Capítulo 9

41 10 6
                                    

—Eh... Lo cogí para...— dije yo —.
— No quiero que me des explicaciones... De verdad, soy una idiota, ¿Cómo me pude fiar de alguien que andaba perdida cerca de esa casa tan destruída?— me interrumpió Nuria—.
—Nuria, yo...— dije—.
Pero no tuve tiempo a terminar la frase, ya que Nuria ya me había quitado el diario de las manos y se había marchado corriendo de la habitación, la perseguí durante aproximadamente 15 minutos, hasta que ya me encontraba exhausta, en ello momento en el que pare una mano tocó mi hombro, me giré rápidamente y me encontré con la persona que menos esperaba, era Rubén, el hijo mayor de la señora Novoa:
— Déjala, sale corriendo cada dos por tres— dijo él—.
— Eso lo dices por que no sabes lo que he hecho — dije yo —.
— Sorpréndeme— contestó—.
— He leído su diario — dije avergonzada—.
Y entonces volvió a pasar algo inesperado, se empezó a reír como nunca nadie se había reído de algo que yo hubiera dicho.
— ¿Qué tiene tanta gracia? —dije yo—
— ¿En serio estás preocupada por esa tontería?— dijo sin dejar de reír—.
— Pues... Sí,tenías que haber visto la casa que puso — dije—.
— Está bien, está bien si te hace sentir mejor y te gusta jugar a la consola, podemos jugar, pero elijo yo el juego— dijo él—.
— El juego lo elige el primero que llegue a tu cuarto — dije antes de salir corriendo hacia la casa de los Novoa—.
No sé el porqué pero hablar con Rubén me hizo sentirme mucho mejor .






No son más que recuerdos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora