−Pues, veras. Y-yo... −Las palabras quedaron en el aire al momento que el teléfono de la casa comenzó a sonar, pero Marie no se movió de su lugar, solo miraba fijamente a su medio primo. –¿No contestarás?
−No
−¿Por qué? –Su mirada ya lo estaba inquietando.
−No responderé hasta que tú me respondas.
El sonido del teléfono solo lo desesperaba.
−¿Y si es importante?
−Lo dudo
−Puede que sean tus padres
Marie suspiro y aceptó. Caminó a la mesa cerca de ella y tomo el aparato solo para escuchar la voz de su madre al otro lado de la línea. ¡Thomas había adivinado!
−No. Aun no me contesta. Tranquilo Phineas... amor basta.
−¿Mamá?
−Ho espera, ya me contesto. ¿Marie? Cariño, ¿Cómo estás?
−Estoy muy bien –Notó que Thomas la observaba con una mirada triunfadora y ella le dio la espalda sonrojada− ¿Y ustedes cómo están? ¿A qué hora vuelven?
−Solo estamos un poco retrasados con el vuelo. En dos horas estoy segura que estaremos ahí.
−Pues aquí los espero –Marie se imaginó a su madre sonriendo del otro lado de la línea y ella también lo hizo.
−Cariño, tu papá quiere hablar contigo.
−Claro.
Thomas observó a Marie y noto que estaba algo enterrada. Después de esa llamada él se iría para que ella estuviera decente al momento que llegaran Phineas e Isabella.
Justo en ese momento una alocada idea le paso por la mente. Ella quería saber sus sentimientos y él se los diría, no de la forma que lo había planeado pero lo haría y después escaparía como un vil cobarde.
¡Decidido!
−No papá... Si papá... Claro que sí. Me ha estado cuidando, tal y como se lo pediste.
−Eres una mentirosa. Tú te has cuidado de mí. –Thomas llego por atrás de ella y le susurro del lado contrario del teléfono.
−To-tommy –Tartamudeo en un susurro y dio un pequeño brinco, pues se había sorprendido. –Estoy hablando por teléfono.
−Sigue hablando. Has como si no estuviera aquí.
Marie se sonrojo y decidió ignorar al castaño que seguía a su lado.
−Tú me preguntaste cuales eran mis sentimientos por ti y te responderé.
La pelirroja sonrió y nuevamente susurro.
−Ahora quieres contestar mi pregunta ¿no?
−¿Marie? ¿Sigues ahí?
−Si papá. Estoy aquí.
Thomas soltó una pequeña sonrisa y continúo hablando.
−¿Sabes? Eres muy distraída que sigo sin creer que no adivines mis sentimientos por ti misma, pero no me cuesta decírtelos. −Suspiró− No mentía cuando te dije que te amaba. –Aquello provocó que Marie abriera los ojos de par en par y volteara a ver a Thomas de frente perpleja.
−Papá, espérame un momento ¿sí? No tardo. –Y bajo el teléfono sin esperar a escuchar la respuesta de Phineas, presiono un botón y presto toda su atención al castaño.
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My Bad Boy-Thomarie
Fiksi PenggemarAlgunas cosas nunca fueron fáciles para Thomas Fletcher. A pesar de ser inteligente, gran músico, excelente inventor y tener de padre al famoso Ferb Fletcher no era suficiente para aclarar sus sentimientos a su media prima. Pero después de ser go...