La sencillez de escribir

Yo hago todo por ella.

Yo la limpio, la baño, la cambio de ropa, en realidad, hago todo por ella. No es que sea floja, ni nada de eso, simplemente yo la quiero mucho y me gusta cuidar de esta.
Cuando tiene ganas de ir al baño tengo que ir con ella y ayudarle, yo sé que tiene miedo a ir sola.
Cuando tiene hambre yo siempre le hago comida, o cuando no puedo le doy de mis sobras. A ella no le molesta, o no me a dicho nada al respecto.
Cuando está sola yo la abrazo y la cuido como si fuera un bebe, a veces todos merecen sentirse así.

Ella y yo somos uno, nunca nos dejaremos, ella y yo nos queremos, siempre estamos juntos.

"Hola bebe, ya llegue a casa. ¿Me extrañaste?" Esta solo me voltea a ver. "Espero que si, hoy nos vamos a divertir con lo que te traje." Le doy un beso en su boca, no es que tengamos algo, ella y yo somos como familia, pero esto solo es una muestra de cariño. "Deja te doy de comer, has de estar hambrienta" en un plato le doy toda su comida, jugando un poco con ella. "Habré la boca bebe."
Después de un rato de jugar con la comida veo su ropa manchada.
"Ven bebe, vamos a probarte la ropa que te compre hoy." Le quito la ropa, que por cierto, ya estaba algo vieja, y le comienzo a poner la nueva ropa. "Te juro que no estoy viendo mucho" Río. Pero ella se empieza a mover y mirarme, entonces yo también lo hago. No estoy feliz con lo que pasó después, ella y yo somos como familia, pero creo que me gusto. Hicimos el amor.

Mi rata y yo hicimos el amor.

(Perdón por esta historia tan extraña, solo la invente porque estaba leyendo una historia de este tipo y dije, "es algo diferente" y solo lo hice.)