7. Sé atrevida, Francia.

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En mi cama había tres conjuntos de ropa que Ninoska se había traído de su armario, mientras que yo, me aferraba a mi suéter y simples pantalones.

— ¡No permitiré que mi mejor amiga vaya a una fiesta vestida como si fuese a la escuela! — me grito mientras intentaba quitarme los pantalones. Me encontraba tirada en el suelo, solo con mis pantalones y brassier puestos, pues ya me había quitado el suéter de encima. Si alguien llegaba a vernos, pensarían que Ninoska intentaba violarme.

— ¡Me gusta mi ropa de escuela! — le grite mientras luchaba con ella por mantener mis pantalones en su lugar.

— ¡Pero vamos a una fiesta! — dejo de forcejear y suspiro, rápidamente me arrastre a la esquina de la habitación, lo más lejos posible de ella.

— Atrás, demonio. — dije en broma mientras hacia una cruz con mis dedos.

— Francia, ¿Cómo esperas que Chad se fije en ti si vas vestida como feto? — abrí mi boca, indignada.

— El físico no lo es todo. — reproche. — Quiero que se enamore de mí por mis sentimientos. — puso sus ojos en blanco.

— Mira quién habla, ¿Acaso te fijaste en él por sus sentimientos? — baje mi mirada mientras que toda mi cara se ponía roja. — venga ya, debes ser más atrevida si esperas que los chicos se fijen en ti.

— Solo quiero a Chad. — dije haciendo puchero.

— Pues te recuerdo que Chad, es un chico. — le saque la lengua. — Ven, escoge: ¿Blusa con escote en V, Blusa normal con espalda descubierta o crop-top mostrando los hombros? — me pregunto mientras me las iba mostrando.

— No tengo los pechos para la del escote. — me sostuve mis pequeños pechos con las manos.

— Tienes un envidiable abdomen plano, así que te recomiendo el crop-top. — me lo tiro y me encogí de hombros. — Ahora: ¿Falda súper pegada, mini shorts ceñidos a la cintura o pantalón rasgado levanta pompis tan pegado que te podría cortar la circulación? — hice una mueca ante el ultimo, no quería nada que me hiciera desmayar, aparte de Chad. — Si usas el pantalón, tendrás la excusa perfecta por si acaso te desmayas. — dijo sonriente como si me hubiera leído el pensamiento.

— Supongo que tienes razón. — hice una mueca, a lo que ella sonrió y me lo lanzo.

— Igual combina mas con tu crop-top, los mini shorts taparían tu abdomen y la falda te haría parecer una prostituta. — la observe levantando una ceja, ella tenía un top blanco tan pegado que parecía que sus pechos se fueran a salir y su falda negra era tan corta que si se inclinaba podría ver su trasero. — ¿Qué? Esta noche voy con todo para atrapar a ese León. — su sonrisa era tan picara que me avergoncé por las cosas que posiblemente ella estuviera pensando.

Me cambie rápidamente, colocarme el pantalón fue sencillo, yo era más delgada que Ninoska, así que el pantalón realmente no me cortaba la circulación, pero sí que hacia milagros allá atrás.

— Se te ve un traserazo. — dijo Ninoska mientras yo intentaba verme al espejo. Me puse unos tacones y solté mi lacio cabello, mi amiga tomo un mechón de mi cabello y suspiro. — Ojala tuviéramos más tiempo. — acaricie mi cabello con inseguridad y me mire al espejo, me veía realmente linda, con mis ojos azules resaltando debido al lápiz de ojos, el crop-top me hacía ver un poco sexy, y el pantalón le daba una forma perfecta a mi trasero. — Chad caerá esta noche. — sonrió complacida mi amiga, llena de autoconfianza, me relaje y permití que se me pegara un poco su espíritu.

El hermano mayor de Ninoska nos estaba esperando en la sala de estar de mi casa, era solo dos años mayor que ella y asistíamos a la misma escuela, pero casi nunca hablábamos. Los padres de Ninoska le habían prestado el auto esta noche, él también estaba invitado a la fiesta, pues Daniel se había encargado de invitar a los de grados superiores para que hicieran de la fiesta un evento más "salvaje".

¿En serio te llamas Francia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora