XVIII

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P.O.V. Hermione Granger.

La carta era sencilla, pero sabía que detrás de aquellas letras tan finas se escondía algo más que solo unas pocas palabras, eran una luz en la oscuridad, mi ultima oportunidad de salir de este agujero o jamas escaparía y lo que una vez creí amor me consumiría hasta el alma.

Ven al bosque prohibido a la media noche.

Draco.

irónicamente, mi camino no parecía tan iluminado a pesar de ser el mejor, solo espero esto no sea una broma, porque es la ultima fuerza que me queda y si esto no resulta, creo que lo mejor será rendirme.

Me detuve en un lugar algo claro y espere en un tronco tirado, metí mi mano al bolsillo y saque la nota, la volví a leer y me quede observando la posdata.

Yo te encontrare, solo no te muevas.

-Por favor, que Draco no me falle -susurre al viento esperando el se llevará mis miedos y de esa manera poder enfrentarme a lo que sea que pasara hoy.

Los segundos pasaban y con el mi ansiedad aumentaba.

-Me alegro de saber que mi carta te llego, pero más aun me alegro de que vinieras- escuche una voz detrás de mi y no necesite mirar para saber quien era.

-Es la última oportunidad -dije sin mirarlo, pero aun así me sentía nerviosa.

-En ese caso hay que darnos prisa, no queda mucho tiempo -sentí sus pasos acercarse.

-¿A donde iremos? -pregunte al ver su mano extendida hacia mi.

-Daremos un paseo, luego te llevare a ver algo -dijo con tranquilidad.

Tome su mano con algo de duda, pero apenas se rozaron nuestros dedos una corriente me recorrió entera, y me calme de tal forma que mis temores se esfumaron más rápido de lo que volaba una snitch.

-Te sigo -susurre tan bajo que temí no me escuchara, pero me sonrió y supe me escucho.

***

Habíamos caminado por bastante tiempo tomados de la mano, estaba comenzando a cansarme cuando frente a mi vi algo que me impacto, un prado casi incinerado en su totalidad, varios trozos de madera quemados encajados en la negra tierra, ruinas de lo que supuse fue un hogar se encontraban cerca del centro,todo parecía irreal, era un lugar de miedo, se podía sentir la magia oscura correr por el lugar, los rastro de una terrible batalla y mucho odio.

-¿Qué es este lugar? -pregunte con miedo.

-Solo un fantasma del pasado, pero tienen que ver con el collar y el anillo que encontraron -dijo mirándome.

Saque aquel collar y el anillo que llevaba conmigo y se los mostré, tan bellos como la primera vez que los vi.

-¿Qué tienen que ver con este lugar? -pregunte curiosa.

-El collar y el anillo fueron regalos de compromiso de una pareja que vivía aquí, pero jamás llegaron al altar.

-Dime la verdad, quiero saberlo todo, Draco... confía en mi -pedí desesperada por saber ya la verdad y saber que papel jugaba en esta historia.

-La verdad es que mi familia si tiene razones para mantener la sangre pura, pero no por la razón que todo el mundo cree, lo que tu conoces como magia, tiene un punto de inicio muy distinto, hace años, varias familias dominaron un arte oculto que les daba poderes, estas familias se unieron y decidieron proteger a sus pueblos, los llamaban...

-Prodigios -complete yo.

-Así es, pero el nombre correcto era imperium, fueron los primeros magos, pero ellos no necesitaban de varitas, podían controlar la energía y transformarla, por eso el nombre, la paz se mantuvo por años y año, pero un día la paz se vio en peligro por un rey que clamaba ser dueño de todo y de todos, los imperium se le opusieron y hubo una guerra, pasaron años y el rey cansado de verse perdedor de todas las batallas decidió jugar su ultima carta, dijo que quería la paz y dio a su única hija como prometida, la chica se enamoro del imperium, aun cuando su deber era averiguar sus debilidades, el collar era de ella, el anillo de su prometido, cuando se acercaba el día en que su padre atacaría ella confeso todo y ellos se defendieron, pero nadie sabia que el padre con la información que le había mandado su hija logro crear un arma, las varitas, la batalla fue atroz, y los imperium no podía contra ellos, su magia nunca se vio obligada a luchar contra otra y ellos sufrían con cada ataque a diferencia de sus contrarios, los cuales no recibían daño gracias a las varitas, en el último instante, el chico mando a su amada el anillo con un poco de su energía, para que esta y el resto de las familias huyeran, pero no todas escaparon, solo unas cuantas, las demás fueron atrapadas y asesinadas brutalmente.

La última barrera.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora