Evan Woods.

Epílogo.

Elijo siete poemas que he escrito en la libreta que encontré en la casa de mi madre para entregar al concurso. El único motivo por el cual continué fue por Tom, pero no hay motivo alguno para que esté interesado en saber si ganaré o no.

Lo que ahora pienso es que debo iniciar los preparativos para que en un mes vaya a la universidad, y también de seguir cuidando a Helen, quién ahora se encuentra dormida.

Suspiro, aún continúo aterrado por la idea de que el accidente pudo terminar en algo peor. Saber que no fue así, que ella está bien y que estudiará en otro instituto no son suficientes pensamientos para tranquilizarme.

Perdón por haberte fallado Helen, esto ha sido mi culpa.

Levanto rápidamente mi rostro y mi mirada se encuentra con los ojos semi abiertos de mi hermana.

—Hey —susurra.

—Helen.

—Deberías dormir hermano.

—No necesito dormir, te estoy cuidando.

—Me refiero a que duermas aquí conmigo, como cuando éramos niños, ¿recuerdas?

Asiento. —No hoy, descansa.

—Toma hermano —me tiende una hija doblada de color blanco, pero parece que el paso del tiempo la ha marcado—. Ayer le pedí a la abuelo que la trajera.

—¿Qué contiene?

—El día que no habías llegado a dormir, fuí a la casa de nuestros padres con Tyler... Estuve en tu habitación, abajo de tu cama había visto esta hoja, es un poema, lo habías escrito de niño.

Levanto mi ceja izquierda mientras desdoblo la hoja...

"Aprieto mis labios mientras pellizco la palma derecha de mi mano,

Siento algo en mi corazón, el causante de no dormir,

Miro el cielo y luego a mí en unos años observando las estrellas,

Aprieto mi pecho y me produce melancolía, hasta que logro controlarlo ya entrado en la madrugada.

.

Frío, hace inhalar té o café para sentir un poco de calor,

Trato de mantener ambos en equilibrio, aún cuando las sensaciones son muy fuertes,

Frío, hace cubrirse con una cobija y recordar cuando se abrazaban esos oso de peluche,

Es sinceridad, sintiendo sensaciones predominantes.

.

Duele un poco, a veces ayuda por no decir que me hace correr en las madrugadas,

Me hace ver a blanco y negro, supongo, de ese modo, diviso qué colores me causan ciertas sensaciones,

Sentir el aire de la noche, por la ventana entrando, reteniendo aquello y cerrando los ojos.