Jin 1/2

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Ya llevaba esperando 30 minutos en aquel restaurante de sushi, se suponía que llegaría hace poco pero no veía señal de su cita. Una ojinegra se acercaba aquel chico pelicafe, el contrario no se percató de la presencia de la joven.

-¿Que va ordenar?-.

Pregunto amablemente la pelicafe, en ese momento el contrario volteo a ver a la joven para luego de unos segundos reconocer su rostro junto a unos recuerdos que le venían a la mente.

-Chica del bus-.

Dijo el mayor acomodando un poco su cabello para luego sonreír por lo que había dicho, la contraria de igual manera lo reconoció sonriendo algo extrañada.

-Chico del paraguas-.

Sonrío mostrando sus dientes blancos, ladeando un poco la cabeza algo extrañada. Parecía que el destino quería que se encontraran nuevamente, que extraño no?

-Entonces, ¿Que vas a ordenar?-.

Pregunto la pelicafe observando cuidadosamente al otro, el mayor miro disimuladamente a todos lados buscando por última vez señal de su cita pero al no encontrar nada, miro a la joven con una sonrisa algo decepcionado, la ojinegra se percató de eso.

-Te han plantado?-.

Hablo de igual manera decepcionada pensando en quien había podido dejar aquel pelicafe de lindo rostro plantado. El mayor asintió leve para luego intentar sonreír causando una mueca de nerviosismo.

-Espera, terminare mi turno y luego regresaré-.

Se dio la media vuelta para dirigirse a la cocina para hablar con uno de sus compañeros. Luego de unos minutos terminó su turno para luego ir a cambiarse con una ropa más cómoda, se dirigió a la barra de bebidas en la que se hallaba dos platos con sushi junto a dos bebidas. Se acercó a la mesa en la que se encontraba aquel joven.

-Ten, come-.

Hablo la menor llamando la atención del contrario quien volteo rápidamente ya que le llegó el olor aquel sushi recién preparado haciendo rugir sus tripas.

-Gracias-.

-Estamos teniendo una pequeña cita-.

El mayor se atragantó un poco comenzando a toser, mientras la menor lo iba ayudar.

-¿Que?-.

-Si, lo que oíste. Ya que te plantaron, yo, seré tu cita-.

Comió un trozo de pescado mientras reía en sus adentros por la expresión que acababa de hacer el mayor.

-Está bien, entonces disfrutare esta cita-.

-Entonces debo saber el nombre de mi cita-.

-Kim seok Jin-.

-______-.

La menor río asintiendo comenzando una conversación agradable con el mayor. Unas horas más tarde era momento de cerrar el restaurante.

-¿Cuanto sería la cuenta?-.

-O no, yo invito-.

Negó con las manos la joven comenzando a levantar todos los platos, el mayor detuvo su mano para comenzar ayudar a la menor.

-Por lo menos déjame ayudarte-

Hablo el mayor llevando los platos hacia aquella cocina con olor a grasa.

-Déjalos ahí-.

Señaló la menor una pequeña mesa en la que se encontraban varios platos sucios.

-Bien-.

Los dejo dónde señaló la contraría con cuidado, regresó rápidamente a la mesa en la que se encontraba para dejar algo de dinero en la bolsa de la menor quien aún se encontraba en la cocina.

-Listo-.

Regresó observando al mayor quien lo veía con una gran sonrisa traviesa.

-Vamos?-.

Señaló con su cabeza la salida indicando para que salieran del restaurante, la menor entendió tomando su bolso para salir del establecimiento y cerrar.

-Yo... voy por acá-.

Señaló con la mano izquierda la ojinegra observando al joven.

-Te acompañó-.

Se ofreció el joven colocándose a un lado de la menor para luego pasar su brazo sobre los hombros de la contraría.

-Bien-.

Comenzaron a caminar para comenzar una agradable charla, conociéndose más.

BTS One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora