Capitulo 5

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-Pensaba dártelo hoy en la mañana, por eso es que vine temprano a tu casa pero debido a tu estado mis planes no salieron como esperaba- dijo Marcus mirando el anillo y luego a mi. Yo me quedé callada aún sorprendida, tal vez esto no sea una proposición formal, de hecho esto no era una proposición, era una obligación- Tienes que usarlo, mañana daré una fiesta en mi casa con motivo de presentarte a mis hermanas y mis padres- dijo Marcus, se veía un poco nervioso ante el asunto.

-¿Ellos saben esto, es decir, qué es falso?- pregunté con temor a que dijera que no.

-No, mis hermanas más pequeñas y mi madre no, la segunda mayor y mi padre lo saben- respondió Marcus

-¿Cuántas hermanas tienes?- dije ante la mención en plural.

-Cuatro, ningún hermano- al decir eso, Marcus mostró un semblante triste, parecía que le hubiese gustado tener un hermano.

-Vaya, bueno, entonces mañana los conoceré, a mi otra familia falsa- dije resoplando, Marcus peinó su cabello.

-Elsa, no es necesario que estés nombrando en todo momento la palabra "falso", compartiremos una vida juntos, me gustaría que te tomaras las cosas más en serio- dijo Marcus mirándome.

-¿Qué crees que me gustaría estar haciendo a mi? Me gustaría vivir como yo quiero, no tener que casarme con alguien a quien no conozco, seguir trabajando en empresas, conocer el amor y algún día, con una proposición con amor casarme, con una persona que AME- dije molesta, Marcus me miró un momento antes de dejar la caja con el anillo en mi buró.

-Mañana vendrán por ti a las 7 PM para llevarte a mi casa a la reunión con mi familia, por favor, trata de no parecer FALSA ante mis hermanas y mi madre- dijo antes de retirarse. Me dejé caer en la cama frustrada.

Él tenía razón, al parecer él tampoco tenía opción de la boda, tal vez yo le parecía fea y no quería casarse conmigo, pero yo no podía quejarme, guapo lo es, y mucho, aún me pone nerviosa su hermosa mirada, su aroma es agradable, todo en él es perfecto, sin embargo, yo no creo serlo para él.

Tomé en mis manos la pequeña caja y la abrí, un hermoso anillo brillaba con las luces de mi habitación, oro y diamante puro, su costo es excesivo, de esto estoy segura, lo puse en mi dedo anular, justo a la medida, la gran joya resaltaba en mi pequeño dedo, hermosa, sonreí.

Una llamada entrante a mi celular hizo despegar la vista de mi dedo, Sara me llamaba.

-Hola- dije al telefono

-Hola, bebé, iré a tu casa en un rato, sólo para despedirme-

-¿Qué? Sara, no puedes hacerme esto, te necesito, tengo cosas que contarte, tus consejos...-

-Bien, iré a tu casa, me voy mañana en la mañana, tienes toda la noche para decirme lo que quieras, cariño-

-Bien, te espero- y colgué.

-¡Llegué!- escuché un grito en la planta baja de mi casa, Sara muy sutil como siempre. Minutos después Sara llegó a mi habitación.

-Hey, baby, ¿dónde está papá amargado?- pregunto Sara sonriendo mientras se tiraba en mi cama.

-Me voy a casar- solté, cerré mis ojos un momento y los abrí, Sara tenía los ojos abiertos demasiado y su boca igual, se incorporó rápidmente-

-¡¿QUÉ? ¿CUÁNDO?¿POR QUÉ? ¿CON QUIÉN?- gritó Sara mientras sacudía mis brazos violentamente

-JODER, SARA, CÁLMATE Y DÉJAME EXPLICARTE-dije gritando para que se calmara, ella se sentó nuevamente y calló. Comencé a hablar.

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El Contrato [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora