VI

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"Es un espía enviado por tu prima, Karin, quiere asegurar la corona de Inglaterra pero para ello debe matarte primero" - Dijo Kushina, El hombre que Sasuke había atrapado estaba sentenciado a muerte, el verdugo estaba en medio de la sala. - "Yo Fugaku Uchiha, Rey se Francia te sentenció a ser decapitado por atentar contra la vida de la Reina escocesa" -El hombre fue colocado y el hacha callo.

"¿Esta listo mi caballo?" - Sakura Lucía un vestido ligero pero con los faldones anchos para poder montar - "Esta listo majestad" - El empleado sacó la yegua Blanca ya preparada y le ayudaron a subir. - "¿Dónde esta el Príncipe?" - el empleado iba a responder cuando Sasuke llegó al lugar montando su semental de color negro. -"El no vendrá y me a pedido que te lleve" - El comenzó a andar y ella lo alcanzó dudosa. Andaron hasta llegar a una pradera.

"Sasuke" - lo llamo, no se encontraba lejos así que no tuvo que gritar - "¿Me odias?" - El se detuvo, bajo del caballo y la ayudó a bajar - "No podría odiarte" - le dijo, aun con sus manos en la cintura de ella.

"Me confundes" - entonces se alejó de ella como si el contacto lo quemara. -"Debo guardar mi distancia con la futura esposa de mi hermano, serás mi reina" - el centro su atención en las colinas lejanas - "Aun así podríamos ser amigos, lo éramos antes e incluso jugábamos aquí en este mismo Prado, ¿La corona cambia todo?" - Ella trató de tocarlo pero el se alejó más - "Siempre lo ha cambiado Sakura" - Sonaba derrotado. -"Si te dejo entrar haré estupideces, sólo lograré matarte" - Ella no entendía. Pero contra todo pronóstico el acuno su rostro en sus manos y pegó sus frentes, ambos sentían la respiración del otro.

"Tu... - las lágrimas comenzaban a juntarse, ¿existía acaso la probabilidad de que el sufriera tanto como ella?. - "Yo soy un bastardo pero si tan sólo pudiera..." - Sakura cerró los ojos y entreabrió los labios era la invitación que él esperaba, con fervor la tomo y unió sus bocas devorando con impaciencia, ella llevo sus manos a su nuca y el bajo uno a su espalda para unirse más, emociones, miles de ellas invadían a ambos cuerpos, el mundo podía derrumbarse a ellos no les importaba.

"No bebo amarte Sakura, pero lo he hecho toda mi vida, desde el día en que la princesa escocesa entró por las puertas del Palacio, incluso cuando sabía que no serías mía y eso va a matarte" - Ella lo miro aun con la respiración agitada - "Yo no debo amarte, pero lo hago" - Sasuke cerró ojos grabando sus palabras, sólo eso le permitiría seguir vivo después de lo que haría -"Me iré a una campaña y no se si volveré, no debes amarme más y yo te juro que si regresó ya no lo hare" - Sasuke la tomo de la cintura sin darle el menor tiempo de reaccionar a sus palabras, el se iría y podría morir, incluso podría volver con una mujer aun amandola a ella, para cuando logró parpadear ambos estaban sobre sus caballos andando rumbo al Castillo.

¿Cómo se pierde algo que no puedes tener? pero aún, ¿Cómo pierdes algo que tuviste pero nunca debió ser para ti?. El amor de Sasuke era suyo y el de ella era para él pero aún así no debían tenerse.

"Me alegra que te hayas podido desahogar" - Hinata estaba en los aposentos del principe Naruto, lo encontró perdido en sus pensamientos y el accedió contarle sus inquietudes.- "Mi madre no es mala, pero es muy estricta y no quiero que Sasuke tenga problemas, es mi mejor amigo y mi hermano" - La ojiperla tomo su mano y el lo permitió -"Estoy segura que después de la boda todo estará arreglado" -Ambas miradas se encontraron de nuevo, ella estaba tan cerca y era tan tentadora para el, no supo si fueron sus atenciones o el momento, no sabía si era amor o sólo pasión pero el la beso.

Ese beso comenzó lento y sin prisa para tornarse posesivo y violento, ella llevo sus manos a los hombros de Naruto despojandolo de su camisa, el subió el vestido desgarrador sus bragas, sus respiraciones eran agitadas y el deseo se respiraba en el aire, Hinata se montó y el entró rápido, duro, violento, ambos gimieron, la sangre corrió por las piernas de Hinata y el dolor en su parte baja se hizo presente, aun así no se detuvo, el recuerdo se Sakura no se presento en ninguno, Naruto embistió una y otra vez cada vez más rápido, más fuerte, culminó en Hinata y ella se arqueo en su propio paraíso.

Cuando todo termino recordaron sus nombres, Naruto la bajo con expresión rígida, ella acumuló lágrimas y un nudo se trabó en la garganta, una palabra: TRAICIÓN.

La ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora