El celular timbró.
Exhausto por el alboroto de anoche, debí de haberme quedado dormido. Me despertó el tono de mi celular; corrí al baño, me paré en el retrete y lo alcancé para contestar la llamada. Era Amanda, y ahora me siento mucho mejor. Estaba muy preocupada por mí y aparentemente ha intentado
contactarme desde que la dejé plantada. Viene para acá, sí, sabía endónde estoy sin necesidad de que se lo dijera. Estoy muerto de la vergüenza. Definitivamente� voy a tirar este diario antes de que alguien lo vea, ya ni sé por qué sigo escribiendo en él. O bueno, quizá porque ha sido el único tipo de comunicación que he tenido desde… Dios sabe cuándo.
Me veo terrible. Me di un vistazo en el espejo antes de volver aquí. Mis ojos están hundidos, mi barba más grande y parece que estoy enfermo. Mi apartamento también está hecho un desastre, pero no voy a limpiarlo. Creo que necesito que
alguien más vea por lo que he pasado. Estos últimos días no han sido normales,
por donde lo vea. No soy de los que imaginan cosas. He sido víctima de la probabilidad. Seguramente me faltó poco para ver a otra persona en varias
ocasiones, nada más fue que salí muy tarde por la noche, o al mediodía, cuando
todo el mundo está trabajando. Ahora sé que no hay problema. Además,
encontré algo ayer que me ayudó tremendamente: ¡un televisor! Lo conecté
justo antes de sentarme a escribir esto, y lo escucho sonar de fondo. La televisión siempre ha sido un escape para mí, y me recuerda que afuera de estos muros un
mundo sigue andando, crea lo que crea.
Me alegra que Amanda haya sido la única que me contactó luego de haber
mandado todos esos mensajes absurdos. Ha sido mi mejor amiga durante años.Ella no lo sabe, pero cuento al día en que la conocí como uno de los mejores que he tenido en toda mi vida. Fue un tibio día de verano; pareciera como si el recuerdo estuviera arrancado de un mundo distinto del que me encuentro ahora.
Sentí que pasaron días enteros en ese parque, al que ya estábamos demasiado
grandes para ir, hablando con ella solamente. Todavía puedo volver a ese
momento en veces, y me recuerda que este lugar no es lo único que existe…
Al fin, ¡llaman a la puerta!Pensé que era raro que no la hubiera visto por la cámara que escondí en el
pasillo. Supuse que fue por la perspectiva, similar a no poder ver mi puerta. Debí saber que eso sería un problema. Después de que tocara, grité en tono de broma
que tenía la cámara entre las máquinas… vaya que había dejado a mi paranoia
ir lejos. Vi su imagen acercarse y bajar lavista hasta dar con ella.
Sonrió y saludó con una de sus manos.—Qué hay —dijo alegremente, mirando curiosa.
—Lo sé, es raro —hablé por el micrófono conectado a mi computadora—.
He tenido una mala racha—agregué.—Seguro —contestó
—Ábreme Juan.
ESTÁS LEYENDO
Psicosis
Mystery / Thrillerla soledad puede llevar a cualquier buen hombre a dudar de la realidad, en esta historia abordaremos en primera persona el camino hacia el abismo onírico de la Psicosis y la locura, aquí no hay sitio para los finales felices, sólo un camino de tensi...