J-hope 1/3

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En un mes había sabido tanto de ella, sabía que era dedicada a lo que se proponía, tanto que una vez la había visto practicar hasta las 5 de la mañana por un paso, que según ella, no iba correcto.

De nuevo iba a verla practicar, le encantaba ver ese rostro molesto junto a esas mejillas inflarse, coloradas, por el esfuerzo y el enojo que sentía por aquellos pasos que no podía hacerlos, intentaba ayudarla pero siempre salía con una carita de perro regañado pues la joven le reclamaba que ella podía. De nuevo le reclamó ese día pero no podía decirle nada pues se veía tan concentrada en el baile.

-No vas a parar, hasta conseguirlo, cierto?-.

Suspiro hablando con él mismo pues no tenía compañía y estaba al otro lado de aquel vidrio que separaba a la joven de él, se veía tan cerca pero inalcanzable a la vez. Se estaba hartando de reprimir los sentimientos que sintió aquella tarde lluviosa, cuando abrazo a la joven en busca de consuelo, estaba muy mal ese día pero decidió que ahora su única forma de sonreír era hacer sonreír aquella joven, había perdido a las personas que lo hacían siempre estar de buen humor y una razón de hacerlos felices, creía que estaría perdido pero no, de nuevo se aferra con toda su alma a una persona, como si fuera su vivir.

No sabía que era ese sentimiento pero estaba seguro que no era un capricho suyo, como lo había echo con las anteriores personas, siempre había sido muy aferrado a personas que lo hacían feliz.

-Eh terminado Hobi~-.

-Eso fue rápido, creí que seguirías así hasta las 7-.

-No, sabía que estarías esperándome y yo sé que tendrías hambre, así que hoy me toca invitar la comida-.

La joven mordió su labio inferior para luego comenzar a correr mostrando su billetera al contrario.

-Espera _____!-.

Corrió tras la joven quien antes de ser atrapada por el ahora pelirrojo, entro a un pequeño centro comercial en el cual habían pequeños puestos de comida.

-Hobi, aquí era el lugar tan especial del que me hablaste?-.

-S...i-.

Dio una gran bocanada de aire intentando recuperarse pues su condición para correr no era la mejor.

-Te invito a comer y tú, me dirás porque es tan especial-.

-Me parece un buen trato-.

-Bien, vamos, dime ¿dónde quieres comer?-.

El pelirrojo camino hacia un puesto en el que vendían brochetas de pollo.

-Me parece bien-.

La joven sonrió agarrando una brocheta para luego comenzar a comer, el contrario sonrió para luego igual agarrar una brocheta comenzando a comerla.

Se la pasaron toda la tarde entre risas y comiendo ya una gran cantidad de brochetas.

-Ah, quedé totalmente llena-.

La pelicafe sobo su estómago comenzando a caminar a un lado del pelirrojo.

-Gracias por haberme invitado-.

-Aish, no te molestes, después de todo somos amigos-.

-Claro...-.

-Oye sucede algo?-.

El pelirrojo se lo estaba pensando mucho, debería decirle?, Claro que sí! Ya no podría reprimir más aquellos sentimientos.

-Que tal si te dijera que una persona me gusta-.

La joven sintió una gran punzada en su corazón, se sentía celosa a decir verdad pero no podría darse el lujo de confesarse ahora mismo pues había escuchado bien, el pelirrojo ya tenía alguien en su corazón.

-Y... ¿Quién es la afortunada?-.

-Pues es una chica demasiado dedicada a lo que se propone, es muy linda, me encanta cuando esa chica infla sus mejillas en un puchero que me hace reír, me encanta ese lunar que tiene en la punta de su nariz-.

Pellizco leve la punta de la nariz de aquella joven para luego deslizar su mano aquellas mejillas que estaban sonrosadas.

-Hobi...-.

-Me encantas ____-.

-Eres muy cursi-.

La joven asintió para luego abrazar al pelirrojo quien se sentía nervioso por lo que fuera a responderle la joven.

-Igual-.

Fue lo único que dijo para luego juntar sus labios con el contrario quien se sorprendió al principio para luego corresponder lentamente.

Desde la primera vez que lo conocí me encantó esa sonrisa que te brindaba esperanza.

BTS One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora