Rozando El Paraíso.

|Capítulo 11|¿¡Dani!?

Subí a la habitación, me sentía muy mal por Dani... No parecía muy contento...

El tiempo pasó volando, ya eran las cinco y yo estaba abajo, esperando a Jesús, que vino con un ramo de rosas.

-No tenías por qué -Dije mientras olía aquellas rosas rojas

-Te mereces más que esto -me dijo

-¿Qué tal tu hermano? -Pregunté

-Bien, nos esta esperando

Fuimos cogidos de la mano, hasta lo que parecía un karaoke, ahí estaba Dani, con la mirada agachada, solté a Jesús y me avalancé a abrazar a Dani, que sonrío al ver mi gesto.

-¿Qué tal? -le pregunté

-Agora que ehtah aqui bien -contestó

-Tonto -repliqué

-¿Entramos o qué? -dijo Jesús

-¡Vamoos! -exclamé

Una vez dentro, estabamos en una habitación, los tres solos.

-¿Quien empieza? -dijo Jesús

-Lah muhere' primero -Añadió Dani

-Venga Carmen tu primero

-Eeeh que yo no...

Jesús me miró sonriente, y, ¿como resistirse a aquella mirada?. Me levante indignada y ¿Adivinais que canción canté? Sí, Impossible de James Arthur.

Al terminar la canción me aplaudieron "¿estamos tontos?" pensé mientras reía.

-Te toca Jesús

-¿Por qué a mi? -Preguntó

-Porque te lo digo yo -respondí giñandole el ojo

-Esta bien... -Dijo

Seleccionó la canción princesa de David Bisbal. Comenzo a cantar y Dani me susurró algo al oido "yo no me rindo" O algo así entendí.

-Dani tu turno -Dijo Jesús

-Alla vooih -contestó

Seleccionó la canción me dediqué a perderte. Comenzó a cantar y al acabar Jesús se fué al baño.

-Por fín soloh -me dijo

-¿Por qué di...- No acabé la frase y se avalanzó sobre mi, me besó y le empujé.

-¿¡Dani!? ¿¡QUE HACES!?

Jesús lo vió todo, la puerta tenía una pequeña ventana desde donde se podía ver toda la habitación, desde fuera no se escuchaba nada, pero con verlo bastaba.

-Daniel Oviedo, mi propio hermano, con mi novia. -dijo serio

-Ehque ha zió zin quereh -dijo Dani como escusa

-Vete -dijo Jesús

-Pero Jezú -Añadió Dani

-¡Que te vallas!¡Desaparece! -Dijo Jesús muy enfadado.

Dani se fué y me quedé con Jesús, ni una palabra se cruzaba entre nosotros. Jesús se levantó y me dijo;

-Perdona a mi hermano, es un idiota.

-No digas eso... -dije

-¿Acaso querias que hiciera eso?

-No, pero...

-¿Pero que? Estamos saliendo y el no deberia hacerte nada.

-Supongo...

-No supongas. Son hechos.

-¡Si vas a seguir así de borde me iré!

Salí por la puerta y me fuí corriendo, me choqué con alguien, era Daniel.

-Lo siento -me dijo

-¿Por qué?

-No deberíah habehte hecho ezo...

-No pasa nada, todos cometemos errores -dije

-¿Y mi hermano? ¿Dónde ehtá?

-Se ha quedado allí

-¿Solo? -Preguntó

-Sí -Contesté

-¿Te acompaño al hotel?

-Vale -dije

Dani no era el mismo, apenas ponia acento y se le notaba deprimido, me acompaño hasta el hotel y se fué.

¿Pelea de hermanos? Me sentía culpable... Yo siempre me peleaba con mi hermano, pero ellos... Al parecer nunca se peleaban y era por mi culpa en parte... ¿Qué podía hacer?