Life is blue [Larry Stylinson]

13. Publicidad.

El amor es... En realidad no se le puede otorgar una definición única, el amor es muchas cosas. Es la emoción con la que te recibe tu mascota después de un largo día. Es un gesto gracioso entre amigos. Es un sermón de tus padres después de que llegaste más tarde de lo debido. Es que tu hermano o hermana mayor lance una mirada amenazadora a tu nuevo novio o novia. Es ese brillo que aparece en tus ojos cuando ves llegar a esa persona especial. Es sacrificar algo que quieres por esa persona que amas.

Cuatro años después de la partida de Louis...

-Escúchame bien Zayn, no lo haré, es muy pronto para... -Dijo el rizado, mientras le arreglaban el cabello.

-¡Oh, vamos cariño!. -Soltó, cansado. -Hemos estado juntos casi cinco años, así que no puedes decir que es "pronto". -Realizó unas comillas con sus dedos.

-Para mi lo es, dame un poco más de tiempo para pensarlo, ¿Ok?. -Trató de tranquilizarlo.

El móvil en el bolsillo del pantalón del moreno comenzó a sonar. -¿Prometes que lo pensarás?. -Preguntó, tomando el teléfono y viendo la pantalla con el entrecejo fruncido.

-Lo prometo. -Dijo, colocando su mano derecha sobre su corazón.

-Gracias. -Dio un corto beso en sus labios, ante la mirada enternecida de la estilista. -Debo irme ahora, surgió algo en la oficina. Te amo.

-También te amo. -El de ojos avellana le dió un guiño y se alejó del lugar, marchandose.

-Ha perdido la razón, ¿cierto, Rosie?. -Preguntó Harry.

-El que ha perdido la razón eres tú, ese hombre te ama. -Comentó.

-¿Qué le pasa a las personas hoy en día? ¿Acaso han perdido los valores? Lo normal es que las personas se casen y después se muden juntos, no al revés. -Replicó.

-¿Acaso vives en 1840? Eso es antiguo, los tiempos han cambiado. -Dijo, riéndose. -Oh... Ya veo. -Dejó de hacer lo que hacía en el cabello de Harry y se puso frente a él. -Lo que quieres es que Malik te proponga matrimonio, ¿Verdad?. -Dijo, chillando emocionada.

-¿QUÉ? ¡NO! ¿MATRIMONIO? ¡NO!. Gritó, exhaltado.

-Entonces sí eres de 1840. -Dijo, perdiendo interés.

-No, es solo... no quiero apresurar las cosas, ¿sabes?, muchas cosas han pasado este último año, poco después de la universidad ya estoy en proyectos cinematográficos muy importantes, campañas publicitarias, estoy en los medios todos los días, necesito asimilar esto y después me daré tiempo para plantearme vivir al lado de mi novio. -Dijo con seriedad. -Eso es todo. -Dijo, mirando a un punto fijo.

(...)

Se abrían lentamente un par de ojos azules, un poco rojos por la agitada noche anterior. Miró alrededor de su habitación, escuchó un ruido dentro de su departamento, se extrañó ya que no vivía con nadie. Se apresuró a salir a averiguar de dónde provenía ese sonido, aún desnudo. Se acercó lentamente a la cocina, encontrando a una chica castaña desconocida ahí.

-¿Te desperté? Lo siento, solo quería prepararte el desayuno antes de que despertaras, pero no hay café, solo había leche pero si quieres voy a comprar café y vuelvo, no tardo.
-Dijo, apurada.

-¿Café? No, solo quiero que te vayas. -Dijo con fastidio. -Ni siquiera sé tu nombre, es más ni siquiera recuerdo tu rostro. Sal de aquí. -Ordenó.