Wherever You Go ✧ TwiPie.

13

Pinkie Pie se encontraba corriendo con el arma por los pasillos del lugar.

Abría todas las puertas tratando de encontrar a Twilight.

Vio en una habitación que había mucha sangre y... ¿piel?

También se encontraba...

-La ropa de Twilight. -murmuró tomando un poco de la tela.

La habían hecho algo, eso sin duda. Molesta, siguió su camino, pero en medio de este se encontró con un sujeto, rápidamente le apuntó con el arma.

Él se le acercó y con un pequeño cuchillo lo encajó en su estómago haciéndola sangrar.

Pinkie no dudo en dispararle, estaba vestido de azul como los enfermeros. Fue por donde venía el tipo pero de detuvo al escuchar un disparo. Volteó y ahí estaba otro de esos sujeto, estaba apuntó de dispararle pero este fue rápido y le disparo en el hombro.

Gimió debido al dolor, pero aún así le disparó.

Y siguió su camino.

Llegó al lugar donde habían quemado a la otra chica en la cruz... solo con una diferencia, esta vez... se encontraba Twilight atada.

Dio un disparo al techo, todas las personas se alertaron y voltearon a verla. Se acercó apuntándole al padre.

-¡Bájenla!-ordenó con una voz firme.

-No puedo, ya es tiempo de su ida...

-¡QUE LA BAJEN MALDITA SEA! ¡O LE DISPARO!-gritó esta vez acercándose al hombre dispuesta a cumplir con lo que dijo.

El padre rápidamente obedeció, jalo una palanca he hizo que la cruz donde estaba amarrada Twilight fuera hacia atrás, "recostándose".

-T-Twilight... -se le acercó y no pudo evitar soltar unas lágrimas al ver lo mucho que la lastimaron-. N-No... ¡SON UNOS MALDITOS!-la abrazó.

-¡Pinkie!-llegó aquella mujer de cabello anaranjado-. ¡Es hora de que Twilight se vaya!

-¡NO!-gritó aún llorando. Volteó a ver su amiga y miró como los ojos de Twilight... cambiaban.

Se vio una luz reflejando en Twilight, pues el techo estaba abierto.

-P-Pinkie... -masculló débilmente llamando su atención.

La peli-rosa se le acercó mientras la peli-morada con mechones rosas le susurraba algo.

-¡¿Qué fue lo qué dijo?!-preguntó la mujer acercándose un poco.

-... Lo escuché. -dijo el padre para después tomar el arma de Pinkie y dispararse en la boca, dándole fin a su vida.

-¡¿Qué dijo?!-interrogó esta vez con más desesperación.

-Porque no se lo pregunta usted. -tomó nuevamente el arma y le disparó.

Toda la gente huyó asustada, al mismo tiempo en el que entraban policías al lugar. Sweetie Belle si pudo encontrar ayuda.

-P-Pinkie, t-te q-quiero...

-Twilight... yo te amo. -confesó acomodando su cabello detrás de su oreja.

-P-Pinkie...

-Yo... te amo. -repitió con lágrimas en sus ojos mientras sonreía.

-Y-Yo t-también...

Pinkie se le acercó a Twilight y le dio un pequeño beso en los labios. Que no duró mucho debido al estado de la contraria.

Los ojos de Twilight cambiaban otra vez.

La miró sin dejar de llorar.

㈇

-♪No importa lo que pasé, siempre estaremos juntas, ni aunque se interpongan una bruja con mucha amargura, si nos mantenemos juntas nada nos pasara pues siempre estaremos para la otra aunque se interpongan un ancho mar♪

㈇

-A veces quisiera subirme a un auto y que lleve a donde sea...

-¿Y a dónde quisieras ir?

-... A donde sea que tú vayas.

㈇

Levantó la mirada techo, la luz comenzó a reflejarlas con más intensidad.

Sus ojos cambiaron justo como los de Twilight.

-... A donde sea que tú vayas.

Ahora las dos estarían juntas, para siempre.

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