36. Mentiras blandas

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No quiero irme.

No quiero dejar a Paty sola en este lugar. La golpearían

Ella no sabe limpiar, no puede lavar platos, ni tender camas. Paty me necesita aquí.

Lo gracioso es que a pesar de la noticia, de la cual debería alegrarme. Estoy triste por Paty

—Luis ¿qué te dijo la directora? —Volvió a preguntar.

—Me pidió que no escapáramos más—Mentí.

Paty solo se rio ante mi comentario y tomo de mi mano para llevarme a los juegos infantiles y comenzar a cantar.

Mi mentira es por el bien de ella.

No puedo decirle la verdad.

Junto a PatyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora