una sacerdotisa es enemiga de los demonios y esta que tenían frente a ellos tenía lazos con uno y no uno cualquiera, era un Inukimi eran sagrados pero nunca habían escuchado de que un Inukimi y una sacerdotisa se unieran como pareja.

ー ¡Eso es mentira! -gritó uno rompiendo el tenso silencio.

ー ¡Buscamos a Midoriko! -gritó Kagome, grito que sonaba a desesperación.

Todos se miraron entre sí, y después la enorme puerta se abrió para dejarlos pasar.

"Bravo Kagome hubieras empezado por eso" -pensó de inmediato la azabache mientras una gota resbalaba por su nuca.

ー Creeremos en tus palabras Miko.

Kagome solo asintió y con los nervios de punta, sin darse cuenta, le tomo la mano a Sesshomaru y la apretó con fuerza.

Sesshomaru solo lo dejó pasar tenían que aparentar llevarse bien, así que intentó ignorarla.

ー Midoriko se encuentra por aquí. -fueron guiados por el jefe de la aldea hacía un pequeño templo.

A los minutos se encontraron con la sacerdotisa rezando frente a una estatua de Buda.

ー Midoriko-sama ellos han venido a verle.

Al terminar de decir esto Midoriko se puso de pie frente a ellos y el jefe que les había traído se retiró.

ー Que sorpresa, una miko y un Inukami ¿Qué es lo que buscan?- preguntó mirándolos con extrañeza.

ー Hemos venido desde muy lejos a pedirle su apoyo para evitar la lucha entre demonios y humanos.

Una sonrisa se formó en los labios de la sacerdotisa.

ー ¿Qué les hace creer que yo les ayudaré?

Kagome sonrió y deslizó su mirada hasta Sesshomaruー Porque sabemos de buena fuente que usted es muy poderosa y sobre todo al ser su alma totalmente pura nos vendría de mucha ayuda, y de paso le ayudamos a usted a que los demonios la dejen en completa paz.