La última noche. //JOERICK//Terminada

Me voy enamorando.

Llegue a la dirección que Joel me había escrito en la libreta, era una casa bastante linda.
Me acerque y toque el timbre.

-Brian, Brian, Brian- mencionó Joel mientras se asomaba tras la gran puerta de madera sonriendo a dientes.

-Hola Joel- solté de inmediato, regresandole la sonrisa.

-Adelante- se hizo a un lado dándome paso.

Estuvimos platicando por un corto tiempo en la amplia sala para después dirigirnos a su habitación.

Ambos nos sentamos en la cama sacando los apuntes que ya teníamos para darle continuidad a el proyecto.

Después de estar trabajando durante un buen rato comenzamos a jugar, ambos tirábamos de la misma almohada para golpear al otro.

Entre forcejeos y un mal giro que dimos tropezamos y caímos sobre el piso, yo encima de el.

Lo siguiente fue extraño, nos miramos por un momento como si nada mas importara, solo enfocándonos en la mirada del otro.

Sus manos soltaron la almohada subiendo hasta mi cabeza para luego acariciar de una manera tierna he inocente mi cabello. Sin perder tiempo lleve mis manos hasta su rostro tomando entre mis dedos sus rosadas y delicadas mejillas, el sonrió y empezó a impulsar mi cabeza para acercarla mas a el.

Estando a escasos centímetros y a punto de besarnos escuchamos toquidos en la puerta con una voz dulce tras de ella.

-¿puedo pasar?

Nos levantamos de inmediato, Joel se dirigió a la puerta para abrir mientras yo me sentaba y fingía leer.

-¿Que pasa Diana?- dijo al abrir y volviendo al interior de la habitación.

-Dice mamá que ambos bajen, la comida ya esta lista.

-Ya vamos.

Ella sonrió y se dio la vuelta para marcharse.

-Vamos Erick- dijo Joel acercandose a la salida.

-No se si me pueda quedar Joel.

Retrocedió y de una manera bonita pidió que me quedara, intente negar pero solo lo escuche insistir hasta que accedí.

Bajamos y tomamos asiento, la familia ya estaba lista para iniciar a comer.

-El es Erick, mi amigo.- dijo Joel señalandome y mirando a su familia.

-Hola Erick- dijeron al unísono.

Salude y proseguimos a comer.

Después de la comida y charlar un poco fuimos a su habitación nuevamente, tenia que traer mi mochila para irme, el se ofreció a llevarme a casa ya que se había soltado una lluvia tremenda, accedí y nos montamos en el auto.

Durante todo el camino mi vista daba a la ventanilla mirando el paisaje pasar de una manera rápida, el lugar era bastante tenso y silencioso, quería decir algo pero no sabia exactamente que.

Sentí de repente como el auto se orillaba parando por completo a lado de la carretera, conducí mi mirada hasta Joel que ya estaba a centímetros de mi.

-¿Porque paramos?- cuestione confundido mientras retrocedía un poco.

Bajo su mirada hasta mi mano y con la suya entrelazó nuestros dedos haciendo un encaje perfecto.

Volvió su mirada a la mía, después de unos segundos cerro sus ojos acercándose y besando dulcemente mi boca.

Realizaba movimientos delicados y repentinos, haciendo de este beso un momento impresionante y sincero.

Nos separamos y ambos sonreímos mirandonos, besó mi frente y continuo con el trayecto.