Los elegidos

Capitulo 6

Capitulo 6                                                                                               

El salón era muy elegante muchos estudiantes se dirigían así las mesas que estaban en ellas Julie se volteo hacia sus amigos - ¿Y ustedes donde van a cenar? – Preguntó los demás se voltearon con sus respectivos pupilos - Todos se harán los misteriosos y se quedarán pensando pero de todos modos comerán con los de nuevo ingreso – Dijo Ana – Como discutir contigo – Dijo Julie mientras los demás sonreían - ¿Estás listo? – Me pregunto Julie – Nací listo – respondí tratando de lucir firme y seguro de mi, ella tomo mi mano lo cual produjo que una corriente eléctrica recorriera todo mi cuerpo ella me dirigió a una mesa grande en la esquina del salón todos los mentores se sentaron a lado de sus respectivos pupilos Marcos me miraba de forma recelosa y la verdad no me importo mucho. La cena transcurrió de lo más tranquila, pero a la mitad de esta yo ya me estaba cayendo de sueño ya que a mí no me gustaba develarme pero todo para evitar que Marcos se acercara a MI Julie así que me quede ahí – La verdad no entiendo porque fueron por ti al mundo humano – Dijo Alicia Julie se quedo callada y tomo su taza de café con leche y se la llevo a la boca Ana la volteo a ver y con una mirada fugaz entre las dos todo estuvo entendido – Seguro fue porque tengo unos asuntos pendientes aquí en la escuela – Dijo Julie dejando la taza – Julieta Díaz Torres, no me mientas – Dijo Marcos con una sonrisa burlona, Julie le respondió con una sonrisa tímida – No te miento tenía que venir a resolver algunos asuntos escolares y personales – La sonrisa de Julie se desvaneció y eso acción dio el tema por acabado.

Julie y yo nos retiramos de la cena en cuanto pudimos su mirada era fría yo no dije nada cuando llegamos a su habitación una lágrima se deslizo por su mejilla, el alma se me partió en mil pedazos así que corrí a abrazarla – Lo siento – Dijo mientras sollozaba y soltaba más lagrimas – Nunca debí de haber vuelto debí de desaparecer de tu vida – Me tense al momento en el cual pronuncio las últimas palabras de la frase – ¿Por qué dices eso? – Ella no dijo nada por un momento – Solo te estoy haciendo daño y nada más – La verdad ella nunca me había hecho daño y la verdad pensaba que quien le estaba haciendo daño era yo a ella no ella a mi – Nunca me has hecho daño – Ella solo me abrazo más fuerte nos quedamos así por unos instantes hasta que en el reloj de pared dieron las doce en punto – Tengo que irme – Ella se aparto de mi y se fue a su armario y saco una chaqueta negra y se la puso – ¿Puedo ir contigo? – Ella se volteo a verme aun con los ojos rojos – Lo siento pero no me puedes acompañar estas horas son muy importantes para mis poderes – Se acerco a la ventana y la abrió estaba a punto de salir cuando se volteo a verme – Eres el mejor – Me susurro al oído y me dio un beso en la mejilla que hizo que me quedara congelado en mi lugar entonces ella se fue aun con lágrimas en su bello rostro y salió acompañada por la luz de la luna.