31 FINAL

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17 años:

-Está bien, iremos.-Dijo Frank dándome la vuelta. Puso mis brazos detrás mía y con una mano los sujeto fuerte, mientras que con la otra mano me apuntaba con la pistola.

Cuando llegamos al garaje Frank vio los cuerpos sin vida y se relajó, dejándome libre de nuevo.

-Los siento mucho.-Dijo dejando caer la pistola al suelo para acto seguido abrazarme como si su vida dependiera de ello.-Siento haber dudado de ti.-Sollozó en mi hombro.

-Tranquilo Frank.-Dijo separándome del abrazo y cogiendo su mentón para que me mirara a los ojos.-Tranquilo.-Repetí

-Casi te mato.-Susurró apenas sin voz.

-Moriría por ti.-Susurré uniendo nuestros labios en un beso lento y lleno de amor.

Unas sirenas de policía empezaron a sonar a lo lejos, Frank y yo nos miramos asustados.

-Mierda, me han seguido.-Dijo Frank. En sus ojos se podía ver la culpa.

-Tranquilo, saldremos de ésta.-Intenté tranquilizarle.

-Coge tú la pistola.-Me dijo Frank recogiendo la antes nombrada del suelo y ofreciéndomela.

-Tu la sabes usar mejor que yo.-Dije rechazándola.

-He dicho que la cojas.-Dijo poniendo en mi mano la pistola.

-¿Qué vas a hacer?-Dije temerosa. Algo estaba tramando, y por mi intuición, no era algo bueno.

-¡Están rodeados!-Gritó uno de los policías.-¡Salgan de la casa con las manos en alto!

-____, quiero que sepas que te amo, y que siempre lo haré.-Dijo uniendo de nuevo nuestros labios.

-Eso ha sonado a despedida.-Dije temerosa.-No hagas ninguna estupidez Frank, te lo ruego.

-Como tu antes has dicho, moriría por ti.-Dijo sacando de su bolsillo un cuchillo.

-¡Frank no!-Grité desesperada, pero era demasiado tarde, él ya había desaparecido de mi campo de visión. Caí de rodillas al suelo y comencé a llorar desconsoladamente.

Segundos más tarde, pude escuchar tres disparos y la voz de uno de los agentes de policía.

-¡Objetivo abatido!-Esas dos simples palabras derribaron lo que quedaba de mi mundo. Sentí una parte de mi romperse en mil partes.

-¿Por qué lo has hecho Frank?-Pregunté sollozando mientras aún sostenía la pistola en mi mano.-Sabes que tú eras lo único que me mantenía con vida.-Miré la pistola.

-¡Salón despejado!-Oí que decía un hombre.

-Voy contigo Frank.-Susurré apuntándome con la pistola en la sien.-Espérame.-Susurré disparando.

Todo se volvió negro, y por fin, sentí que estaba en el lugar que me correspondía.

Asesina (sTaXx y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora