Take my breath away. (Kanato Sakamaki y Tú) [Corrigiendo]

9. Stay away from him. (Reescrito)

Narra ____;;

- Hola, ____. Me presento, soy... Azusa... Mukami. - El chico a mi lado tenía sus brazos cubiertos de vendas, no me daba un buen presentimiento, si bien, su sonrisa era realmente linda e incluso inocente, pero algo me decía que solo su apariencia era así, después de todo Kanato no parecía una persona desquiciada y así era.

- Encantada, Azusa. Bueno, ya escuchaste mi nombre así que no necesito presentarme por segunda vez. - Sonreí algo incomoda mientras jugueteaba con mis manos, podía sentir la mirada de Kanato sobre mí, tan filosa que en cualquier momento podría cortarme. De reojo observe a los asientos de atrás solo para confirmar mi presentimiento, las manos de Kanato se apretaban fuertemente formando puños.

- Estás asustada, puedo notarlo. - La voz de Azusa me saco por completo de mis pensamientos obligándome a observarlo.

- No sé a qué te refieres, solo estoy algo nerviosa por ser el primer día.

- Ya veo, supongo que es eso. - Sus expresiones me decían que no estaba para nada convencido al respecto. - ¿Te gustaría acompañarme en el receso? ya que eres nueva podría enseñarte el instituto y conocernos un poco más.

- Suena bien, pero ya quedé con alguien, lo siento. -

- Oh. ¿Iras con Subaru? está bien, lo entiendo. - Sus palabras me dejaron algo desconcertada, ¿se conocían? por la mirada de Kanato podía deducir que así era.

El resto de la clase fue silenciosa, ninguno de los dos volvió a hablar hasta que el timbre sonó, Azusa me sonrío y se despidió mientras yo tomaba mis cosas para salir del lugar, esperaba encontrarme con Subaru fuera del salón, como había dicho, pero no fue así, nadie estaba esperándome. Mis manos comenzaron a sudar mientras apegaba y apretaba el bolso contra mi cuerpo, poco a poco el salón iba quedando vacío dejando solo a dos personas, Kanato quien se estaba acercando a mí y Azusa guardando sus cosas como si nada le preocupara, lo estaba envidiando un poco.

- ¡Azusa! - Llamé en cuanto Kanato estuvo lo suficientemente cerca para pasar por su lado y caminar a pasos rápidos hacia el chico de cabello negro. - Cambio de planes, ¿puedo ir contigo?

Mis palabras eran algo torpes y el nerviosismo comenzaba a llenar mi cuerpo otra vez, ignoraba por completo la mirada de Kanato, sentía que si lo observaba sería capaz de matarme, evitaría a toda cosa estar a solas con él.

- ¡Claro! me encantaría. Vamos. - Azusa tomo sus cosas e ignoró por completo al pelimorado, fui la primera en salir del salón seguida por el pelinegro, estando fuera finalmente logré respirar un poco mejor. - Es Kanato, ¿verdad? lo que te tiene asustada.

- ¿Qué? - No me esperaba para nada las palabras tan directas del contrario. - ¿Lo conoces? ¿conoces a Subaru también?

- Conozco a todos los Sakamakis, ____. - Mis ojos lo miraban desconcertada ante sus palabras, caminábamos por el largo pasillo del instituto hacia la cafetería. - Sé que no son los mejores tratando a las novias de sacrificio.