La capturaron para entrenarla como a un soldado más, pero nunca se imaginaron que ella se convertiría en su mejor soldado. Nunca imaginaron que ella sería una de sus mejores armas. Desde el momento en que ella fue capturada, le enseñaron que S.H.I.E...
XX.- soldado 2-17, es un gusto verte nuevamente.- abrió mi puerta.- El jefe estará muy feliz de ver a su segundo soldado de vuelta.- apuntó su arma hacia mi.- No quiero dispararte, así que hagan esto de la manera fácil.
XX2.- ¡salgan del auto!.- abrió la puerta de Steve.- ¡Ahora!.- rodé los ojos.
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Morgan.- ¿acaso esa es la forma en la que le hablas a un superior tuyo?.- mire al que estaba en mi lado.- ¿De dónde sacaste a este novato? Ni siquiera pudo dar bien la orden sin fijarse si venía auto.- vi como se fijó si venía auto.- Te hice dudar.- comencé a reírme.
XX.- será mejor que bajen de la camioneta si no quieren ser heridos.- deje de reírme.- Habló en serio Soldado.- apreté mis labios y alcé ambas manos.
Morgan.- está bien, tu ganas.- me encogí de hombros.- Tan sólo no le hagas nada a él.- mire a Steve para luego volver a verlo.- Él ni siquiera tiene idea de que hay un botón a un lado del volante para que nuestra agencia se entere de nuestra ubicación y mande ayuda.- me encogí de brazos.- Tampoco sabe que puede cerrar toda la camioneta con tan solo un botón.- sonreí levemente.- Pero creo que hable de más.- sonreí ampliamente.
Steve tan solo hizo todo lo que dije y comenzó a manejar rápidamente. Como era de esperarse las puertas de la camioneta al igual que las ventanas se cerraron automáticamente dándonos la oportunidad para escapar. Estire un poco mi brazo metálico y presione el botón para que nos mandaran apoyo ya que ellos no nos dejarían ir tan fácilmente. Steve comenzó a manejar lo más rápido que se podía en la carretera pero aun siendo cuidadoso de no chocar, mire por el retrovisor y aquellos idiotas nos seguían a toda velocidad.
Comencé a abrir los compartimientos que tenía la camioneta para ver si había algo con que defendernos...no había nada. Le di un golpe al Descansa brazos y Steve me miro confuso por lo que había hecho. Apenas iba a hablar cuando nos chocaron por detrás, Steve detuvo la camioneta de golpe ya que si continuaba acelerando íbamos a chocar contra algo. Los dos nos bajamos de la camioneta y abrimos las puertas lo más que se podía para utilizarlas como escudos. Esperaba a que alguno de ellos dos se acercara para poderle quitar su pistola pero ninguno de ellos se acercaba. Vi que había un pedazo de metal que se había caído de la camioneta por el choque así que lo tomé y volví a esconderme detrás de la puerta. Me asomé un poco para ver cuál de ellos estaba más cerca, para sorpresa mía el novato era quién se dirigía a mi sin saberlo.
Me escondí lo mejor posible y cuando este estaba casi a un lado mío lo golpee con aquel pedazo de metal. Le quite su arma y revise las balas, él tenía tranquilizantes así que le disparé un tranquilizante para que estuviera inconsciente. Camine hacia dónde estaba Steve y este de encontraba luchando contra el otro idiota, traté de disparar pero no tenía un blanco porque los dos se movían constantemente. Me acerqué y comencé a ayudarle a Steve, aquel idiota tenía una de esas varillas que te electrocutaba.
Electrocuto a Steve para luego hacerlo conmigo, ambos nos pusimos de pie nuevamente pero esté idiota le dio un fuerte golpe a Steve en el abdomen lastimándolo, me acerqué a él y salte sobre su espalda para tumbarlo al suelo. Rodé mi brazo metálico sobre su cuello para inmovilizarlo un poco pero era casi imposible ya que este trataba de lastimarme con aquella varilla. Como pude, tomé aquella pistola para dispararle pero esté fue más rápido y me electrocuto hasta dejarme en el suelo. Tomó la pistola de los tranquilizantes y me disparó en la pierna. A como pude me la quite y traté de ponerme de pie, me acerqué a este y lo tomé por las piernas para que cayera al suelo. Pero como él tenía un poco más de fuerza que yo por culpa del tranquilizante, podía derrumbarme fácilmente. Me dio una patada en el estomago, cerré los ojos fuertemente para luego abrirlos, al abrirlos vi como Steve lo golpeaba. Sabía que Steve podía contra aquel idiota pero el gran ego que heredé de mi padre y de mi hermano no me permitía quedarme de brazos cruzados, así que como toda una buena Stark me puse una vez más de pie y me acerqué a él para golpearlo aunque sea una vez más.
