Cosa de doctores.

Cápitulo 23: Preludio cercano a una muerte inminente.

"Me hubiese gustado que todo fuera un sueño para despertar de esta pesadilla"

Viendo a mi colega retirarse a fumar senti muy en lo profundo de mi ser que algo acabara mal, ese hombre siempre con su expresion de molestia era raro que se fuera si no es para pensar y que el haga eso me eriza la piel, es como si las cosas se estan acomodando para fastidiarme la existencia pero a pesar de ser quien es, un idiota millonario que siempre tuvo todo en la palma de su maldita y asequerosa mano me sentia nervioso de que ciertas cosas se supieran, pero por ser el dudo que le interese "tomar cartas en el asunto" aunque aun asi no voy a dejar que me separe de los unicos tesoros que tengo, ya perdi a Ulna por mi descuido pero no pienso perder a Retina o a Tibia, no me importa lo que tengo que hacer pero primero muerto antes de que les haga algo.

Su aucensia me esta preocupando por lo que le pedi un taxi para que Retina llegara fuera de los apartamentos y una vez ella a salvo solo quedaba lograr que su "esclava" se alejara de mi tercer hija pero por una razon ella esta muy apegada a ella, era como si el papel de madre que le otorgo Tibia se lo estuviese tomando muy enserio aunque solo pedirle dejarme llevar a mi hija a dar una vuelta estaba denegada esa opcion hasta por la misma niña pero el tiempo pasa y quiera o no se preocupara por su "amo" es cuando podre llevarme a mi hija de este festival de locos.

Llore un poco mas para dejar mis lagrimas sobre la tumba de mi amada y parlanchina niña puesto aun no me recupero de su muerte pero de saber que esto me haria tanto daño hubiera corrido para al menos morir con ella o yo mismo haber muerto en vez de lanzarla al vacio para finjir un accidente, perdoname mi amada hija pero solo reconozco a Retina como mi hija aunque nos divertimos mucho, no pude evitar reirme de sus bromas y chistes pero siempre desprecie ese afecto no correspondido hacia ese hombre, el lo tiene todo y aun asi fue capaz de robar el amor de una de mis hijas con solo regalos y comida cara, lamento haber hecho esto pero ya el señor todo poderoso sera mi juez por mi envidia pero te culpo de ser la razon principal de la muerte de mi pequeña hija.

Paso una hora y fraccion para que la pequeña Sylvie se preocupara por su amo pero tomando ventaja le di la opcion de irlo a buscar juntos por lo que tome la silla de ruedas de Tibia para aun lloviendo dar una vuelta por el cementerio, mi plan era a unos kilometros de distancia usar la jeringa con cianuro de mi bolsillo en Sylvie para usar ese poder como amenaza ante Tinia para hacer que se fuera conmigo y ser la familia feliz que siempre soñe tener de no ser por el imbecil de mi colega que se encontraba bajo un arbol con otra persona, seguramente vendiendo alguna vulgar droga o amenazando de muerte a alguien como seguramente en eso pasa sus dias u otra cosa de negocios ilegales de ricos poderosos. Mi desprecio hacia ese hombre se fue acrecentando hasta darme cuenta de con quien estaba, mi primer error en la vida, dejarla con vida tras violarla como la cerda me venia pidiendo hacia tiempo que lo hiciera pero ahora seduciendo a mi colega? Que no te basto el "regalito" que te deje en el costado perra?.

Por suerte el estaba distraido hablando con ella muy afectivamente que todos notaron su escena de su asqueroso beso y nadie noto que mi inyeccion letal estaba lista de no ser por el que llamó a la pequeña Sylvie con el, mi plan estuvo casi arruinado de no ser por la escena de celos paternales de Tibia aunque una lastima no poder "sacar la basura" encargandome del doctor o su esclava ahora tenia toda la oportunidad de ser el heroe de mi hija encargandome de su madre.

"Hola cariño, tiempo de no verte, porque le coqueteabas a mi colega? Lo ves Tibia? Para esto tu madre te vendio, para irse de puta con los medicos importantes".

Una leve risa escapo de mi boca mientras las dos llorando peleaban pero lo que dijo mi "querida" victima me desquicio, dijo algo que se supone era un secreto entre los dos y eso se paga con la muerte dado que un atrevimiento de ese nivel no lo podia perdonar, menos frente a mi pequeña.

"Erickson, por muchos años tarde en superar tus constantes heridas pero fuiste demaciado lejos, una cosa fue matar a tu esposa, violarme o herirme pero arrebatarle el futuro a mi niña y decir que estaba perdida sabiendo que estaba viva y vivia bien con el doctor que me dio su bata, fuiste demaciado lejos!".

Lastima que mi hija tenia mas credibilidad en los hechos, no en una puta como tu, mi querida y asquerosa peliroja tu sola firmaste tu sentencia al estar aqui y hace exactamente cuatro años de lo que te paso pero fue por provocarme, si fue tu culpa y no lo puedes negar, era mi futuro o una leve marquita en tu abdomen pero igual despues de todo sigues siendo la misma criatura arrastrada que conoci y le di la mejor experiencia de su vida, tus gritos, forzejeos y llantos eran tan excitantes que aun despues de tantos años me sigues provocando a hacerte lo mismo.

"E-Espera...por eso mamá me vendio?...t-tu... tu le hiciste eso horrible a mamá?!"

Ella trago saliva mientras ambas notaron mi cambio de expresion, maldio cuerpo que no sabe guardar un secreto, bien supongo que tengo que jugar mi ultima carta antes de proceder a hacerle algo a su madre y si no confia en mi no me costara nada guardar un poco de veneno para esta deforme tambien, pudiste ser una buena hija pero tal y como mi esposa que en paz descanse no me molestaria acabar con tu miserable existencia.

"T-Tibia, hija mia le vas a creer a quien te vendio por cincomil o al amable compañero del mal doctor y padre que tienes junto a ti?"

Infundirle algo de dudas parece funcionar hasta que su madre se puso en el camino entre ella y yo, bien es una lastima ya que era uno de tus clientes favoritos mientras estabas inconciente, que lastima. No me quedo mas opcion que inyectar a la madre en su cuello pero puso tanta resistencia que casi inyecto todo el veneno en ella por lo que tube que golpearla para alcanzar a la aterrada niña y clavarle la jeringa con el poco veneno restante, aunque gracias a dios nuestro señor y salvador ambas quedaron desmayadas por el veneno y aun si no es suficiente se que no viviran lo suficiente para acusarme, bien con una hija me basta.

Solo camine hasta la siguiente calle para pedirme un taxi que me llevase a casa aunque aun me duele el rostro por la herida que esa gata cualquierq me alcanzo a hacer, al menos las dos arderan en el mismo infierno por lo que no me preocupa nada ahora, lo lamento Tania...hubieses sido una buena hija o puta si no es por tu obstinada actitud.