Fue un error? [PAUSADA]

11.-LA CENA.

CAPÍTULO 11. La cena.

Jared.

Lleva días evitándome.
Siempre pasa lo mismo. Si estamos todos, obviamente no puedo decir nada, y si estamos solos, una excusa por parte de ella nunca falta, que si tiene que hacer no se qué, que si se va a duchar, que si está cansada...
Ya estoy harto. La próxima vez que la pille sola, no se me escapa.

¡Vale ya! Tengo que alejarme de Elizabeth ¿Por qué tengo tanto interés en ella? ¡Joder!

Cojo mi bolsa de deportes y me encamino al gimnasio.

~~~

Corro un rato, luego hago pesas y después de unos minutos diviso  a una conocida masa de pelo rubio dirigirse hacia mi.
A medida que se va acercando intento recordar su nombre, pero mi mente no se esfuerza lo suficiente y no consigo mi objetivo.

A ver, piensa... Sheila, Lleida... ¡Dios! Si me acosté con ella el otro día...

-Hola.- Su voz estridente se abre paso entre mis oidos y yo le contesto con un movimiento de cabeza en forma de saludo. No dejo de correr en la cinta.- Me preguntaba si ibas a hacer algo esta noche.

No pierde el tiempo ni nada...

-No soy de citas.

-Ni yo.  Pero la diversión me encanta.- Cotesta con la sonrisa juguetona que todas ponen.

El problema para ella es que yo no me acuesto con la misma chica más de una vez. Evito el comprometerme con relaciones que sé que no tienen ni pies ni cabezas.
¿Para que empezar algo que no me voy a tomar en serio?

Repentinamente me viene a la mente la cena que quiere dar hoy Rick para presentarnos a su novia.
Dijo que había que  llevar acompañante y aunque no me apetece mucho...

-¿Te apetece cenar?

~~~

Había sido realmente fácil que la rubia, llamada Laila por cierto, accediera a ser mi acompañante en la comida. No pasó ni un segundo cuando ya tenía su respuesta inmediata.

El jaleo de voces que  oigo al entrar encasa me confirma que todos se encuentran en ella.
Es entrar en la cocina y, de manera inmediata, fijarmeen ella. Elizabeth lleva el pelo en un moño mal hecho y está vestida con una sudadera azul marino, unos vaqueros pitillos claros con un roto en cada rodilla y luego unos calcetines pinkis blancos.

¿Por qué me parece que con todo lo que se ponga está preciosa?

Saludo y acontinuación subo para ducharme y arreglarme.
Me desvisto y al abrir uno de los cajones para coger una muda veo ante mi el bikini de la ya no desconocida chica que me besó en la universidad. Elizabeth.
Sigo pensando que es  ella y eso nunca cambiará. Los labios eran los mismos. Lo recuerdo. No podría olvidarlos.

Ultimamente estoy siendo muy propenso a tener algún contacto con cualquier chica y luego no saber quién es. Pero bueno... una menos que buscar. Ahora solo queda encontrar a la otra y ya sacando este tema... tengo que comentárselo a Elizabeth.

Al pensar en ello, abro la cajonera y agarro la tobillera entre mis manos.
La miro durante un rato. ¿De quién será? Pasados unos segundos la vuelvo a guardar y me encamino al cuarto de baño.

Cuando salgo de la ducha, con la toalla enrollada en torno a mi cintura, entra Andrew.

-Ei tio, acaba de llegar...- Repentinamente se queda callado.- ¿Quién te ha hecho eso?

Me giro para mirarle a la cara. Frunzo el ceño por no saber a qué se refiere.

-¿El qué?

-Tienes la espalda toda arañada.- Se le forma una sonrisa picarona en el rostro.- ¿Quién te ha hecho eso Jared?