Mi tutor legal

Explosión

Anastasia PDV

- ¡¿DÓNDE COÑO ESTABAS?!
Está muy enfadado. Muyyyyy enfadado. Lo vi acercarse a mí. Vi cómo su pecho subía y bajaba velozmente y con la ira con la que me miraba.
- ¡RESPÓNDEME!
- Por ahí
- ¿POR AHÍ? LLEVAS CASI MÁS DE TRES HORAS FUERA. NO LLAMASTE, NO HICISTE NADA. SAWYER ESTUVO PEINANDO LAS CALLES PARA ENCONTRARTE. FUE A CASA DE TUS AMIGOS, A LA TUYA, A LOS SITIOS QUE FRECUENTAS, Y NO ESTABAS
- Lo siento
- ¿LO SIENTES? ¡¿LO SIENTES?! CON ESO NO VAS A HACER QUE MI CABREO DISMINUYA. YO SOY EL QUE MANDA, NO PUEDES IRTE ASÍ COMO ASÍ Y APARECER TRES HORAS DESPUÉS COMO SI NADA, YÉNDOTE POR UNA ESTÚPIDA RABIETA DE NIÑA CONSENTIDA
- ¿Perdona? ¿Estúpida rabieta de niña consentida?
- SÍ
- El estúpido aquí eres tú no yo
- ¡¿DISCULPA?!
- Llegas aquí creyéndote el amo del universo que puede manejar a las personas como si nada, creyendo que la gente está a tu entera disposición y que siempre van a hacer lo que tú digas. Pues déjame decirte una cosa, no eres nada de eso, no puedes mandar a la gente, ni ordenarles a tu antojo solo porque "te gusta llevar el control". Y no es una rabieta de niña consentida. Me quieres apartar de todo lo que quiero, de lo único que me queda. He perdido a mis padres, no quiero perder a mis amigos también
- Me da igual lo que digas. Yo soy el que toma las decisiones, te guste o no. Y si no te gusta pues te vas a tener que ir acostumbrando. Nos vamos dentro de dos días, así que será mejor que empieces cuanto antes a hacer las maletas
- ¡¿Dos días?! Dijiste tres
- Sí. Dije, pero por el numerito que has montado, por haber estado desaparecida 6 horas y haberme desobedecido, no creo que merezcas otro día más, así que, mañana a primera hora irás a tu casa, cogerás lo que quieras y harás las maletas. Dentro de dos días salimos y no hay discusión - y con eso se fue de la habitación dejándome sola.
Salí de la habitación para buscar a Sawyer. Desgraciadamente lo vi hablando con el señor Grey.
- Sawyer, quiero que me lleves a casa
- ¿Por qué? - preguntó el señor Grey
- ¿Porque vivo y duermo allí? - más bien no era una pregunta, era una ironía, para ver si la captaba.
- No. Hasta que nos vayamos dormirás en este hotel
- ¿Qué dices?
- Que no irás a dormir a tu casa. Te quedarás en este hotel, y solo irás a tu casa para recoger tus cosas
- No me puedes decir dónde debo dormir
- Sí que puedo. No puedo permitir que desaparezcas otra vez
- Pero...
- Nada de peros. Dormirás en este hotel, te guste o no
Y con eso se fue a la habitación dejándome con Sawyer. Estaba muy cabreada, cada vez más. Este hombre lo único que hacía era fastidiar cada vez más mi vida.
Cuando me calmé, y viendo que no tenía otra opción, le pedí a Sawyer que cogiera una habitación en este hotel lo más alejada posible del señor Grey. No iba a dormir en la misma habitación que él ni loca.
Minutos después, Sawyer apareció con la llave. Afortunadamente, le dieron una que se encontraba bastante alejada, aunque estaba en el mismo piso.
Entré en la habitación. Sawyer me dijo que se cogió la de enfrente; siempre era así. Cuando dormía en un hotel él siempre dormía en una distinta a la mía, pero cercana a ella.
Al llegar a la habitación me dirigí al baño. Quería darme un baño, pero me di cuenta de que no tenía ropa que ponerme luego.
Iba a ir a hablar con Sawyer cuando alguien llamó a mi puerta. Fui a abrir y preferiría no haberlo hecho.
- ¿Qué haces aquí? - preguntó el señor Grey
- ¿Tú qué crees?
- ¿Por qué has cogido una habitación?
- ¿Es en serio? Me dijiste que no podía ir a dormir a mi casa y que tenía que dormir en este hotel
- Sí, pero mi habitación tiene dos dormitorios
- Pues muy bien, que los disfrutes mucho. Me dijiste que tenía que dormir en el hotel, no especificaste dónde
- No creí que fuera necesario
- Pues ya ves que sí, pero aunque me lo hubieras dicho hubiera cogido una habitación igualmente
Salgo de la habitación dejándole allí plantado y me dirijo a la habitación de Sawyer.
- Sawyer, necesito que me lleves a casa
- Te dije que no podías ir a tu casa a menos que...
- Sí sí. A menos que fuera a hacer las maletas. Pero por si no te has dado cuenta no tengo nada de ropa aquí, lo que significa que no puedo cambiarme y me gustaría darme un baño. Te guste o no voy a ir a mi casa a por ropa. Si te gusta bien, y sino, me da igual. Vámonos, Sawyer
El señor Grey no dijo nada, así que aproveché y nos fuimos a mi casa.
Al llegar cogí cinco mudas limpias, el pijama, dos camisetas cortas y dos pantalones cortos. No cogí nada más porque mañana volvería.
Volvimos al hotel, aunque yo hubiera preferido quedarme en casa, pero no quería empezar otra guerra nuclear.
Al llegar me fui directa a mi habitación, cerré la puerta con cerrojo y me fui a dar un baño relajante.
Después del baño relajante y después de haberme cambiado decidí pedir algo al servicio de habitaciones. 
Después de cenar ya era muy tarde. Eran las 12:00 PM. Con todo lo vivido en un mismo día caí redonda en la cama.