Nadie esperaba que Aomine Daiki, el as del equipo de básquetbol de la escuela tuviera un amigo como Kagami Taiga, un chico con apariencia total de nerd.
Sin embargo, hay una razón para ésto, y esa razón no será muy buena para Aomine.
**Este fan...
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..::Capítulo 5 - Sólo un beso::..
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Tuvo que llegar temprano a la escuela, todo con tal de hablar con Kagami y persuadirlo para que éste olvidara la cita que tenía con Satsuki y en lugar de eso, se quedara con él, haciendo cualquier cosa divertida.
Si lo pensaba dos veces, aquello era muy bajo... ¿Cómo podía considerarse el mejor amigo de Momoi Satsuki cuando estaba jugando tan sucio?
Prefirió dejar de pensar por ese momento...
La campana de la escuela, para iniciar las clases, aún no sonaba, así que se dirigió con tranquilidad al salón de Kagami, donde seguramente el chico ya estaba, sentado frente al pupitre, tratando de escapar de los demás alumnos que habían comenzado a seguirlo de lejos.
Cuando llegó a su destino, primero se asomó por la puerta del aula, para verificar si el megane se encontraba allí.
Y entonces lo vio... con ese rostro de aburrición, mirando hacia afuera de la ventana y esperando que la campana sonara.
Se tomó unos segundos en apreciar el perfil de Kagami, hasta que escucho una voz conocida a sus espaldas.
—Hola, Aomine-kun. — El moreno dio un pequeño salto ante el susto que Kuroko le había dado. —Es bueno verte.
—Tch. ¿Siempre apareces así? — cuestionó, girando su vista y notando que Kagami se había percatado del pequeño alboroto que estaban causando los dos chicos, y sin pensarlo, se levantó de su asiento, y fue al encuentro de ambos chicos.
—Estaba aquí desde el inicio. — Finalizó Kuroko, mirando a Kagami.
—Ahomine. ¿Qué haces aquí? — Taiga habló con curiosidad en su voz.
—Uh... estaba buscando antes de que éste chico me asustara... —señaló a Kuroko, quien mágicamente había desaparecido del lugar. — Uhhh....
Kagami pensó que, para que el moreno lo fuera a buscar hasta su salón, significaba que se trataba de algo importante; además de que el chico se veía un tanto nervioso y evitaba mirarlo a los ojos... tenía un raro comportamiento.
—Estaba pensando que... podías pasar por alto tu entrenamiento de hoy, y podríamos ir a comer a Maji Burger y luego a jugar básquetbol... ya sabes, como hace tiempo. — Propuso Aomine, intentando formar en sus labios una pequeña sonrisa.
Kagami no respondió de inmediato a la oferta... en verdad sonaba bastante tentador ese plan, y le encantaba, pero...
—Ummm... tal vez podríamos hacer eso mañana... hoy tengo planes. — Habló, llevando una mano hacia su nuca, simulando rascarse.
