Evento Cinco

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18 de marzo de 2016

-Raul, despierta, anda... debes llevarme al supermercado y de paso irte a la universidad.

~Mamá... ¿que hora es?

-ocho y trenta de la mañana.

~aún puedo dormir una hora mas.

-No señor, usted se levanta de esa cama ahora mismo.

Mi madre quito las sábanas de encima mio, vio unos moretones en los brazos, se quedó asombrada, con la boca abierta y su mano sobre ella.

-¿Que sucede Raúl, y estos moretones?

~no lo se mamá, ha de ser circulacion, estoy muy cansado. Puedo dormir otro rato.

-Raul Hasbun, me explicas ahora mismo estas marcas, a que se deben, ¿te golpeas? ¿alguien lo hace? No puede creer que con ese tamaño te dejes golpear todavía y en la universidad...

Mi madre sigue hablando, el sueño cierta mis párpados y se me hace todo oscuro pero algo raro sucedió,  según todo se iba poniendo oscuro, al lado de mi madre, había una chica muy bonita junto a ella, intente abrir los ojos pero no podia, solo pude ver borrosamente que me decía adiós entre cerrando la mano hasta que me quede dormido nuevamente, escuchaba la voz de mi madre a lo lejos y cuando de repente desperté y la volví a escuchar claro.

Esta bien, ya estoy despierto, no tienes que gritar.

Fuimos al supermercado, donde una amiga, al botanico, y demás diligencias de mi madre, después me fui a la universidad a terminar unos cuantos detalles de mi maestría. En eso volvió a ser de noche.

Llegue a casa, cene algo, compartí con mis padres, luego me di una ducha y a dormir.

Estando en mi cama me pregunto ¿que diablos le pasa a mi cuerpo? Estoy lleno de moretones.  Mi padre toca mi puerta. Charlamos un poco...

-Leonor me ha dicho que te dejas golpear. Que estas lleno de moretones, ¿me permites ver?

Mamá exagera un poco, ha de ser circulacion o estrés por la finalizacion de la maestría y el trabajo.

-se ven mucho ¿seguro no te metiste en problemas? Puedes hablar conmigo. ¿O fue alguna chica salvaje?

Papá era el hombre mas jocoso del mundo. Pero no, juro que no se, como dije, debe ser estrés.

-bueno. Deberías ir al medico.

Esta bien.

-Buenas noches hijo, te amo.

Y yo a ti.

He vuelto a tumbarme en la cama. Vuelvo a sentir la brisa fría de todas las noches, ya es costumbre. Solo que esta vez se ha movido mi silla de escritorio y ha caído mi portalapiz, eso es extraño, es bastante pesado para ser tumbado por esa brisa.

Fui a recogerlo y sentí como recorría mi espalda un frío extraño. Volví rápido a la cama y aquí sentí como si alguien me mirase muy cerca de mi cama, mi corazón está acelerado. Pero igual me siento cansado así que dormiré nuevamente.

A A M I N A HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora