Gotham Kings 2: Life Loves Villains.

Capítulo Once:"Una semana".

Joshua preparaba la cena,como era de costumbre desde hacía una semana, preparaba su exquisita y muy elaborada pizza-claro que para él, cocinar sin quemar la casa (o el país) era todo un logro- hasta que escuchó un grito. Alarmado tomó su arma que se encontraba escondida dentro de una caja de té (gran imaginación) y corrió escaleras arriba.
-¡¿Qué sucede?!¡Nos atacan!- abrió la puerta de un golpe entrando y mirando rápidamente a los costados-  ¡ladrones!¡Asesinos! ¡OH DIOS NO! Son...
-Joshua...- interrumpió Bruce.
-Son...
-Josh...- volvió a interrumpir el chico.
-¡SON ALIENS!- gritó.
-¡JOSHUA!
-¿QUÉ?- lo miró y sonrió tranquilo al ver la escena, suspiró y procedió a prestarle atención a su hermana que se encontraba bajo la cama lloriqueando de forma dramática.
-Bruce quiere que empiece la... Escuela- luego de esa palabra se hizo presente una arcada. Los vomitos y mareos habían sido los protagonistas en la vida de Lily esa semana, su hermano aseguraba que era por el estrés del cambio de vida y la fuerte droga que su padre le inyectó, que en otra semana el efecto acabaría. Pero Wayne no estaba tan seguro de eso.
James Gordon cumplía la promesa de llamar una vez al día, si las cosas marchaban bien, se había puesto en contacto con el mayor de los hermanos para estar informado de las visitas al psiquiatra. Esta vez más vigilada para que esta no se “suicide” o termine con un tenedor en el ojo derecho.
Katherine Genser, una irlandesa que había nacido cuarenta años atrás, solterona y con más de cinco gatos. Había tenido la primer visita de Lily dos días después de la llegada de esta y comprendió, que su personalidad y cordura se amoldaba al ambiente en el que se encontraba.
Si estaba en Arkham: su locura se desataba, al igual que cuando estaba con su grupo de criminales.
Cuando estaba con su padre: el recuerdo de Jerome la atormentaba y eso hacia que su autoestima bajara y se deprimiera.
Si se encontraba en un lugar con mucha gente: el estrés iba de la mano con la locura.
Y aunque no tuvo suficiente tiempo y no la conocía muy bien dedujo que, con su hermano y Bruce, se encontraba tranquila y segura tanto física como emocionalmente. No estaba loca, mientras la circunstancia no lo ameritara.
Desde que llegó a Irlanda las voces se habían calmado,con suerte oía una cada tres o cuatro horas, eso la hacía extrañarlas. Después de todo le daban buenas ideas para los asesinatos y demás por más que le había prometido a su padre comportarse y no matar a nadie.
En su bolso había encontrado un teléfono con carcasa verde, extrañada por el objeto lo prendió, en la pantalla había una nota abierta “solo lo utilizarás conmigo” abrió los contactos y se encontró con el nombre “IVY!♥”. Desde entonces se comunicaban en secreto todas las noches.
Al parecer,y según la opinión de la pelirroja,el rumor de que el agente Jim Gordon se había llevado a su hija a a un lugar desconocido se corrió tan rápido como el viento llevando una hoja, Jerome y su equipo habían levantado un “operativo” de búsqueda espeluznante y rápido. Aunque habían pasado siete días había notado que se debilitaba por la falta de información y que Jerome estaba más enojado que nunca. Debido a esto el aumento de asesinatos se había vuelto inevitable.