Era un día común y corriente en mi clase.
O sea, uno muy aburrido y monótono; lo normal.
Lo único bueno de los días de escuela, eran los recreos, ya que los gastaba en hablar con mi trío y Alexander.
Hombre, me había equivocado olímpicamente sobre él.Tal vez porque estaba ebrio.
Pero eso no viene al caso.
Siempre esperaba a que llegara la hora de bajar al patio para hablar con ellos, eran un grupo genial de amigos. Realmente me sentía afortunado por tenerlos a mi lado, Aunque no lo admitiera.Ese mismo día, un trío de chicas que todos consideraban las más guapas de la escuela, entraron a presentarse a mi salón.
No les presté nada de atención, sólo pude escuchar que eran hermanas y que su apellido es Schuyler.
Yo sólo esperaba ruidosamente el timbre, por lo que recibí una llamada de atención por parte de la profesora. Realmente, me dio igual.Una de las hermanas, su nombre era Eliza, o algo así, eligió sentarse a mi lado. Debo decir que es muy gentil y agradable, aunque en ese momento no estaba de muy buen humor, por alguna que otra discusión con mi padre, charlar con ella valió un poco la pena.
-Hola! Te noto algo atareado, por lo que decidí sentarme contigo, ya sabes, me pareciste interesante. ¿Cómo te llamas, por cierto?- Exclamó, sacándome de mis pensamientos rápidamente.
-John Laurens. ¿Y tú? Contesté desganado mientras miraba a otro lado.
-Elizabeth Schuyler, ¡Un placer conocerte!
Me dedicó una sonrisa inocente, a la cual no respondí.
Finalmente, tocó el timbre, y luego de esperar a Mulligan y Laffayette, quienes por cierto, se habían hecho muy cercanos. Me alegra que se lleven bien, es como si me alegrara la felicidad de otras personas.
Me sonreí a mi mismo.
Cuando bajé al recreo junto con Mulligan y Laffayette, me percaté de que las hermanas Schuyler, Peggy, Angelica y Eliza estaban caminando detrás nuestro.
Eliza eligió acompañarme, para mi sorpresa.Tal vez sólo querían conocer más la escuela o alguna cosa así, pensé mientras buscaba a Alex con la mirada.
Efectivamente, me encontró antes que yo a él.
Pude escuchar como Alex le hablaba a Eliza, y también fue muy evidente la cara de embobada que tenía, era muy obvio que le gustaba.
Luego de haber dejado atrás a la Schuyler, Ham, me tomó del brazo y me llevó a una esquina, temí lo peor de inmediato.-John...
-¿Qué pasa Alex? Había sólo dos probabilidades, que sea una buena noticia y le de vergüenza contármela, o que fuera una noticia horrible. Sólo en esos dos casos me llamaba por mi nombre de pila.
-Oye, tengo una pregunta que hacerte.
-Mande. Dije un poco más relajado. Me había empezado a mensajear muy seguido con Alex, por lo tanto ya lo conocía muy bien, a pesar de conocerlo hace sólo un mes.
-¿Te gustaría ir al bar este sábado? Podríamos ir junto con los otros dos! Tengo algo importante que contarles, y quiero que sea un poco más formal. Luego de haber dicho esto, soltó una risita inocente y se tapó la boca.
A pesar de ser más alto que yo, tiene un año menos. Y puede llegar a ser muy tierno. Eso me me molestaba un poco.
-Me habías asustado! Pensé que ibas a darme una mala noticia o algo así. Dije mientras le daba un leve empujón en el hombro con mi puño.
-¿Cómo cuál?
-No sé. Dije mientras sonaba el timbre.
-Tengo que irme. Usé el timbre como excusa, y me fui rápidamente.
¿Qué me estaba pasando?
Esa fue la única pregunta que me hice durante todo el día.
De lo que no me había percatado, era que Laffayette y Mulligan habían prescenciado la escena.
-A Laurens le gusta Hamilton~ Canturreaban al unísono antes de que entre el profesor siguiente.
-Eso no es verdad. Exclamé completamente seguro.
-Sólo somos amigos.
-John, apresúrate o te lo va a ganar Eliza...
Me susurró Laffayette con su acento tan particular.Sin darme cuenta, levanté la vista.
No, no me gusta Alexander, yo soy heterosexual. Esto es amistad, y eso está bien, la homosexualidad no.
Me dije a mí mismo, en mi mente antes de dormir.Mientras tanto, en el lado "rico" de la ciudad, Phillip Schuyler está durmiendo, mientras sus tres hijas, Peggy Angelica y Eliza están charlando animadamente sobre su primer día en el colegio Princeton.
-A mí me parece muy lindo e interesante un chico de un curso menor... Dije tímidamente.
-Uuuuhhhhh! ¿Cuál es su nombre? Preguntó Peggy levantando una ceja.
-Alexander Hamilton, es amigo del chico con el que me siento, sus palabras son tan elocuentes! Creo que me gusta~
-Pues a mí ese mismo me ha llamado la atención, pero no exactamente por razones amorosas. Dijo Angelica riendo astutamente.
-Explícate.
-¿No viste como miraba a Alexander? No pudo ser más evidente, le gusta.
-Y podría decir lo mismo acerca de Alexander fácilmente.
Mi cara pasó de ser la de una típica adolescente enamorada, a la de una a la que le acaban de romper el corazón.
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AHHHHHHHHHH maldito pedazo de mierda.
SIN PALABRAS SOBRE ESTE CAPÍTULO ESCRITO CON BLOQUEO CREATIVO.
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¿Es normal? [Lams Modern AU]
FanfictionJohn Laurens, un joven de secundaria algo problemático y despreocupado, y Alexander Hamilton, aquel "Niño Prodigio", comenzaron a mirarse más constantemente desde su desagradable e incómodo encuentro. Tanto, Al punto al que comenzaron a preguntarse...