INCAPAZ DE MATAR

CAPÍTULO 3

El lunes me arregle un poco mas de lo normal, iría esa tarde a casa de Jayden, me puse un poco de maquillaje, deje mi cabello suelto y empecé mi día.

para mi sorpresa vi a Scarlett, una chica que no tolero, estaba besando muy apasionadamente y sin un poco de pudor a un chico en pleno corredor de la universidad, cuando me detengo a mirar, es Jayden a quien besa, siento un fuerte dolor punzante en el pecho, pero lo ignoro y continuo caminado, el resto del día fue un asco también, mucho trabajo y nada interesante.

Al salir de la ultima clase son casi las 6 de la tarde, Jayden está esperándome afuera, le sonrío y saludo.

-hola Jayden- digo mientras paso por su lado. Él continúa caminando y hace un gesto con la mano para que lo siga sin ni siquiera dirigirme la mirada. 

Hay un extravagante auto rojo afuera esperándonos cuando salimos, el se monta y lo enciende, me monto también  y arranca casi sin esperar que cierre la puerta, unos segundos después enciende la música, metálica pesada y demasiado fuerte para mi gusto.

Intento descifrar si su gesto es de odio pero no logro describirlo, es neutro, sin sentimiento alguno, continua así hasta que llegamos a su casa.

Entramos a un gran apartamento, la sala de estar está casi vacía a excepción de un gran televisor de pantalla plana y unos cojines en el suelo, al otro lado está la cocina con una montaña de platos sucios, al entrar a su habitación me sorprende el color de la pared, un fuerte color rojo sangre, su cama es bastante grande y hay una envoltura de un condón en mesa de noche, el resto de cuarto es un total desastre y hay paquetes de comida chatarra por todo el piso y otro televisor grande con un pantalón encima cubriendo su pantalla.

-no me disculparé por el desorden- se defiende al ver mi expresión de desagrado -ire a buscar hojas donde hacer el trabajo, a eso vinimos- añade.

Me quedo de pie observando todo, empiezo a entenderlo un poco, Jayden es de esos chicos que se va de la casa de sus padres para vivir solo y se limita a traer chicas para acostarse con ellas de vez en cuando.

Jayden llega con las hojas, se quita los zapatos y se sube a la cama, saca de su maleta un cuaderno para apoyar y comienza a escribir sin decir palabra alguna.

-oye, el trabajo es en equipo- le digo esperando a que reaccione.

-pues ¿que esperas? súbete y ayúdame- dice como si fuera obvio. Me quito los zapatos y me subo junto a él, intentando leer lo que ha escrito, realmente es bueno, sabe lo que hace.

-falta especificar lo de la nitroglicerina como componente del explosivo- le digo en tono suave.

-ya lo puse, solo lo estoy transcribiendo- dice y me muestra una hoja que está a su lado y yo no había visto y me señala la parte donde incluyó lo que yo acababa de decirle. Jayden había hecho el trabajo por adelantado y no me incluyo en el.

-oye, espera, no puedes hacer eso, se supone que ambos deberíamos hacer el trabajo- digo en tono alto y enojada.

-es solo un borrador, leelo y si tenes algo que agregar me avisas- responde y me pasa las hojas donde tiene todo listo pero a lapiz.

Leo el trabajo completo y lo repaso varias veces para encontrar algún detalle que pueda cambiar, algo que pueda agregar, pero lo hago en vano, el trabajo es impecable, con todas las especificaciones.

-todo está muy bien, pero entonces ¿que se supone que hago yo aquí si tu hiciste todo solo?-

-pondré tu nombre el el informe, pero necesito que me ayudes con algo- dice con una cara demasiado insinuante y lasciva, mientras se quita su chaqueta, dejando ver a través de su camisa blanca su trabajado cuerpo.

-¿a a que?- tartamudeo.

-no te hagas ilusiones, solo necesito tu ayuda con la tarea de grafología- dice y lo veo sonreír con sinceridad por primera vez.

-ah claro-

-¿me ayudaras?- pregunta con incredulidad.

-es sarcasmo- digo.

-bien, arreglatelas con el trabajo- responde ofuscado.

-puedo hacerlo mejor que tu- miento -pero ya no llores, te ayudaré- añado y sonrió.

-bien- su tono arrogante me molesta en sobremanera.

Se levanta y saca un cuaderno de su maleta y me lo tira, lo atrapo y lo abro.

-¿empiezo ya?- pregunto y al instante Jayden asiente poniendo los ojos en blanco.

Cruzo las piernas en su cama y comienzo a hacer su tarea, el se sube a mi lado, se pone audífonos, se recuesta y coloca una almohada en su cara. yo solo continuo con lo mio.

Un largo rato después me pongo boca abajo para estar mas cómoda escribiendo, hasta que el sueño empieza a apoderarse de mi.

-¿zoe?- me despierto de un brinco, apenas voy en la mitad de la tarea y Jayden está parado al lado de la cama mirándome.

-lo siento mucho, perdón, me quedé dormida- digo completamente apenada.

-eso pude notarlo- dice intimidandome con su mirada - eres una lindura durmiendo, hasta babeas-

Me limpio la comisura del labio para comprobarlo, solo quiere jugar conmigo.

-ja ja, muy gracioso- contesto - ya me voy, mañana te entrego tu tarea lista- me pongo mis zapatos y me coloco de pie. 

-no creo que sea buena idea que te vallas a esta hora, van a ser las 11- dice

-me vale, cogeré un taxi.

-te llevaría pero presté mi auto hasta mañana, no pasan muchos taxis por aquí- contesta con sarcasmo y cara de "lo lamento".

-ah ahora eres amable-agarro mis cosa y salgo a esperar un taxi. Espero 5 minutos y veo pasar solo una moto, luego 10 minutos, después 15, 20 y me canso de esperar. Subo las escaleras del frente de la casa de Jayden y toco el timbre, abre de inmediato.

-te lo dije- se adelanta a decir.

-¿que hago entonces?- pregunto preocupada.

-quédate- responde con tranquilidad.

-ni loca-

-bueno adiós- dice y empieza a cerrar la puerta en mi cara. La detengo con una mano.

-espera- digo y entro - no tengo otra opción- 

-lo sabía- su cara de satisfacción es evidente.