X. La voluntad de la amistad

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Los Caballeros de Bronce llegaron hasta el Monte de la Muerte, pero se separaron, aunque Yume se quedó con Seiya, puesto que no tenía puesta su armadura, y corría peligro al no estar protegido.

Yume: —Me quedaré contigo Seiya, de ahora en adelante, yo seré la armadura que te protejerá. 😁
Seiya: —Gracias Yume. 😀

Los dos se apresuraron lo más que podían, pero se detuvieron cuando una figura humanoide se acercó hacia ellos, pero esta desapareció, y en su lugar, solo quedó la caja de la Armadura de Pegaso, y Seiya se la puso.

Yume: —¡Increíble!, ¡Sabías que podías contar con Shiryu!.
Seiya: —Así es, pero me preguntó si algo le habrá pasado, ¿Por qué no estará aquí?.
Yume: —No tengo idea, pero estoy segura que estará bien, ¿Qué es eso?. 👆

Una Caja de Pandora estaba flotando, y Seiya lanzó un Meteoro de Pegaso, haciendo que esta cayera, junto con un pequeño niño de cabello naranja, los dos se dirigieron hacia el.

Yume: —¿Te encuentras bien?, Lo sentimos mucho.
Kiki: —¿Acaso no tienen imaginación?, Viene a traer la Armadura de Pegaso, ¿Y me reciben de esta forma?.
Yume: —Mil disculpas, pero mi sensor no pudo detectarte a tiempo.
Seiya: —Muchas gracias, pero, ¿Quién eres?.

Se levanta y se sacude.

Kiki: —Me llamo Kiki, mi maestro, Mu, me envió hasta aquí, ya que su compañero, Shiryu, no está en condiciones para poder viajar.
Seiya: —¿Qué dices?, ¡¿Cómo que no está en condiciones para viajar?!, ¡Explícanos qué le ha sucedido!. Lo sacude
Kiki: —¡Suéltame!, Me haces daño, ¡Salvaje!.
Yume: —¡Tranquilízate por favor Seiya!. Suspira —Bien, explícanos, ¿Qué sucedió con el?.
Kiki: —Bueno, cuando llegó a Jamir, el maestro Mu le dijo que solo podía restaurar las armaduras si el sacrificaba su vida.
Yume: —¿Cómo?, ¿Shiryu está muerto?, ¡Oh no!. 🙊
Kiki: —Les contaré exactamente lo que pasó.

Shiryu estaba frente a las armaduras de Pegaso y Dragón, mientras que Mu le explicaba en qué consistía el sacrificio para "reparar" las armaduras.

Mu: —Si deseas reanimar las armaduras, tendrás que derramar la mitad de tu sangre sobre ellas, aunque correrás el riesgo de perder la vida si lo haces, pero tu decides.

El pelinegro recordó cuando estuvo a punto de morir en su batalla con Seiya, pero este lo salvó tras golpear su corazón, y así fue, a lo que estuvo dispuesto a devolverle el favor a su compañero

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El pelinegro recordó cuando estuvo a punto de morir en su batalla con Seiya, pero este lo salvó tras golpear su corazón, y así fue, a lo que estuvo dispuesto a devolverle el favor a su compañero. Se cortó las muñecas, y derramó la mitad de su sangre en la Armadura de Pegaso, su piel cambió de tonalidad, y se desmayó, impactando a Kiki y a Rei, quien se encontró con aquella terrible escena, por lo que decidió ayudarle.

Mu: —Eres un caballero con un gran corazón, mira que sacrificarte por los tuyos, es una acción muy gentil de tu parte. Cargandolo
Rei: —Mu, déjame ayudarlo, yo cerraré sus heridas, y haré que su sangre vuelva a fluir.
Mu: —Kiki, trae las herramientas celestes, debemos reparar las armaduras, Rei se encargará de el.
Kiki: —Cla-Claro, en-se-guida voy. Asiente y se va

☆ Saint Seiya ◆ El Sueño de un Arcángel ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora