Sentimientos que casi explotan

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Salieron de inmediato, utilizando nuevamente los poderes de Peridot se transportaron en una pieza de metal. Ambos estuvieron de acuerdo que era mejor revisar la Ciudad desde arriba en vez de usar el portal. Cuando llegaron observaron que el lugar estaba solitario, habían muchos rastros de destrucción pero no había ni una pista que indicara que había gente viviendo por allí.

Steven, estando al frente, suspiró pesadamente.

—No hay nadie...

—Seguro escaparon— El menor la miró de reojo.

—¿Tu crees?

—Es algo obvio, la otra opción es que ellos...— Dejó la oración sin terminar, ya que prefería no decir lo último en frente del chico, pero él ya sabía a qué se refería.

—No, las chicas debieron hacer algo. Ellas no dejarían que la gente...ni mi papá...— Guardó silencio un momento—, Solo sé que ellos están a salvo— Mencionó serio.

—Pero ¿Qué hay con las otras? Además, también me preocupa Lápis, no sé si sigue en el granero o escapó o qué— Bajó la cabeza imaginándose eso.

—Hm, bájanos— Dijo el otro, haciendo creer que no quería responder lo de Peridot. En cuanto bajaron suavemente, muy cerca de "La Gran Rosquilla" él habló, mirando a la otra  —, Las Gems deben estar cerca, lo presiento y por lo de Lápis no creo que ella se escape, ella es nuestra amiga y estoy seguro de que ella no nos dejaría solos— Sonrió, pero muy levemente.

—Steven, vamos a buscarlas— Dijo ella, avanzando y tratando de tomarle de la mano despacio, no le gustaba que el híbrido estuviera decaído.  

Aunque Peridot tampoco estuviera de la mejor manera, haría lo que fuera con tal de ver al menor sonreír.  

—Vamos— Susurró tomando de una vez la mano de la mayor. Volteó su rostro para que no se notará el mínimo sonrojo en sus mejillas. 

Voces internas que imploraban un contacto más cercano, más conversación, una simple mirada que dijera "Todo estará bien".

—Oye...— El menor volteó, ella no dijo nada, solo mostró una pequeña sonrisa y una mirada serena que era lo que esperaba.

—No te separes de mí— Dijo inmediatamente, la gema verde alzó las cejas.

—No lo haré ¿Te lo tengo que decir otra vez?— El chico separó el agarre para dar paso a un abrazo.

—Esto es difícil, no saber exactamente qué siento hacia tí— El menor la estrechó más que antes—, Antes de encontrarnos con lo que sea que vayamos a ver quiero decirte que tú me traes felicidad, que con solo tomar tu mano me llevas a la calma, a la paz...

—"Paz y amor en la Tierra haber"— Sonrió, devolviendo el gesto del contrario. Éste rió bajito.

—...Que con abrazarte quiero que sepas que me alegra tenerte cerca, que con hablarte y saber tu historia me doy cuenta que, si bien somos diferentes también somos iguales. No sabemos cúal es nuestro propósito y sabes, es mejor que siga así, somos libres, somos capaces de tener nuestros propios pensamientos, pero sobretodo, tenemos el poder de estar unidos sin importar que pase. 

Peridot pensaba que no podía quedarse callada, el remolino de emociones en su interior no podía ignorarse. Ambos se separaron, continuaron su caminar pero al pasar lo minutos la mayor habló.

—Mira...tú fuiste el primero que creyó en mí, el primero en hablarme de forma amable, mi primer amigo, hasta puede sonar exagerado, pero creo que me salvaste la vida— El chico quería hablar, solo que la mayor no le dejó—, Sin tí seguramente no hubiera conocido este planeta de la manera correcta, estaría quizá en el Planeta Madre, sirviendo todo el tiempo a Diamante Amarillo; pero no tendría sentimientos, no tendría amigos, familia, no tendría algo por lo qué esforzarme. Tú me cambiaste la vida con tus costumbres raras, con tu forma de ser...sinceramente estaría pérdida, nada tendría sentido de no ser por tí.

٠ ِ٘ ٓ 〯۫⃟💖᭄ᬽ 𝐂𝐀𝐌𝐁𝐈𝐎𝐒 𝐄𝐗𝐓𝐑𝐀𝐍̃𝐎𝐒 𓍯《sᴛᴇᴠɪᴅᴏᴛ》⠠᰷⸱↷ ༅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora