chewing gum | haechan

ocho.

¡Capítulos finales! 

—Quiero que tengas un cita conmigo.

¿Qué dijo? Esperen, él acaba de decir que quiere una cita. ¿Conmigo? 

 —¿Cita? —respondí y él rió. 

  —Así es, digo, si tu quieres. —sonrió, su sonrisa era dulce. 

  —Está bien, tengamos una cita. — sonreí. Espero no arrepentirme después por esto. 

—El viernes, paso por ti a las ocho. ¿Está bien? —yo asentí y él se fue. 

No sabía si había hecho la menor decisión pero quería intentarlo, mi corazón estaba hecho un lío al igual que mi cabeza.

(...)

Los días pasaron, el tan esperado viernes había llegado. Estaba parada en frente de mi armario viendo que podía ponerme, siete y cuarenta minutos y yo aún no sabía que rayos ponerme, estaba tan nerviosa que estaba apunto de vomitar de los nervios, mis manos estaban sudando, mi pie derecho comenzó a temblar. Esto estaba mal. No podía o más bien no quería negarme a la cita con él. 

Después de pensarlo unos minutos, tomé lo primero que encontré y que por suerte no se veía tan mal, siete con cincuenta y cinco minutos marcaba el reloj, estaba en la sala esperando por él, los nervios crecían más y más cuando el reloj avanzaba. 

¿Vendrá?, ¿Se habrá arrepentido? Esas preguntas sonaban en mi mente. 

La puerta sonó y antes de abrir la puerta, me arregle un poco el cabello. Ahí estaba él, debía admitir que se veía bien. 

  —¿Nos vamos? —extendió su mano par que yo lo tomara. 

—Claro. —acepté su mano. 

Después de media de hora de viaje, habíamos llegado un pequeño parque que estaba iluminado por velas que formaban un corazón y que adentro del corazón había una manta extendida junto con una cesta de comida. 

—Tendremos un picnic de noche. Vamos. —tomó mi mano. 

La cena había estado rica, tomé una paa frita y la llevé a mi boca. Haechan tomó la otra punta de ésta y también la llevó a su boca haciendo que quedáramos a escasos centímetros de distancia. Abrí mis ojos más de la sorpresa, en cambio él tenía una sonrisa en su rostro. Comenzó a comer de la papa haciendo que nuestr distancia se redujera más hasta tal punto de rozar nuestros labios para después separarse, dejándome estática. 

  —Te sonrojaste. —se burló. 

  —Tú tienes la culpa. —me quejé. 

  —¿Porque la tengo yo? 

—Por... —me quedé callada para no hablar de más. 

—¿Querías que te besara? —su sonrisa burlona salió. 

—No, no es eso. —dije rápidamente.— Tal vez... —lo dije en voz baja pero al parecer él oyó. 

—¿En serio? —se acercó más a mi.— Por mi no hay problema, sólo que ocupo tu permiso. 

Su mano estaba en mi cintura, lo jalé del cuello y lo hice. Lo besé. Rápido correspondió él. 

Mi corazón se aceleró al sentir sus labios, subí mis manos hasta rodearlo con mis brazos su cuello. 

No podía creerlo, la persona más odiosa me estaba besando. 

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estamos entrando a la recta final del drama, jamás creí que tendría mucho amor por ustedes. 

ºla verdad no sé si haré una segunda temporada, aunque no creo que la haga. 

ºtengo pensado subir una que llevo escribiendo desde hace un tiempo pero no sería de nct, estoy entre sí astro o monsta x, es histórica, si les gustaría diganme:3

gracias por leer, las amo.