¿Volamos?

DOS

Después de aproximadamente dos horas en el cielo, quiero levantarme, no sabía lo agotador que era viajar.

Ryan: Quieres algo?

Elisa: Si, iré por agua.

Ryan: Yo la busco.

-No descuida.- lo interrumpo.- En serio debo levantarme.

Ryan sonríe y se vuelve a colocar sus audífonos, ¿Que estará escuchando? Ryan es un chico muy impredecible, no dudo que esté escuchando Baladas romanticas o heavy metal.

Me acerco a la Azafata que esta sentada con una expresión de comodidad, ¿como lo lograra?

Em, disculpe.- digo para llamar su atención.

-Si, ¿Desea algo?.

-Queria un poco de agua por favor.

Ella sonríe y me da una botella de agua mineral.

Al llegar a mi asiento no pude evitar ver por la ventanilla del avión y pensar como estará mi familia, como sería mi nueva vida sin ellos, sin mis padres, sin mis hermanos, sin Kevin... Dios como los extraño y solo han pasado unas cuantas horas.

El sentirse sola siempre ha sido relativo pero yo, estoy literalmente sola. Pero aquí estoy, y no hay marcha atrás.

Sé que es difícil.- Dice Ryan haciendo que gire mi cabeza hacia él.

-Dejar a tus seres queridos, Elisa-.continúa.- pero así debió pasar, así que cuando bajemos de ese avión, quiero que demuestres ser la chica fuerte e independiente que siempre has sido.

¿Que puedo decir? Es mi mejor amigo que está a mi lado, al parecer no estoy tan sola.

9 horas más tarde.

¡Dios, por fin! Llegamos a chile.

Después de 9 horas de vuelo, 1 hora del aeropuerto hasta aquí estoy exhausta.
Quiero dormir.

Estoy en el departamento de la novia de Ryan, Andie. Ella se vino 5 meses antes para "experimentar" y al parecer le ha ido muy bien. Es un departamento grande de dos habitaciones y una sala de estar espectacular.

5 meses...

Pues, Ryan y Andie han estado juntos desde hace mas de un año, y la primera vez que escuche que ella se vendría, les juro que crei que todo entre ellos terminaría.

Pero no es así.

Al bajar del avión Andie estaba en el aeropuerto con un cartel diciendo ''MI ADORADO NOVIO y Elisa'', gracioso ¿no?.
Al verse ella corrio y lo rodeo con sus brazos y él a ella, se besaron y comenzó a llorar. No me imagino como debe ser estar 5 meses separado de alguien con quien prácticamente vivías 24 horas juntos. 

Pero aquí estamos, los tres en Santiago de chile. No puedo evitar asomarme por la ventana de la sala y notar las luces brillantes de toda la ciudad, la vida nocturna es muy activa en este lugar, pero aun asi siento una paz increible, aunque suenen miles de autos afuera. 

Sonará irónico, porque sé que estoy lejos de mi familia, pero realmente me siento en casa.