IV

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Lloré, grité, hice mierda la almohada, me desahogué.

Me levanté del piso y me miré en el espejo, observé mi rostro, mis ojos y mi mirada.

¿Realmente, quería que verme así, siempre?

¿Realmente iba a dejar que se burle de mí?

¡No!

Decidí que no quiero verme así y que haré un cambio para estar bien conmigo misma y así poder enfrentar la vida.

Si él cree que va a ser el triunfador en este momento, está muy equivocado.

Arreglé el maquillaje y salí para dar un giro a mi vida.

🏫⛪🏫

Del brazo de mi papá, entré a la iglesia y pude divisar a mi hermana a lo lejos, Leah estaba sumida en sus pensamientos que ni si quiera de dio cuenta de mi presencia, al pasar por su lado.

─ Estás hermosa─ susurró papá.

─Y tú estás muy guapo─ respondí susurrando también.

Cuando llegué al lado de Nick, mi mundo se caía en pedazos lentamente. Pero recordé a Isaac, el bebé y a su madre. Y eso me dio fuerzas para seguir con mi plan.

─ Estás preciosa, mi amor─ dijo Nick mirándome de pies a cabeza.

"Istis priciisi mi amir "
Tengo ganas de... de... matarlo aquí mismo pero recuerda Lycia, estas en la casa de Dios.

Le di una sonrisa rápida, falsa, llena de plan malévolo y la ceremonia empezó.

Gasté mi tiempo
Gasté mi dinero
Gasté mis sentimientos
DESPERDICIÉ MI VIDA JUNTO A UN IMBÉCIL.

Cuando me di cuenta, el momento había llegado

─Nick Roberts ¿Acepta a Lycia Mevers como su esposa, en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza....?

Falta pocos segundos para ver el mundo arder, Lycia.

─ Acepto─ dijo él con su voz firme.

El sacerdote me miró y empezó:

— Lycia Mevers ¿Acepta a Nick Roberts como esposo en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y la riqueza...?

Miré a mi hermana de reojo, quiero que sepa que lo que haré, lo haré por nosotras, que no me odie después de esto.

Tomé la mano de Nick, le di una gran sonrisa de oreja a oreja y le hice una gran llave, haciéndole que él caiga al piso, me puse encima de él y todos miraban la escena, sorprendidos.

¿Les conté que mi primo me preparó para defensa personal?

¿No?

Ahora saben que lo hizo.

─No acepto─ dije mirando fijamente a Nick.─ Espero que así aprendas a ser hombrecito y a no romper el corazón de las chicasMe saqué el anillo que me dio Nick y se lo metí en la boca─ ¡Calma la cabeza de arriba y también la de abajo!─ exclamé dándole golpecitos en la mejilla y acto seguido lo cogí del cuello de la camisa y hice que rebotara su cabeza en el piso.

─ Imbécil─ me levanté de él y sacudí la suciedad de mi vestido.

Leah gritó: ─ ¡Esa es mi hermana!

Miré a mis padres con una mirada de disculpa y salí triunfante de la iglesia.

Cuando bajé las gradas de la entrada de la iglesia, empecé a correr. Corrí como si no hubiera mañana, corrí hasta sanar mi alma y estaba feliz por ello.


ABIGAIL

Como el primer díaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora