Miro nerviosa el reloj de mi celular, y marco su número una vez más. Shawn dijo que estaría aquí a las diez en punto, pero ya son casi las once y él sigue sin aparecer.
El auditorio de la universidad está lleno, mis padres se encuentran sentados en primera fila, a su lado mi mejor amiga, luego dos asientos vacíos -correspondientes a mi novio y yo- y a su lado los familiares de Shawn.
Mis dedos escuecen y tiemblan, mis uñas ruegan por ser mordidas, pero me contengo. Arrugo mi vestido azul una y otra vez entre mis dedos, y muevo mi pie nervioso en el suelo de madera, causando un irritante tintineo. Realmente quiero morder mis uñas, pero lamentablemente mamá no pasó tres horas intentando arreglarlas para que yo las destruyera en un par de segundos.
Quince minutos pasan y Shawn sigue sin aparecer, debo parecer una psicópata ante los ojos de todos mirando como poseída mi celular y la puerta del auditorio, pero no puedo evitarlo. Esto es realmente importante para mí.
Las luces se apagan, dejando todo en un ambiente mucho más íntimo, y la directora aparece y me saluda, para luego pedirme amablemente que tome asiento. Suspiro y tras mirar una última vez hacia la puerta le hago una seña con mi cabeza y me siento a un lado de Abby.
En la enorme sala se forma un silencio absoluto y la pantalla de cine que colocamos con tanto esfuerzo mis compañeros de teatro y yo, comienza a reproducir imágenes que nosotros no colocamos. Primero se ven un poco borrosas, hasta que poco a poco se van volviendo más nítidas y es cuando lo noto, no son cualquier tipo de imágenes, sino fotografías de Shawn... y mías. Miro hacia todos lados en busca de una explicación, en busca de él, pero todos parecen ser absorbidos por la asombrosa voz que comienza a sonar, al principio en un volumen bajo, luego elevándose más y más, hasta volverse clara y concisa.
Una luz se enciende en medio del escenario, debajo de la enorme pantalla, y comienza anotarse la silueta de una persona. Shawn se encuentra sentado en el taburete de un piano de cola negro, vestido con un esmoquin y entonando una letra que me deja sin aliento, como todo él.
Maybe I'm just a kid in love
Maybe I'm just a kid in love
Oh, baby
If this is what it's like falling in love
Then I don't ever wanna grow up
Maybe I'm just a kid in love
Maybe I'm just a kid in love
Oh, baby
It'd be cool if it's the two of us
But I don't ever wanna grow upEn la pantalla se siguen reproduciendo fotografías nuestras y algunos vídeos de nosotros dos haciendo el tonto junto con nuestros amigos, corriendo, riéndo, abrazados, besándonos. Mis mejillas se tiñen de rojo escarlata y mis ojos se llenan de lágrimas con cada imagen que aparece. Es como un recordatorio de nuestros mejores momentos, momentos de oro.
Shawn termina la canción y todos aplauden, él simplemente sonríe y se para, para acercarse a un micrófono que no tengo idea de cuándo apareció.
—Hola a todos— Su voz resuena por el auditorio, erizando mi piel— Supongo que muchos de ustedes se preguntarán ¿Qué es esto? y esto, amigos, no es nada más ni nada menos que una declaración de amor para la chica más hermosa del mundo, mi mundo— Carraspea y sonríe, mi corazón se acelera con el simple hecho de verlo allí, de pie, hablando sobre nosotros. Abby aprieta mi mano entre las suyas con entusiasmo— Violet Prescott, cariño, eres la novia que jamás creí tener, me enamoré a primera vista de tu preciosa sonrisa y tus ojos llenos de brillo, tu personalidad me cautivó, y tu amor me llenó de esperanza. Llegaste a mí en el que solía creer era mi mejor momento- Ríe- fui iluso, amor, porque mi mejor momento es cada día que paso contigo. Junto a ti no desperdicio los minutos, los aprecio como si fueran un tesoro único, porque tú eres el regalo más grande que la vida pudo darme, y sin ti no vivo. Aún recuerdo la primera vez que te vi, con tus coletas y tu sonrisa sin dientes, me tiraste en un charco de lodo y caí profundo por ti. Luego pasaron los años, nos distanciamos, tú te fuiste lejos por un tiempo, y cuando volviste lo hiciste más bonita que antes, y volví a sentir el mismo flechazo que sentí por ti a los cinco años. Decidí que debía tenerte, y cuando lo conseguí, supe que debía conservarte, para siempre.
Las lágrimas escapan de mis ojos, y una sonrisa enorme se apodera de mi rostro. Río como tonta enamorada, porque es lo que soy, una tonta enamorada de un hombre maravilloso, un hombre que sigue agrandando el lugar que ocupa en mi corazón, y no sé cómo lo hace, porque mi corazón ya es completamente suyo, lo fue desde el primer momento en que lo vi.
—Vio, aquí, delante de nuestras familias, amigos, y un montón de personas más que no conozco quiero decirte que te amo con locura y muero por ser quien te acompañe en los buenos y malos momentos, quien te abrace y llene de besos, quien tenga el privilegio de ser el padre de tus hijos, tu compañero de viaje. Violet Prescott, princesa ¿Te casarías conmigo?
Mi corazón se detiene por un instante ante sus palabras. Casamiento, Shawn quiere casarse conmigo. El tonto chico que tiraba de mi cabello en la secundaria y atravesó conmigo toda la etapa de la pubertad, mi novio de cinco años, mi compañero de Universidad, mi tonto vecino, quiere casarse conmigo.
Y yo muero por casarme con él.
Abby pellizca mi brazo y me mira mal, mientras modula un "respóndele, tonta". Me levanto de mi asiento y gritó un sí antes de correr como una loca hacia él. Logro escuchar la carcajada que lanza mi madre.
Shawn me sube al escenario una vez que llego hasta él, y me abraza mientras gira conmigo en brazos. Al detenerse besa mi frente y se arrodilla, mientras toma mi mano y coloca en ella un precioso anillo con un diamante azul, mi color favorito.
—Esto es para siempre, Violet.
—Para siempre, Shawn.
Sonreímos y nos abrazamos, para luego besarnos ante los gritos de felicidad y emoción del público.
Solía creer en el amor, pero jamás pensé que lo experimentaría con tanta fuerza. Shawn fue un una roca en mi camino que me tomé el tiempo de admirar, y descubrí que era un diamante.
Tuvimos nuestros altos y bajos, nos separamos y volvimos a estar juntos, y hoy estamos aquí, sentados uno al lado del otro, en nuestra presentación final de teatro, comprometidos, decididos a pasar el resto de nuestros días juntos, porque nos amamos y estamos dispuestos a luchar el uno por el otro.
Porque cuando el amor toca a tu puerta debes aferrarte a él con ganas y no dejarlo ir, porque si lo cuidas bien, lo aprecias, lo proteges y lo dejas crecer, puede que este dure un hermoso segundo,
O que sea para siempre.
Y con este o.s le damos inicio a una nueva etapa de historias, que espero les gusten más que cualquier otra cosa que haya escrito.
Violet, cariño, espero que te guste la historia, hazme saber tu opinión con un comentario.
Gracias por leerme, nos hablamos pronto.
Lorena.
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ONE SHOTS.
Fiksi PenggemarPequeñas ideas crean grandes mundos, grandes mundos crean inmensas galaxias, inmensas galaxias crean infinitos universos, ayúdame a crear un universo eterno de ideas en donde tú seas el protagonista de una pequeña historia. ¡Pide tu historia! El pa...