La Otra Higurashi. (Sesshomaru y tú )

Jardín Cavernario.

Narra Kuma:

Entré al Jardín, sabía que estaba en una cueva, era consciente de ello, pero habían tantas plantas, tanto verde, tanta vida que me costaba creerlo... ¡Me sentía tan bien!

—Tsk... deja de correr tanto—Pero claro, Sesshomaru siempre tiene que estar presente para irritarme-

—Deja de ser tan amargado y disfruta...—Le dije frunciendo el ceño—Sesshomaru-baka—Procedí a hacer la estrella, (rueda, pirueta, como le digan en tu país) alejándome de él-

Narra Sesshomaru:

¿¡Pero qué se ha creído la humana ésta para hablarme así!?  Ya verá... le dejaré claro que a mí nadie me habla de ese modo.

—Oe, oe, ¿¡quién te ha dado el permiso para hablarme así!?—dije tomándola del brazo bruscamente y acercándola a mí-

—¿Y quién ha dicho que puedes tratarme y hablarme de esa manera tan arrogante, eh?—Intentó soltarse, pero yo solo apreté mi agarre—Suéltame. Me lastimas.—dijo casi en un gruñido, sus ojos se volvieron violáceos. Yo hice caso omiso a sus palabras-

—Responde mi pregunta y quizás te suelte—Mi voz se oía calmada, pero sentía aumentar mi ritmo cardiaco, y acentuarse las marcas de mi rostro-

—Te hablo como le hablas a los demás. No pedí permiso, no lo necesito.—Sonrió con suficiencia- Ahora suéltame—Frunció de nueva cuenta el ceño-

—Tsk...—La solté y le di la espalda-

Narrador Externo:

El Yokai de cabello plateado se alejó a paso firme de la humana de hebras azabaches.

—Hmp. Yokai-baka—musitó Kuma para sí misma antes de seguir explorando el místico jardín en el que se encontraban-

Narra Tenshi:

—¿Y cómo les va?—oí en la oscuridad-

—No muy bien, mi Señora. Tanto el demonio como la humana son bastante orgullosos—dije haciendo una reverencia ante la figura que se encontraba tras las inmaculadas cortinas blancas-

—Humana no, Tenshi, hanyo. Que te quede bien claro. Porque aunque esa niña no lo sepa es una hanyo—decía mi Señora con firmeza-

—Hai, Shiro-sama—Hice otra reverencia antes de irme de allí y retirarme hacia mis aposentos-

Narrador Externo:

Mientras Tenshi le daba el reporte a su Señora; ambos, yokai y hanyo hacían lo posible por no estar cerca el uno del otro. Tarea casi imposible dado que el Jardín Cavernario estaba cargado de los poderes de Shiro, la creadora aquel jardín.

Aunque no quisieran aceptarlo, había surgido una especie de "entendimiento" entre ellos dos, y así pasó el tiempo aparente dentro de aquella cueva, pues por fuera sólo han pasado unas horas...

—Ya es tiempo de volver—dijo la mujer del kimono púrpura y plateado-

—¿De verdad?—preguntó la pelinegra con cierto tono de tristeza-

—De verdad—aseguró la de cabello bicolor-

—¿Y podemos llevarnos algo de lo que hay aquí?—volvió a preguntar-

—No. Esa es la única condición para salir de aquí. No pueden llevarse más que aquello que trajeron consigo—declaró con seriedad-

Dichas estas palabras los tres salieron de la cueva, en el mismo orden en que entraron. Y una vez en la cascada que ocultaba la entrada, Kuma y Sesshomaru se vieron a los ojos nuevamente esa noche, y en un acuerdo silencioso se fueron por donde vinieron, con la certeza de que ninguno de los dos contaría lo ocurrido en ese místico Jardín Cavernario.

¡Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas!

¡Taran! Kuma Higurashi es una hanyo 😎🌝 Espero que les haya gustado esta pequeña sorpresa.

¡Travesura realizada! ¡Ave semidioses!