Vuelve |Editando|

Prólogo

Tsuna después de 3 años logro que Vongola regresara a sus cimientos, nada fue fácil pero lo logro, algunos aún no lo aceptaban pero él siguió con ello.

Sus guardianes habían cambiado mucho, Ryohei ya no gritaba como antes, Hayato ya no era tan explosivo ni siquiera hablaban como antes, Yamamoto rara vez estaba en la mansión, Lambo ya no lo consideraba como su hermano mayor, hibari ya no llamaba herbívoro a pesar de que estos ya eran pareja, reborn ya ni le interesaba lo que pasara con él.

Los únicos que siempre lo siguieron tratando igual eran Chrome y Mukuro.

Trataba de todas las maneras de animarlos, incluso recurrió a su ya inexistente lado Dame para que estos se rieran un poco, lo único que recibió fueron unas miradas de enojo, intento darle unos dulces a Lambo pero este los rechazo.

Siempre mantenía su sonrisa aunque por dentro estuviera decaído, nunca dejo ver que el rechazo de ellos le dolía, más el rechazo de su pareja, ahora sus sonrisas eran fingidas y el único que se daba cuenta era Xanxus.

Este no decía nada ya que se lo había prometido, todas las noches el cielo lloraba en silencio donde nadie lo pudiera ver, poco a poco perdía la esperanza de que todo volviera hacer como antes.

Pensado que todos tal vez estaban estresados les dio unos días de vacaciones, días en los que el castaño salia a caminar alejándose de la mansión para aclarar su mente.

Todos regresan a su rutina, el cielo no estaba en la oficina por lo cual pensaron que este había ido a caminar como siempre, no le dieron importancia.

-Tks, siempre deja todo para caminar - hablo molesto el peliplata

-Al menos nos dio días de descanso - dijo Yamamoto aburrido

-Siempre tan tsuna - comento Ryohei mientras se iba

-Kufufufu ¿no iremos a ver si esta bien? - pregunto preocupado Mukuro

-No me interesa lo que pase con Dame-tsuna - respondió el hitman

Esto molesto a las nieblas quienes solo se fueron de allí para no soltarle impropios al hitman

-Inútil - murmuro hibari al ver el cuadro que estaba en la pared donde estaban todos ellos

El cielo se oscureció anunciando una gran lluvia, pasaron los días y las nieblas estaban preocupadas por tsuna, él no se iba sin decirles nada.

Los demás guardianes no le tomaron importancia, total ya iba a aparecer tsuna con sus estúpidas sonrisas pidiendo perdón como siempre cada vez que se ausentaba.

Xanxus de la manera más discreta se unió a la búsqueda del cielo al igual que todo Varia, los Shimon también lo buscaban pero sin existo alguno.

Los meses, hasta un año, la mansión se sentía tan vacía oscura, fría, el cielo de Vongola no estaba allí, tampoco su calidez.

Yuni estaba asustada había visto el futuro y lo único que vio fue un cielo oscuro, uno que lloraba en silencio alrededor de la oscuridad gritando, pero no se escuchaba nada.

Byakuran envió un mensaje a Mukuro diciéndole lo que Yuni había visto, eso los alerto más, los anillos Vongola ya no funcionaban, se negaban a hacerlo, no hasta que el cielo volviera.

Todos sentían la ausencia del castaño, enma rara vez salia de la mansión Shimon, Yuni estaba triste, Byakuran incluso había dejado de comer malvaviscos, se negaba incluso a ello.

Xanxus se irritaba mas de lo normal, nadie se podía acercar a el, al menos que quisieran terminar como colador, incluso Chekerface ya no llegaba a la mansión para molestarlos.

-No tiene sentido si él no esta -Fue lo ultimo que dijo para después ya no volver a la mansión

El cielo que los había unido ya no estaba, su calidez, nada. Todos los días los guardianes soñaban con el castaño que les sonreía mientras entraba a la mansión, siempre despertaban con un dolor en el pecho y la garganta seca.

Otras noches tenían pesadillas donde el castaño lloraba arrodillado en el suelo mientras gritaba en la oscuridad, sus ojos perdían su brillo que lo caracterizaba, se ponía de pie pero este solo caminaba al frente mientras una sombra negra estaba detrás de él.

« Felicidades han roto un cielo puro. Ahora me pertenece y yo si pienso cuidarle »

« Alegrence... Ya no deben cargar con ese cielo molesto, ese olvidadizo, ese tan sentimental, ese que era capaz de dar su vida por ustedes...»

« ¡¡El ya no volverá!! »

Esas palabras siempre las escuchaban antes de dormir, como si alguien les reprochara por hacerle daño al cielo, Mukuro, Chrome, enma, Byakuran, Yuni, Xanxus eran los únicos que no escuchaba esa voz en su mente.

« Ustedes serán capaces de ver lo que trate de salvar del cielo.Verán la majestuosidad que no deje que se hundiera, yo lo protejo, no se preocupen para ustedes
... El volverá... »

Esas palabras les daban consuelo pero a la vez preocupación.

¿Donde estaba el cielo de Vongola?

Sin su cielo los elementos pierden su camino, cuando los elementos no prestan atención a su cielo este se pierde.

He decidido editarlo, pido disculpas a quienes ni llegaron a la mitad de la historia cuando la mande a borradores, perdón.

Poco a poco verán de nuevo a vuelve, con casi nada de faltas y nuevos diálogos