Memorias de una Uchiha

Prólogo

Izumi Uchiha había despertado en un lugar desconocido.

¿Dónde estaba?

Con ese único pensamiento trato de recordar, la imagen del hombre que más ha amado paso por su mente.

¿Qué ha pasado?

Se levanto como pudo de la camilla donde estaba recostada, el olor a alcohol medicinal y productos médicos dieron a entender a la castaña que estaba que se encontraba en el hospital, las cortinas de la ventada estaban abierta dejando ver el cielo nocturno plagado de estrellas; al mover bruscamente el brazo derecho sintió una fuerte punzada, los ojos oscuros de la joven fueron hasta su brazo notando como en su brazo derecho tenía puesto un suero.

Se quito con cuidado la aguja del brazo, después se despojó de los cables adheridos a su pecho midiendo su pulso cardíaco; sus pies tocaron el frio suelo estremeciéndola, camino con cuidado hasta la puerta.

¿Qué me habrá pasado?

Llego dando tropezones a la puerta y la abrió con cuidado, las voces de dos mujeres la alertaron y dejo entre abierta la puerta acostumbrándose a la luz que se filtrado a la habitación.

—Que lastima, es el único sobreviviente — una de las mujeres hablo — el pobre niño es el único que sobrevivió a la masacre de su clan —la piel de Izumi se erizo, ¿qué...?, pequeños pasos se escucharon, la joven Uchiha se arrimó en el marco de la puerta y cayó al suelo, ¿mi clan...? — ¿tú crees que debamos decirle sobre la chica? — la pregunta voló por la mente de la joven.

—No — la segunda mujer negó — según los médicos hay pocas probabilidades de sobreviva, su mente a muerto, si la medicina y jutsu aplicados no funcionan, ella será la única que murió de buena, o de la peor manera —respondió, las mujeres se alejaron, Izumi se aferró a sus piernas.

Mamá... una lágrima escapo de sus oscuros ojos, con una gran tristeza invadiendo su corazón se levantó, encendió la luz cegándola por unos minutos, cuando sus ojos se acostumbraron pudo escanear su "habitación", avanzo con cuidado, sus piernas temblaron, encontró ropa doblada en uno de los cajones de la mesita de noche, se desvistió y se colocó un conjunto,  espero unos minutos hasta que pudo canalizar correctamente su chakra, abrió la ventana y salió por ella, callo sobre un tejado y trastabilló, se agarró de las baldosas fuertemente evitando caerse, suspiro y canalizo nuevamente chakra.

Salto hasta otro tejado, y otro, y otro hasta llegar a las afueras de Konoha, camino intranquila hasta la entrada del clan Uchiha, al llegar pudo notar como el portón se encontraba sellado por cintas policíacas, ignoro las cintas y se adentró al clan, en el suelo se encontraba cintas haciendo la silueta de personas, un sentimiento de miedo y tristeza invadió a Izumi, camino por el barrio tratando de reprimir las lágrimas, llego a la entrada de su casa encontrándola con cintas policíacas, no..., se adentró a su hogar encontrándose con la silueta de su madre siendo imitada por cinta, aun había sangre y se podía percibir el olor a putrefacción en el habiente, se derrumbó en ese mismo lugar, con una de sus manos toco el charco de sangre de su madre y con la otra se tapaba la boca para tratar de reprimir los sollozo.

Se levanto secándose las lágrimas y dejando que los sollozos salieran, ingreso al cuarto de baño y se limpió con dificultad la sangre de su mano, levanto su cabeza hasta el espejo observando su reflejo: sus ojos oscuros estaban rojos del llanto y su cabello castaño se encontraba desordenado, se enjuago la cara y sin importarle su apariencia salió del baño.

Trato de recordar que había pasado: Itachi, sharingan, sangre y un bebe, fue lo único que logro aparecer por su mente.

Al ingresar a su habitación se encontró cara a cara con el Tercer Hokage, la joven Uchiha impactada se paralizo en su puesto, el hombre de avanzada edad al notarla sonrió.

—Veo que lograste recuperarte del genjutsu en el que te sumió Itachi —la gruesa voz del hombre sobresalto a la chica.

El sueño.

—¿Qué ha pasado Lord Hokage? —la ronca voz de la joven resonó en la habitación, el Hokage agarro el cuadro de la mesita de noche mientras la chica carraspeaba —el clan... —su voz se cortó mientras recordaba la sangre de silueta de su madre.

El hombre de avanzada edad se levantó de la cama y dejo el portarretrato sobre ella —Izumi —llamo, la Uchiha le observo fijamente esperando por respuesta —Itachi masacro todo el clan —Izumi dejo de respirar sorprendida.

No se esperaba esa respuesta, un sentimiento de tristeza la invado, observo atenta al Hokage y el miedo la invadió repentinamente, Danzo. El recuerdo de ese hombre causaba nauseas a la joven Uchiha, él odiaba a los Uchihas tanto que se enteró que les robaba los sharingan a los soldados caídos.

—No puedes quedarte en Konoha — Hiruze Sarutobi se acercó al cuerpo de la castaña.

—¿Qué? —pregunto alterada, la chica se sintió ofendida, se acababa de enterar de la masacre que toda su familia y ahora la echaba de la aldea.

—La aldea desconfía del clan, ellos creen que iban a hacer un golpe de estado, y si sigues aquí Danzo podrá meterte a prisión por lo que iba a hacer tu clan o peor —explicó Hiruzen, ella recapacito las palabras del Hokage, suspiro entendiendo lo dicho por el Hokage —  tienes diez minuto para dejar Konoha —aviso, Izumi ingreso a su cuarto y empezó a examinar cajones tratando de encontrar una mochila para el viaje, Hiruzen se acercó a la chica tendiéndole su banda ninja —ten cuidado, si Danzo te descubre te mandara a matar poniéndote en el libro Bingo y te culpará de ayudar a la masacre de tu clan —advirtió.

Hiruzen sonrió y acaricio la cabellera de Izumi antes de desaparecer.

Fingir estar muerta...

Aunque el Hokage no dijo eso, esas fueron las únicas palabras que aparecieron en su mente.

Empezar de nuevo lejos de mi aldea, puedo sobrevivir, pero ¿estar sola para evitar poner en riesgo a más personas?

Limpio sus lágrimas y trato de calmarse, saco un par de ropa, dinero y unas fotos familiares importantes, las guardo en su mochila y ordeno todo para que nadie supiera que alguien a estado es ese lugar. Paso por su cama y observo el cuadro sobre la cama.

En la imagen estaban: Itachi, Izumi y Shisui, los amigos se habían tomado esa foto después de una misión que habían tenido juntos, el recuerdo entristecedor a la joven, pero lo ignoro.

Algo dentro de si le decía que la masacre a su clan ocultaba algo muy grande, no por sus sentimientos por Itachi, sino porque nada cuadraba, no vio a Itachi ningún índice que maldad es más lo admiraba por siempre tratar de proteger a la aldea, tal vez es por eso que le confundía sus acciones.