Pequeño Fudanshi...

Capitulo 4

Salí corriendo de ahí quería perderme...

No se corre en el pasillo chistó la de artes, la miré con los ojos llenos de lagrimas y de golpe dice más te vale una buena erección... en la esquina estaba Dylan y Ritsu, se abrazaban pero no había nada, lo único que recordaba de Mino era esa discusión, la miré a ella, la verdad es que no me había percatado de su gran y genial figura, la seguí y volvimos a aquella sala tipo armario, la vez anterior solo habían desorden, ahora había una silla, me hizo sentar y comenzó a desabrochar mi pantalón, acaricio mi en ese momento estable erección y luego lamió hasta el fondo mi erecto pene, sus ojos brillos y llenos le lujuria se posaron en mi, la obligue a apartarse y a subirse en mis piernas, la acomode y por primera vez quedé de frente comencé a desabrochar su blusa mientras ella brincaba como loca, puse mis manos en sus senos y fue ahí en que todo se arruinó...

Este pecho no... no era su pecho.

Esta entrada no... no era su entrada.

como nunca en mis años desde que comencé a follar me había bajado tan rápido, lo bueno es que la loca no lo notó si no que siguió resfregandose mientras se corría, en eso que jadeaba aun intentó besarme...

Estos labios no... no eran los suyos.

Me aparté y comencé a acomodar mi ropa y salí dejándola a medio vestir y a medio recuperarse...

Al volver no tenia excusa para el retraso, pero igual intentaría ingresar al salón, pero no pude, un tirón en mi brazo y fui arrastrado, los jueves no se ocupa el gimnasio, me llevó hasta los vestidores y me lanzó a la ducha, dejó caer el agua helada y aun con mi ropa me obligó a lavarme, lo miraba con odio, que se creía Mino para hacerme esto, sus ojos estaban perdidos, yo me perdí en ellos, se metió a la ducha conmigo y me abrazó, me aparté y noté que lloraba, me volvió a abrazar y dijo... no me dejes... si quieres seguir con ella hazlo pero no me dejes... intenté salir de la ducha pero el negó, fue ahí que en un error de movimiento quedaron en contacto mis labios y su cuello, sentí una corriente atravesar mi cuerpo y no pude evitarlo, lo mordí para luego succionar y dejar una gran marca en su cuello, una marca que decía... ESTO ES MIO... Que acababa de hacer, que significa que sea mio, quiero que sea mio, el es mio?, me aparté y le pedí que me explicara todo...

flash black

Que ocurre... necesitas ayuda para relajar eso... ven conmigo... 

No podía creer lo que ocurría la asesora me estaba coqueteando al notar la erección que tuve al ver sin querer a las chicas desnudas en los vestidores... entramos a su despacho y comenzó a tocar mi entre piernas entre mas me tocaba más me excitaba y ella comenzó a gemir, fue llegar al éxtasis....

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Después de casi un año supe que no era el único, así también se supo en el instituto, después fue despedida...

Cuando ingrese a la Universidad la volví a ver... seguía sintiendo algo por ella, fueron 3 años de relación, todo iba bien, pero un día en mi nuevo trabajo nos despacharon por mejoras en infraestructura, al llegar al departamento escuché como gemía, lo peor es que no era uno si no 5 chicos de máximo 17 años, no hice ruido y salí de ahí, pasaron 3 semanas y un día llegó a la casa molesta, hice como si no supiera nada y me dijo que se sentía vacía, me reí y dije acaso te dejaron, sus ojos estaban abiertos como platos, comenzó a gritar y ahí le dije que por mucho que luchara aquellos chicos ya me habían elegido a mi... fue ahí que nos separamos... 

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Llegué a este instituto sin saber que ella estaba acá, si lo hubiese sabido jamás hubiese aceptado el puesto... cuando te conocí me sentí extraño, repetí casi el patrón de ella, pero al estar contigo todo fue diferente fue la 1° vez que me penetraban (aunque si había usado juguetes cuando me propuse quitarle los noviecitos), me sentí pro primera vez en años feliz, era libre, estaba sintiendo un placer jamás vivido, cuando entré en ti supe que no te podía dejar ir... la segunda vez estaba ansioso por tenerte y por ser tuyo una vez más, pero mi mundo cayó cuando dijiste que Miki era una de sus mujeres, no podía ser que una vez más ella estuviese en mi vida, esa mañana después de no dejarte salir de clases vino a verme y la verdad es que no quise que ella supiera de lo nuestro pero de solo imaginar que estabas con ella hablé de más y fue lo que escuchaste... prefiero compartirte a perderte...

No entiendo que ocurre, pero necesito tiempo para procesar, creo que no es bueno que estemos juntos por un tiempo... salí de ahí, noté que habían 2 uniformes, escuché decir... vístete, yo me encargo de tu ropa mojada, iba saliendo cuando veo a 2 chicos de 2° besándose apasionadamente en la grada, me reí y de pronto comenzó una erección pero de aquellas, había llegado el momento de comprobar... de golpe frente a mi estaba Miki, me miró asustada, sonreí y apunté con mi vista hasta mi entre piernas... ella bajo su mirada y sonrió, fue ahí que me guió hacia su oficina, la empujé contra el escritorio y comencé, ella gemía y sus jadeos no cesaban, llego un punto en que eran molestos me desagradaban, quería dejar de escucharla así que salí de ella y la obligue a tomar leche para descargarme, parea estar más feliz, ahora hasta mirarla me era desagradable, en ese momento desee estar bajo la ducha, me sentía sucio, me sentía mal, la miré y dije lo lamento pero no puedo seguir, ella me miró y preguntó si era por él y que ella lo denunciaría, sonreí y dije, el no ah hecho nada, si anoche estuve en su casa porque perdí mis lleves pero nada mas (debía hacer algo o esta loca pondría en riesgos a Mino), ahora creo que estas equivocada en un punto, si intentas denunciarlo a él, no crees tu que seremos muchos lo que diremos que tu nos seducías, que diría el abogado si se entera que mi tutora... Cállate Misaki, está bien, no haré ni diré nada, pero ten clara una cosa, si yo muevo los dedos el vuelve a mi... sonreí y dije empieza a hacerlos sonar que quiero música para bailar...

Salí de ahí con un dolor agudo, mi erección no bajaba y lo que era peor cada segundo que pasaba mas recordaba a Mino y ya no podía detenerme, entré en casa y desde el balcón con mi lanza pelotas golpee la ventana de su habitación, se asomó y le dice la señal de 10...9...8...7 desapareció de mi vista, la puerta sonó, pasos sonaban en la escalera... 1...0 y sus brazos ya me tenían por la cintura, un leve roce y notó mi erección, mi miró y dije puedes ayudarme a quitar de mi cuerpo todo rastro de mi pasado... no quiero sentirme así, nos duchamos y la verdad es que al verlo frente a mi con su erección solo fui capaz de decir limpia rápido, boté el jabón y el dijo quieres que lo recoja o lo recoges tu... miré sus hermosos ojos y dije, quiero follarte hasta no tener fuerzas, para luego sentir que me lleves de energía... salimos de la ducha nos dejamos caer en la cama, era la tercera vez que entraba en el, esta vez al acabar dijo si no me dejas ahora no tendré fuerzas para poder ayudarte a descargar tu cuerpo, me subí y estaba auto follándome, la verdad es que Mino estaba agotado, sonreí y dije se siente delicioso, el comenzó a apretar y a negarme el placer de correrme, fue ahí cuando sentí como el me llenaba y comenzaba a correr su dulce miel por mi entrada que dice no puede terminar sin mi ración de tu deliciosa leche...

Quedé tendido a su lado en silencio, él se acercó y me abrazó con sus brazos y tambien con sus piernas diciendo se lo que dije... pero te quiero solo para mi...