La chica nos guió hacia una mesa alejada de las demás, cerca de un campo de flores. La palabra increíble se quedaba corta para describir el lugar. Nos sentamos el uno frente al otro y ella nos dio dos menús.
_"Toquen esta campana cuando sepan lo que van a pedir y vendré enseguida."_
_"De acuerdo, muchas gracias."_ Respondió Chiaki amablemente.
La camarera se fue y yo quise aprovechar el momento para hablar.
_"Esto... ¿Podríamos hablar ahora?"_
_"Primero pidamos la comida ¿Te parece bien?"_
_"Sí, claro..."_ Asentí.
Me quedé mirando el menú que ofrecía el restaurante. Todos los platos tenían unos títulos muy atrayentes y al lado de cada uno de ellos había una imagen. Ciertamente todos se veían tan deliciosos que no sabía cual escoger.
_"¿Sabes lo que vas a pedir? Sé que es difícil elegir, jaja"_
_"No lo sé, la verdad es que todo parece riquísimo ¿Cuál debería escoger?"_
_"Yo sin lugar a dudas te recomiendo o el plato número 5 o el 11"_
_"Es que... el 9 también tiene buena pinta."_
_"Sí, pero si te gustan ese tipo de platos creo que es más sabroso el 4"_
Estuvimos hablando de todos los platos que había. Y permanecimos un buen rato dando nuestras opiniones sobre los sabores y sobre la comida que nos gustaba.
_"Hiyori, por lo que veo te gusta la comida agridulce"_ No me gustaba... ¡me encantaba!
_"Sí, y yo veo que eliges mucho los platos que llevan salsas"_ Toda la comida que había mencionado tenía alguna especie de salsa.
_"Sin duda, es que hace la comida mucho más sabrosa."_ Me gustó la manera en la que lo dijo jaja.
_"Me gusta saber estás cosas de ti"_ le dije con una sonrisa.
Me gustaba saber que era honesto conmigo y de alguna manera me recordaba mucho a Yato en la forma en la que explicaba lo que le gustaba con una voz tan alegre.
_"Y a mí me encanta verte sonreír"_ Me ruboricé ante ese comentario.
_"Jaja..."_ reí nerviosa.
_"Sabes ahora comprendo porque Yato te aprecia tanto. Eres más increíble de lo que pensaba"_
_"Hablando de Yato... ¿Por qué antes no ha sido capaz de vernos?"_
_"Mejor deberías decir que no ha sido capaz de verte. El hechizo que te he lanzado evita que los Dioses y sus Shinkis te vean a excepción de mí, que he sido la persona que te ha lanzado el hechizo."_
_"¿Eso significa que tú también eres un Dios?"_ Por lo que había dicho supuse eso.
_"Correcto, Hiyorina. Bueno es hora de que llamemos a la camarera ¿No te parece?"_
_"Sí..."_ Eso me dejó intrigada y quería saber más.
Entonces, cogió la campana que se encontraba en el centro de la mesa y la tocó. En unos segundos se volvió a presentar la camarera.
_"¿Ya saben que van a ordenar?"_
_"La señorita tomará el plato 5 y yo el 11"_
Finalmente nos pusimos los dos de acuerdo. Eso platos eran los que más nos llamaron la atención y decidimos cogernos uno cada uno.
_"Enseguida les traeré la comida"_ dijo eso con una sonrisa pícara.
Eso me hizo sentirme nerviosa. Por alguna razón, no me gustaba nada esa camarera.
_"¿Estás nerviosa, Hiyori-chan?"_ me miró de arriba a abajo.
_"¿Tanto se nota?"_
_"Digamos que no se te da muy bien disimular, jaja"_
De alguna manera hablar con él me tranquilizaba; era tan parecido a como Yato me trataba que me hacía sentir cómoda.
_"Estás pensando en Yato, Hiyori?"_
_"¿Cómo lo sabes?"_ dije sorprendida. ¿Tan fácil es deducir lo que estoy pensando?
_"Por tu mirada"_
_"¿Mi mirada?"_ No sabía que quería decir.
_"Se te ha endulzado la mirada y me suponía que sería por alguien a quien quieres."_
_"Bueno la verdad es que estaba pensando en que la manera en la que me trata Yato es muy parecida a la tuya."_
_"Bueno, eso es normal puesto que Yato y yo somos parientes."_ Eso me dejó totalmente desconcertada.
_"¿Eh...? ¿Parientes?"_
_"Sí jaja, deberías ver tu cara"_
Estaba en shock, Yato y él eran familia. Pero él nunca me contó nada de eso. Y antes de que pudiera preguntarle que tipo de familiar era, volvió a interferir la camarera.
_"Aquí están sus ordenes, si necesitan algo más toquen la campana"_ dijo con una sonrisa.
Esa sonrisa no me gustaba nada la verdad. Lograba ponerme de los nervios y por su culpa perdí el hilo de la conversación.
_"Esto... y ¿que eres de Yato?"_ me atreví a preguntar.
_"Bueno... soy el hijo del hijo del padre de mi padre el cual tiene un hermano; y el hijo de su hermano es Yato"_ me contestó con una mirada burlesca.
_"¿Me estás tomando el pelo?"_ dije desconcertada.
_"No Hiyori, sólo tienes que pensar un poquito"_ y me puse a pensar.
Y después de darles algunas vueltas a lo que dijo caí en la cuenta de quien era.
_"¡¿Eres su primo?!"_
_"¡Ding Ding Ding Ding premio de oro para la señorita Hiyori!"_
Vale no podía más... no podía evitar reirme como si no hubiera un mañana. Este chico tiene su toque romántico y su toque gracioso igual que Yato.
De repente, se me cortó la risa al pensar en él. Es algo que no puedo ignorar ya que llevo un tiempo enamorada de este dios tan especial para mí.
_"Hiyori tú..." antes de que pudiese terminar la frase escuché una voz muy conocida llamándome.
_"¡¡Hiyori!!"_
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Protégela (Yatori)
RomanceHan pasado 6 años desde que Hiyori Iki conoció al Dios Yato. Ahora con 22 años ha decidido volverse independiente de sus ricos padres pero aún así estos le consiguen una cita matrimonial. Ella tiene sentimientos por Yato y por ello quiere conseguir...