Había pasado una semana conviviendo con Nina en Los Angeles, y lo curioso es que durante las grabaciones, nunca estaba seguro de dónde estaba Nina. Ella decía que paseaba aprovechando su bajo perfil, pero me es extraño de ella porque siempre fue alguien de interiores, no de salir mucho a tomar aire.
Volví de grabar y Nina no estaba en suite, llamé a su celular y no obtuve respuesta. ¿Acaso se habría molestado por algo? No, ella me lo habría dicho, tenemos mejor comunicación desde que empezamos a salir juntos ¿cierto?
Decidí tomar un abrigo, porque había refrescado desde la última vez que nos vimos. Pero justo cuando estaba por salir en una busca desesperada por ella, alguien más abrió la puerta de la suite.
- ¡Nina!- exclamé abrazandola. - ¿Dónde estabas? ¿Por qué no contestabas al celular? ¿Estás...?
- Matteo, fui al hospital, por eso no te contesté antes.- dijo apartandose.
- ¿Estás bien? ¿Necesitas que te prepare algo?
- ¿Podemos solo dormir?
- Te esperaba para cenar.
- No me siento bien para cenar.
- Nina, ¿qué tienes?
- Sueño.
- Me refiero a la razón por la que fuiste al doctor.- dije perdiendo la paciencia, ella sin dudas ocultaba algo.
- Fui a sacar turno para mañana. Solo siento mareos desde el vuelo, pero nada grave.
- Nina, llevas días aquí, ¿por qué recién me entero de estos mareos?
- Es que estás tan ocupado con tu pelicula que no quería molestarte.
- ¿Estás segura? Porque honestamente siento que me ocultas algo, no te veo en el estudio de grabación y no tengo ni idea de que haces entonces, y ahora me entero que andas con mareos.
- De acuerdo, Matteo, no quería decirte nada hasta estar segura.- y entonces la idea brotó en mi mente.
- ¡¿Estás embarazada?!
- ¿Qué? No.- rio ella.- En realidad, es que me siento estresada.- reveló su secreto. - No por estar aquí, estar con vos me tranquiliza, pero cuando vas a actuar decido irme para no distraerte e intento llamar a la editorial.
- ¿La editorial? ¿Pero no dijiste que ellos te llamarían?
- Pasaron días, y mi libro no es tan largo, ¿qué si buscan la forma más delicada de rechazarme? ¿Qué si ahora tengo que dedicarme a otra cosa totalmente diferente? Nunca me imaginé haciendo otra cosa distinta a escribir...- decía cristalizando sus ojos e hiperventilandose.
- ¿Por qué no me dijiste nada antes?- cuestioné sintiendome un tonto por no haberlo notado antes mientras la abrazaba.
- No quería distraerte con mis problemas.
- Somos un equipo, y para funcionar como tal, no debemos tener secretos como este.- dije tomando sus manos.
- ¿Pero sí podemos tener secretos?
- Obvio, ¿cómo se supone que nos sorprendamos al otro sin secretos?- reí dibujandole una sonrisa en el rostro, aunque era evidente que la editorial aún le preocupaba. -¿Qué puedo hacer para que te sientas mejor?
- No estoy segura.- admitió ella. - Pero estar con vos me ayuda.
- Entonces salgamos esta noche.
- ¿Pero no tenes que ir a grabar mañana?
- Aunque tenga que madrugar, nada va a evitar que salgamos.
- ¿Y si nos quedamos acá? No mentía al decir que estoy cansada.
- De acuerdo, pero vamos a bailar.- indiqué seleccionando una balada para guiarla en un baile tranquilo, una de sus canciones favoritas, La Vie En Rose.
- Hold me close and hold me fast, the magic spell you cast. This is La Vie En Rose. When you kiss me, heaven sighs, and though I close my eyes, I see La Vie En Rose. When you press me to your heart, I'm in a world apart, a world where roses bloom...- canté dejando que se relaje en mi hombro.- And when you speak, angels sing from above, everyday words seem to turn into love songs. Give your heart and soul to me, and life will always be, La Vie En Rose.- entoné cuando ella levantó la mirada y empezó a interpretarla en francés.
- Quand il me prend dans ses bras Il me parle tout bas Je vois la vie en rose. Il me dit des mots d'amour, des mots de tous les jours, et ça me fait quelque chose.- me sorprendió ella pronunciando perfectamente cada palabra.
- Give your heart and soul to me And life will always be La Vie En Rose.- armonizamos juntos besandonos mientras la canción continuaba.
- No sabía que supieras francés.
- No muchos lo saben.
- Así que ahora salió a luz otro secreto.- reí.
- Igual tampoco es que sepa hablar francés, sólo sé la letra de esta canción.- admitió riendo.
- Tiene sentido sabiendo que esta canción es de tus preferidas.- asentí.
- ¿Sabes? Ya me siento mejor, ¿qué tal si yo te invito a comer?
- ¿Y tu sueño?
- Tanto reirme me despertó. Gracias, Matteo.
- Cuando quieras.- le sonreí mientras ella tomaba mi mano para llevarme a cenar.
Al día siguiente, fuimos juntos al set de grabación y le pedí que no se fuera.
- ¿Y si te distraes?- preguntó.
- ¿Te cuento un secreto?- susurré acercandome a su oído. - Sin ti me distraigo más fácil.- declaré posando un beso en su mejilla.
- Hijo, ¡terribles noticias!- interrumpió Zeus.
- ¿Qué pasó?
- La actriz de Megara, Brenda, se rompió una pierna, lo cual sería gracioso si esto fuese una obra de teatro, pero en este caso es una tragedia griega.
- ¿Qué significa eso? ¿Hoy no hay grabaciones?- pregunté volteandome hacia Nina.
- No, pero tendrás que hacer audiciones con varias actrices para ver con cuál compartes mejor química, aunque seguramente se terminará editando el rostro de Brenda ya que sus canciones ya están grabadas y sus primeras escenas también. Un momento, Nina se parece a Brenda, ¡podría ser su doble! Iré a hablar con el director...- decidió yendose antes de que pudiera contestar.
- ¿Qué dices, Nina? ¿Te gustaría actuar para que luego editen tu cara?- pregunté. - Entiendo si no quieres, después de todo tú misma dices que siempre te imaginaste escribiendo...
- Pero ello no me impidió patinar o cantar en público.- señaló. - Ni tampoco impedirá que comparta, aunque sea para nosotros, la cámara con mi novio.- agregó posando un beso en mis labios.
- ¿Cuál es tu secreto para ser la mejor persona que conozco?
- No se lo digas a nadie.- dijo actuando misteriosa. - Pero mi secreto es salir con el mejor.- añadió a mi oído logrando que sonría.
ESTÁS LEYENDO
25 Cosas Que Amo De Vos
FanficDespués de 25 Cosas Que Odio De Vos, narrado por Nina, leeremos lo que pasa después pero desde el punto de vista de Matteo.