Carlie McClain es una chica poco social que acaba de cumplir los 18 años y vive en Argentina, ella empieza a tener problemas familiares pero estos pronto se arreglan. Sus padres deciden enviarla a New York a estudiar la universidad. Todo va bien y e...
•Tells Jaden• Quité las sábanas y apagué la alarma mirando a la hora de mi teléfono. 5:30 Me quedé un rato mirando al techo pero el frío hizo que me parara a tomar un abrigo. Al parecer el día había amanecido con un clima frío. Encendí la luz de mi habitación, ya que estaba obscuro aún. Prendí una bocina Bluetooth y elegí un Playlist de música en ingles. Comencé con la canción de Slow hands de Niall Horan, acerque la bocina un poco mas a la ducha y me metí a darme un baño. Disfruté la ducha pues esa canción era tan buena, el ritmo me encantaba.
Termine de ducharme y me puse un conjunto normal, como el que siempre llevo.
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Fui a la cocina donde mamá me tenía unos hot cakes para desayunar. Le saludé con un beso de buenos días en la mejilla.
-Jaden: Hola mamá, buen día. -Mamá: Hola hijo, ¿como dormiste? -Jaden: Bien, gracias, ¿y tu? -Mamá: excelente. -Jaden: ¿y papá? -Mamá: el se fue a trabajar muy temprano, al parecer está en proceso de crear otro aparato.
Mi papa era el fundador y gerente de "J.J" que era una empresa creadora de aparatos electrónicos. Mi papa de verdad era el señor perfección, y el quería que yo fuese igual, eso explica el porque mis buenas calificaciones y mi esfuerzo en la universidad. No quiero ni imaginar como se pondría si yo tuviese una mala calificación. El siempre nos inculco valores y una buena educación a mi y a mi hermana, pero al parecer solo a mi me había funcionado del todo ya que mi hermana al pasar por la adolescencia empezó a ser rebelde y a descontrolarse. Mi papá pensó que ella estaba loca, pero en realidad solo está superando la etapa. Yo tengo 19 y ella 21, aún no sale de su zona de juventud y la comprendo. Pero la verdad yo no me atrevería a retar a mi papá.
Mi mamá es algo diferente, ella es más dulce, y siempre nos crió con amor, obvio mi papá también pero ella era la que nos abrazaba cuando llorábamos por algún regaño de papá.
A los 11 años me mude junto con mi familia aquí a New York, ya que nosotros vivíamos en California. Me acoplé muy rápido y cuando entré a la secundaria tuve muchos amigos, y también algunas novias, pero ya saben mi historia, ninguna se quedó conmigo.
Mi hermana Julia, bajo las escaleras con una blusa de botones lila, una falda elegante negra y un saco estilo secretaria, acompañados con unos tacones negros los cuales se veía que no los aguantaba.
-Jaden: ¿A dónde vas bambi? *dije bromeando sobre sus zapatos mientras acaba mi desayuno* -Julia: ja ja ja, que gracioso hermano. *dijo sarcásticamente enojada* -Jaden: ¿para que te pones esos zapatos si ni los aguantas Julia. -Julia: Tengo que estar elegante, dijo papá. *hizo una mueca* -Jaden: ¿Para qué o que? ¿A dónde van? -Julia: El me dio un puesto como "Administradora de redes sociales de la empresa". -Jaden: Ah, en el chisme, como te encanta. -Julia: Obvio. -Jaden: Que flojera estar todo el día frente a una computadora... Ah es verdad, tu lo haces todo el tiempo, ya estas acostumbrada. -Julia: Por eso es que no me resulta aburrido.
Ella desayunó y luego nos fuimos, me llevo a la universidad en su auto ya que yo aún no tenía mi licencia. Me dejó ahí y se fue. Mi hermana era fastidiosa a veces pero la mayoría de las veces era divertido estar con ella.
Me baje del auto con mi mochila sobre los hombros y solo me fui a sentar en mi salón hasta que comenzara la clase. La profesora entró y las horas pasaron volando. Se llegó la hora del descanso así que tome mi botella con agua desinfectada y salí a sentarme a una de las mesas. Estaba en mi teléfono bobeando cuando levanto la mirada y veo a la chica de la otra vez. Ella llevaba el cabello suelto sobre las orejas y le llegaba a los hombros. Contemplaba su belleza cuando volteo a verme.
