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Mila


Estábamos listos para la fiesta, mi madre estaba en su habitación, y Harry y Louis ya sabían lo que debían hacer. Me mire al espejo por última vez con mi traje de niña dulce y sonreí.

Mi traje consistía en un vestido rosa pastel acompañado de dos medias blancas transparentes que llegaban a mis rodillas, unos zapatos rosados a juego con una pequeña plataforma, mi cabello suelto, un choque rosado con un dije de corazón y un moño blanco en mi cabeza que adornaba mi cabello suelto. Y como complemento en mi mano debía llevar una canasta llena de dulces falsos.

Oí golpes en mi puerta y la abrí, Niall entró disfrazado de pirata, se veía tan bien.

—Joder, caperucita rosa. —mordió su labio mirándome de pies a cabeza. —Me encanta, aunque prefiero el de conejita. —me guiño el ojo y yo reí.

—Te vez muy bien pirata.

—Arrg —imito a un pirata y reí. —bien hermosa vamos. —Asentí y salimos con mucho cuidado de mi habitación, bajamos las escaleras y abrí la puerta intentando no hacer ruido.

Salimos de la casa y comenzamos a caminar rumbo a la fiesta, la casa de Charlotte quedaba a unas cuadras de mi casa. La conocía ya que de pequeña había ido a su cumpleaños de 11 años y accidentalmente derramó jugo sobre mi ropa.

En ese entonces Jessie iba conmigo y ella accidentalmente lleno el rostro de Charlotte con pastel. Jamás olvidaría la cara de Charlotte llena de crema rosada.

Llegamos a la casa y vimos a varios con disfraces fuera de la casa, se podían ver las luces de neón y la música se oía a tope.

Golpeamos la puerta y Charlotte nos recibió, estaba disfrazada de porrista, usando una falda súper corta y un top sin sujetador que resaltaba su excitación.

A su lado estaba Sheila quien vestía de vampiresa a con un vestido negro ajustado con decorados en rojo, colmillos y una capa negra a juego con sus botas de cuero negras.

— ¡Mila! ¡Niall! ¡Pasen! —Se hizo a un lado.

—Niall te vez increíble. —Sheila se apoyó en su hombro y Niall sonrió algo intimidado.

—Gracias ustedes se ven... Bien... —aparto a Sheila y tomo mi mano.

—Oh, Mila no te vi, te ves.... Adorable. —Habló Charlotte.

—Parece sacada de una tienda kawai —Rio Sheila.

—Yo creo que se ve muy sexy. —Habló Niall mirándome.

Mordí mi labio y pude ver como Charlotte y Sheila parecían molestas. Entramos a la fiesta y fuimos a la mesa donde había dulces y bebidas.

— ¿Ponche hermosa? —Sonreí a Niall y asentí. Él sirvió dos vasos y me dio uno.

—Gracias Ni. —Tome un trago y deje el vaso en la mesa.

Veía a la gente bailar al ritmo del reggaetón latino, Charlotte tenía familia latina por lo tanto sus gustos eran de allí.

— ¡MILA! —Vi a Ayi correr hacia mí y sonríe.

— ¡AYI! —La abracé — ¿Cómo estás? Luces increíble.

Estaba disfrazada de vaquera, se veía bien y resaltaba su figura a la perfección.

—Mira quien habla, te vez re dable wacha. —Habló y reí — ¿Qué haces rubio resentido? ¿Ahora sos el pirata resentido? —Miro a Niall y el rió.

—Hola Ayi. —sonrió. —Soy un pirata maligno. ¡Arrrg! —Hablo mostrando su garfio de plástico.

—Sos un pelotudo pero bueno. Ahre no, mentira, te vez bien. —Todos reímos. — ¿Qué onda? ¿Van a bailar?

Daddy Please! © |njh|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora