Una vez regreso a la aldea, Naruto, por insistencia de Sakura, fue a la oficina de la Hokage a dejar el reporte de la misión, y tardo un rato en explicar todo a esta, aunque trato de omitir su encuentro con su joven sensei todo lo que pudo.
Una vez salió, pensó en ir a Ichiraku por un poco de ramen, pero se sentía cansado, así que decidió ir a casa.
- Yo, Naruto - ya estaba por llegar cuando alguien le hablo
- Ah, Kakashi sensei, hola - por alguna razón, ahora era algo extraño hablar con esa versión.
- ¿Llegas de una misión?
- Si, iba a casa a descansar un poco - en ese momento, una idea extraña y algo loca paso por su mente - ¿Quiere pasar a tomar algo?
- No, no - el peliplata se extraño un poco por la oferta de su alumno, pero lo oculto comenzando a caminar - será mejor que vayas-
- ¿Pasa algo... Tsundere-kun? - esas palabras lo paralizaron, el rubio continuó su camino, y el mayor, aún dudando sobre lo que escucho, lo siguió.
Al cabo de un rato, el peliplata se encontraba sentado en la mesa de la casa del rubio con un montón de dudas en la cabeza, Naruto le había ofrecido algo, pero solo termino aceptando algo de té.
- Así que... - decidido a aclarar todo, trato de iniciar la conversación.
- ¿Si? - el rubio colocó el vaso con té frente a él.
- Eso... Tú sabes... ¿Ya ocurrió?
- ¿Eso? Ah, se refiere a lo de "Tsundere-kun" - un sentimiento de incomodidad se esparció en el mayor al escuchar eso después de tanto tiempo.
- Si... Así que ya nos encontramos.
- ¿Sabe? Ahora hablar con usted es... Un poco raro.
- Así me sentí la primera vez que me encontré contigo después de eso - murmuró para si mismo, aunque el rubio alcanzo a escucharlo. Una sensación extraña empezó a recorrer su cuerpo, y decidió alejarse antes de que sus sentimientos se salieran de control - supongo que es todo, debería irme...
Trato de levantarse, pero al momento que dio el primer paso sus piernas temblaron y acabo de cara en el suelo. Hizo un esfuerzo por ponerse de pie de nuevo, pero sus piernas no le respondían.
- ¿Qué pasa? - su estudiante se acercó a él - ¿Te sientes algo mareado? - una sonrisa traviesa apareció en su rostro.
- ¿Qué hiciste?
- Em... ¿Recuerdas la planta rara que comiste y lo que pasó después? Pues traje un poco conmigo.
- El té...
- Así es.
El rubio se agachó a su altura para ayudarlo a levantarse, este trato de alejarlo, pero termino siendo prácticamente arrastrado a la cama.
- Naruto, no hagas esto - viendo que no podría salirse de eso usando la fuerza, intento convencer al ninja más testarudo de la aldea de cambiar de opinión.
- Eh - cosa que no resultó muy bien para el peliplata, pues el rubio dirigió su mano a su entrepierna y empezó a frotar su miembro por encima de su ropa - creo que es algo tarde para eso.
Tomo el brazo del rubio para tratar de detenerlo, pero su cuerpo no le respondía muy bien en ese estado. Su otra mano se aferraba a la cama mientras intentaba mantener su respiración tranquila. Aprovechando esto, Naruto dirigió su mano libre al rostro del mayor y bajo su máscara lentamente, dejando al descubierto el rostro sonrojado de su maestro.
- ¿Sabes algo? A pesar de que han pasado años, sigues siendo adorable - el rubio deslizó su mano dentro del pantalón para después bajarlo y descubrir el erecto miembro del mayor.
- P-para - Kakashi desviaba la mirada mientras soltaba pequeños gemidos que no podía contener. Sabía que si lo veía de esta forma, otra vez, después de tanto tiempo, ya no podría resistir más.
- Pero si lo estás disfrutando - mencionó con una expresión maliciosa en el rostro mientras una de sus manos acariciaba sus piernas a medida que se deshacía de su ropa por completo, para luego regresar a sus muslos - me pregunto cómo estará esto de aquí~
El mayor dió un sobresalto al sentir un dedo rozar su entrada.
- ¿Oh? ¡Esta húmedo! - exclamó el rubio al percatarse, para luego introducir su dedo.
El jadeante peliplata mantenía sus manos aferradas a las cobijas, mientras percibía como sus piernas perdían la sensibilidad al sentir como su punto débil era atacado constantemente, hasta que esos estímulos lo hicieron correrse.
Naruto saco su dedo y retrocedió un poco para deshacerse de su ropa, mientras Kakashi lo observaba tratando de calmar su respiración. Cuando el rubio volvió a acercarse y observo el rostro del peliplata, con una expresión que había visto antes: miedo. La misma expresión que tenía su versión joven cuando lo forzó a hacer lo mismo la primera vez.
- Kakashi sensei - lo llamo de forma dulce mientras se acercaba a él - no tenga miedo... No voy a lastimarlo.
Después de un debate interno, termino observando los profundos ojos azules del rubio, y perdiéndose en ellos, y la calidez que provocaban, acercándose impulsivamente para juntar sus labios.
El contrario respondió sin pensarlo, colocando su mano en los cabellos plateados para profundizar el beso, separándose para tomar algo de aire.
- No tenías que hacer eso - después de un rato, el peliplata al fin había conseguido formular una oración.
- ¿Eh?
- La estúpida planta - desvío su mirada avergonzado - si solo fueras tú tarde o temprano me hubieras hecho rendirme.
El rubio sonrió ampliamente lanzándose a abrazar al mayor con fuerza, aprovechando además para quitarle su camiseta y dejar su torso al descubierto. Deslizó sus manos por todo su cuerpo, bajando a sus piernas abriéndolas un poco, dirigiendo una última mirada al peliplata, como si le pidiera permiso.
- Hazlo de una vez.
Obedeciendo con una sonrisa, Naruto ingreso su miembro lentamente en Kakashi, mientras este trataba de mantenerse tranquilo. Una vez llegó al fondo, el rubio empezó a moverse a un ritmo tranquilo, escuchando los dulces gemidos de la persona debajo de él.
Presa del placer, el menor aumento la velocidad de sus embestidas, siendo un poco brusco y generando que al peliplata le doliera un poco, pero igualmente le gustaba.
Después de unas cuantas embestidas más, Kakashi termino corriendose, y un par después Naruto lo hizo dentro de el.
Terminaron acurrucados en la cama del rubio, con el rubio atrapado entre los brazos del peliplata, y este acariciando sus cabellos desordenados.
- Eres... Cálido - murmuró el mayor medio dormido.
- ¿Mmm?
- No... vuelvas a irte - el menor sonrió y le dió un beso en la cabeza.
- No lo haré.
*****
*sale de su búnker lentamente* ¿No hay nadie que quiera matarme?... Me arriesgaré de todas formas.
Y así, está linda historia llega a su fin :3
Trate de seguirla un poco más, pero ya no encontraba de qué forma escribir más del mini tsundere peliplata con el rubio, y ya tenía el final planeado hace tiempo, así que decidí dejarla así.
Ahora, para la siguiente historia tengo pensadas varias ideas: podría hacer otro Narukaka, pero ahora en un AU escolar, que estaría más enfocado en la relación de los dos (por decirlo, más cosas lindas y cursis qué lemon).
O también pensaba en escribir un NarutoxShikamaru o NarutoxSai. Ustedes eligen.Supongo que eso es todo. Gracias por seguirme durante mi primer historia, nos leemos luego n.n
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Cambio de papeles
FanfictionNaruto parte a una misión sumamente importante y cuando va de camino algo lo golpea dejándolo inconsciente, cuando despierta se encuentra en un lugar que le parece conocido, pero no lo identifica del todo, hasta que se cruza con alguien que se parec...